Me había despertado hacia un par de horas, apenas podía pegar ojo, parecía que mi cabeza explotaría en cualquier momento. Entré en el baño y me preparé un baño relajante, algo que no había hecho desde hacía meses, necesitaba relajarme antes de encontrarme con Emily ya que en unas pocas horas estaríamos en camino hacia Francia.
Después del baño me enredé una toalla en el cuerpo y salí a la habitación para elegir que ponerme, como había tenido tiempo suficiente desde que me había despertado, lo había aprovechado para preparar mis maletas.
Las chicas me habían escrito varias veces a lo largo que estabamos en California, estaban muy emocionadas de que en pocos días no encontraríamos de nuevo. Todas las fotos que había aprovechado a sacar se las había enviado a ellas y a mis padres. Las chicas sabían lo que sentía por Emily y en cuanto a mis padres; mi padre no sabía absolutamente nada, parecía feliz con que Wayne hubiera empezado con el apoyo económico, en cambio, mi madre termino adivinándolo todo, no se le escapaba ni una. Ella estaba más que feliz de que yo hubiera encontrado a mi persona, pero siempre le decía que Emily no era para mí, que esto era solo una farsa y no se hiciera ilusiones porque la morena no sentía lo mismo hacia mí. Me dolía, claro que me dolía solo el pensarlo, pero era una realidad y tendría que vivir con ello.
Sali de la habitación junto con las maletas, pero en cuanto los de seguridad me vieron, cogieron el equipaje y lo bajaron por las escaleras llevándolo al coche. Tras agradecerles fui a la cocina ya que no encontraba ni a Emily ni a Jenna por ningún otro lado.
-Buenos días, señorita -Apareció de repente llegando con los brazos abiertos hacia mi
-Buenos días, Jenna -me reí mientras aceptaba el abrazo -¿Dónde está, Emily? -mire alrededor
-Oh -miro hacia otro lado -Salió temprano al ver que no salía de la habitación -suspiro cansada -Ella fue a organizar todo en el avión
-Pero... -intente hablar, pero no me dejó
-Quiso darte tu espacio así que salió y ordenó que cogieran sus cosas cuando estuvieras preparada y os veríais allí -agarro mis manos -¿Puedo hablar contigo unos minutos? -preguntó misteriosamente haciendo que me preocupara
-Claro ¿Qué pasa? -empecé a seguirla hacia el jardín -Jenna...
-Solo quería pedirte que la cuides, Alison -miro hacia el frente mientras yo la miraba a ella -Emily puede parecer una persona indestructible pero no lo es, solo tiene un muro que no quiere derribar porque tiene miedo realmente -me miro con media sonrisa
-No le haría daño, Jen -quise seguir, pero me volvió a interrumpir
-Déjame acabar ¿Si? -asentí dándole paso -Se que todo ha sido una locura desde el principio, que la vida a veces nos da a elegir caminos, a veces nos equivocamos y otras escogemos el correcto pero a veces se puede dar media vuelta y elegir el que realmente es nuestro hogar -se acomodó en la silla -Emily siempre ha elegido sin mirar, da igual lo que pase, siempre avanza y sé que pensarás que no tiene sentido pero si algo sé de ella y de los años que hace que la conozco es que si hace algo es porque tiene alguna razón -se rio -Emily no sabe lo que es en sí el estar enamorada de alguien, nunca experimento eso y a veces no sabe lidiar con algunas cosas pero si de algo estoy segura es de que tiene un gran corazón, por mucho que sea una cabezota y se equivoque -respiro hondo cerrando los ojos -Quiero a Emily como si fuera mi hermana pequeña, sé que su temperamento a veces no ayuda pero es comprensible, ella no ha tenido ese cariño de cuando eres pequeña -mire a Jenna sin entender a lo que se refería -Quiero decir, Los Fields siempre estuvieron ahí pero no personalmente; Emily se crio con los trabajadores y la seguridad de la familia, ellos siempre estaban viajando y para no llevar a una niña tan pequeña la dejaban a cargo de niñeras o los guardias -se secó las lágrimas -Por eso no quiere que se metan en su camino, ella ha crecido por si sola, lo ha aprendido todo a base de palos -cogió mi mano dándole un apretón -No sé qué pasara de aquí en adelante, querida, pero si quiero pedirte una cosa -asentí queriendo que siguiera hablando -Demuéstrale que se merece ser querida y amada, hazle saber que ella lo vale todo por lo que sacrificar las cosas, sé que es difícil lo que te estoy pidiendo pero por ella valdrá la pena
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Mi Reflejo En Sus Ojos
RomanceEmily Fields, una conocida y respetada General militar y Doctora que cuya vida cambia cuando tiene que casarse con Alison Dilaurentis, una Queen Bee y futura profesora de Rosewood High, una unión pactada por la familia. ¿Ganara el amor o la fortuna...