Alejo sabia que Matias era cariñoso, por supuesto que lo sabía, Soule era un chico cariñoso con su familia, siempre que estaba lejos los llamaba sin falta y les hacía saber lo mucho que los amaba, cariñoso con sus amigos siempre abrazandolos, cariñoso hasta con los extraños, ya sea con un simple roce, Matias amaba el contacto físico. Eso era algo que a Alejo le fascinaba, quizás una de las razones por las que se había enamorado del mayor.
Pero también era algo que le molestaba, Veliz no era un chico celoso o eso creía.
Era día de visita para la selección sub20 y los amigos de Matias lo habían ido a ver, y como el marplatenses era un ser social por naturaleza, quería que sus amigos del futbol se llevaran bien con sus amigos por fuera del deporte. Es por eso que Alejo se encontraba sentando entre las dos parejas compuestas por sus amigos mientras miraba fijamente a los amigos de su chico.
Todo había empezado bien, se habían presentado y las charlas surgieron sin incomodad, Barco, como buen adicto que es, propuso tomar mate y todos aceptaron. Pero el problema inició cuando al llegar al patio y querer sentarse en un sofá junto a Matias, sintió que lo alejaban casi de un empujón y pudo ver como, quién creía que era el amigo de la infancia de Soule, se sentaba en su lugar; con pesar y frunciendo su ceño se sentó entre Giay y Gauto, que al ver que los espacios eran pocos sentaron a sus respectivas parejas en sus piernas. Eso no ayudó para nada a Alejo, quería a su chico con él, igual que sus amigos con sus novios y queria alejar a ese muchacho, supuesto amigo, del marplatense.
Tratando de calmarse y no queriendo parecer un celoso posesivo suspiró e intentó volver a la charla.
Pero todo aspice de tranquilidad desapareció cuando escuchó que Matías decia:
"-Lauti bebé, pasame un bizcocho-".
El apodo hizo que algo se revolviera en su interior y sin aguantar más, se paró de su lugar llamando la atención de todos los presentes.
"-Mati, acompáñame a buscar más comida para los invitados-" Se excusó Alejo con una sonrisa falsa.
Matias asintió parándose con la intención de ir junto al más alto cuando una voz lo interrumpió.
"-Está bien, no es necesario, quedate-"
Aquello ocasionó mayor molestia en el menor que con una falsa amabilidad respondió.
"-Si es necesario Lauti, ya volvemos-".Una vez dentro de la cocina miró a Matias quién solo se limitó a devolver la mirada con confusión.
"-Asique... quien es ese tal "Lauti bebé"-" Alejo intentó que los celos no se notaran en su voz pero no lo pudo evitar, provocando una pequeña risa en Matias debido a la ternura.
"-Amor, sabes que soy cariñoso con todos mis amigos, y a él lo conozco hace como 20 años.-" Contestó mientras se acercaba a abrazar al más alto.
"-Si, pero me molesta que le digas así, yo soy tu único amor, único bebé y único todo-". Alejo quería sonar intimidante pero era lo que menos estaba logrando.
"-Ademas te mira como te miro yo, y eso no me gusta-".Matias rodó sus ojos por los celos de su novio y rió negando con la cabeza.
"-Gordo... tiene novia-". Ahora que Soule aclaraba la situación, Alejo se sonrojó fuertemente por lo irracional que había sido.
"-Ademas sabes que sos mi único amor, mi único bebé, mi único todo-" Matias repitió las palabras del menor para luego darle un suave beso en los labios, trasmitiendo tranquilidad.
Ahora que todo estaba aclarado, decidieron volver con sus amigos, aunque se ganaron un par de cargadas, debido a que llegaron con las manos vacías y Alejo no permitió que Matias se sentara en otro lugar que no sean sus piernas.
Bueno esto surgió porque leí en tw que alguien dijo que Matias tenía un noviecito de la infancia y me dió ternura. Aclaro por las dudas que todo es ficción, no tengo ni idea si Mati tiene un amigo que se llama Lauti, lo inventé yo y hay como 10 millones de Lautis en el mundo, alguno tiene que conocer.