Le dolía tanto el pecho, sentía que le habían arrancado el corazón sin piedad alguna, sentía que su alma ya no estaba presente en su cuerpo.
Podrían llamarlo exagerado, pero algo se estrujaba en su interior cada vez que veía y recordaba las lagrimas que bajaban como cascadas por los ojos de Matias.
Si, Alejo estaba dolido porque habían perdido el mundial, pero nada le dolía más que ver los ojos del marplatense empañado de lágrimas, sus mejillas y nariz roja, y escuchar los pequeños hipidos que salían de sus labios. En la cancha Soule intentó parecer fuerte reconfortando a sus compañeros, pero al llegar a su cuarto y encontrarse solo con la compañía de Alejo, se rompió, transformandose enbun pequeño niño desolado, que solo buscaba consuelo.
Alejo se acercó a aquella bolita que se encontraba acostada en su cama, y peinando sus cabellos susurró.
"-Mati, te dejé ropa y el baño listo, pegate una ducha y volve, hoy dormimos juntos-" Intentó consolarlo Veliz, hizo su mayor esfuerzo pero él realmente no sabía que hacer en esa situación, pero pareció funcionar, ya que Matías se levantó y sin decir una sola palabra entró al baño.
El tiempo pasaba y Alejo todavía potdua escuchar el llanto sobre el ruido de la ducha, y comenzaba a preocuparse; cuando estaba decidido a entrar y buscar al mayor, oyó la canilla cerrarse, por lo que suspiró relajandose un poco.
Luego de unos minutos la puerta fue abierta dejando ver, entre el vapor del baño, a un Matias que lo miraba con algo de confusión detras de tantas lagrimas.
"-Ale... me diste tu remera de central-" Dijo señalando la camiseta que ahora traía puesta. Algo se removió dentro de Alejo al verlo con aquella prenda y sonriendo asintió.
"-Sé que te gusta usar mi ropa cuando estas nervioso, asique pensé que también te ayudaría ahora-" Sonrió algo apenado por su idea, recordando todas las veces que había encontrado al menor utilizando sus buzos o remeras anres de cada partido o situación de estrés.
Matias no dijo nada, y solo se acercó al cuerpo del 9 de la selección, al llegar a la cama de este se acostó a su lado, esta vez más calmado, y escondió su rostro en el pecho ajeno.
"-Gracias...-" Susurró algo ahogado debido a que aún no se alejaba del cuerpo del chico, y no pensaba hacerlo.
"-No es nada Mati... pero en esta vida nada es gratis-" Contestó Alejo, y con confianza y sabiendo lo que hacía, obligó al mayor a alejar el rostro de su pecho, lo tomó suavemente por el mentón, y lo besó con suavidad, casi como si tuviese miedo a romperlo.
Algo sorprendido Matias correspondió el beso, sintiendo sus mejillas arder.
Habían perdido la final, pero él habia ganado en el romance.
Buenasss, traigo noticias, subí un One Shot de Gauto y Luka romero por si quieren ir a leer.