EL PRINCIPE OLVIDADO

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Cuando a Aemond iba caminando para volver a sus aposentos se dio cuenta que en la entrada ya no estaban los mismos guardias que tenía cuando llego, ahora estaba un caballero que él conocía muy bien

Sir Erryk Cargyll

Él fue el encargado de cuidarlo a él en su exilio junto con una docena de hombres más, pero él fue elegido para cuidarlo a él especialmente

Él era una Alfa, era con quién Aemond más había convivido, fue a él al que le exigió que lo entrenará que no lo tratará como un príncipe porque, aunque en el exilio él era el que más poder tenía sobre el resto de personas con las cuales vivía, el necesitaba que lo entrenarán en serio sin ningún tipo de restricción y eso lo llevo a decirle a sir Erryk que se olvidará del título de príncipe en sus entrenamientos, nadie lo iba a reprender por entrenarlo como es debido

—Mi príncipe— Sir Erryk hizo una reverencia

—Sir Erryk— correspondió el saludo

—Supongo que como tú mis pertenencias ya llegaron también—

—Así es mi príncipe todo ya está acomodado y traje a un grupo de sirvientas para que se sintiera más cómodo en su estancia aquí —

—Perfecto— Aemond asintió satisfecho

Aemond voltio a mirar discretamente a su alrededor y viendo vio que no había nadie por los pasillos, le indico al caballero que abriera la puerta y lo invito a pasar

Al estar adentro y con la puerta cerrada, Aemond se acercó al caballero y lo beso

—Te extrañe— murmuro el príncipe

—Yo también te extrañe— sir Erryk acerco a Aemond para que sus cuerpos se tocaran y coloco sus manos en la pequeña cintura del Omega, rápidamente empezó a soltar feromonas las cuales calmaban al príncipe

Si bien Aemond solo había estado con betas en ámbito sexual porque era más fácil de tener como amantes, sir Erryk era un excepción él siempre estaba ahí para él y aunque él era consciente de que era su deber con el tiempo se acostumbró a la presencia del Alfa, ellos no tenían una relación sentimental sabían que eso era imposible por sus posiciones y tampoco tuvieron una relación sexual ya que los dos estaban conscientes de las cosas malas que podían salir de un encuentro sexual entre un Alfa y Omega fértiles y sin ningún tipo de marca así que preferían no arriesgarse, pero eso no los freno de buscarse mutuamente para consolarse sus aromas sin duda eran atractivos para el otro

Se buscaban en forma de consuelo cuando Aemond necesitaba calmarse se acurrucaban juntos, o cuando alguno simplemente necesitaba hablar lo hacían, los besos y caricias fueron lo único que se permitieron eran como un bálsamo para sus almas dañadas y sir Erryk estaba consciente del todo sufrimiento que había pasado el príncipe es por eso que no se opuso cuando noto que el joven Omega empezaba a buscarlo, para ser honesto Tato el cómo su lobo estaban muy orgullosos de llamar la atención de un Omega y no de cualquier Omega si no de Aemond Targaryen, el omega que castro a un Alfa cuando intento colarse en su cama durante su celo sin duda era algo de cual sir Erryk se sentía orgulloso

—¿Cómo ha estado tu estadía hasta ahora? — pregunto después de separarse del beso, pero sin alejarse

—Bueno la verdad es que dormí hasta tarde después de volar todo el día, me desperté cuando vinieron a avisarme del reclamo— Aemond tenía su cabeza enterrada en el cuello del caballero más específicamente en glándula de olor

—¿Reclamo? — Erryk empezó a acariciar el cabello del Omega

—Si, al parecer Vaemond Velaryon presento un reclamo para ser nombrado heredero de Driftmark—

—Vaya y bajo que argumento— pregunto con curiosidad

—Declarando frente al rey y toda la corte que Lucerys es un bastardo y no tiene una pizca de sangre Velaryon—

—Vaya, el hombre es realmente valiente—

—Más bien estúpido, se atrevió a decir que la princesa Rhaenyra era una zorra enfrente de todos — Erryk hizo una mueca

—Bueno sin duda era estúpido, ¿qué le pasó? —

—Daemon lo decapitó en frente de todos— Aemond se encogió los hombros como si no fuera la gran cosa mientras se separaba del caballero para ir hacia una jarra que estaba en una mesa cerca a la ventana

—Bueno el príncipe Daemon es conocido por siempre defender a los que ama —

—Dímelo a mí— resopló Aemond

—¿Pasó algo más? —

—¿Ah? O la cabeza de Aemond rodó hasta mies pies manchando de sangre mis botas—

—¿Y tú qué hiciste? —

—Puede que haya pateado la cabeza lejos de mí — Sir Erryk soltó una carcajada hasta acercarse al Omega y tomarlo por la cintura para luego darle un lento y perezoso beso del cual se separó solo porque necesitaba respirar

—Eres único— susurros

—Lo sé, y eso te encanta— Aemond se acercó a su oreja y le dio un pequeño mordisco

—Sí, me encanta, tú me encantas— Sir Erryk paso sus manos por toda la espalda del príncipe para luego llegar a su trasero y apretarlo— joder como amo tu aroma, es perfecto— Aemond gimoteo al sentir las manos de alfa en si trasero

Con toda la fuerza de voluntad que pudo recoger, sir Erryk se separó del Omega dejando un casto beso en los labios

—Es mejor que vuelva a mi puesto— empezó arreglarse para verse decente

Aemond hizo un puchero, pero asintió, los dos sabían que por más que quisieran no podían arriesgarse, se tenían mucho aprecio como para tratar de arruinar la reputación del otro

Antes de salir de la habitación sir Erryk le comento a Aemond algo había escuchado

—Según pude escuchar el rey quiere tener una cena hoy con toda su familia —

—¿Con toda? — Aemond tenía el ceño fruncido

—Así es, así que supongo que deberías estar presentable para la noche — Aemond simplemente asintió

—Voy a ir volar con Vaghar, volveré justo a tiempo para prepararme para la cena —

Erryk hizo una profunda reverencia hasta de hablar en tono extremadamente formal— como desee su alteza— Aemond simplemente rodó los ojos y le regaló una pequeña sonrisa divertida al caballero

—Has pensado en dejar que tú familia sepa de tu casta— pregunto cauteloso

—Creo que dejaré que se enteren a su tiempo, necesito primero recolectar un poco de información sobre el ambiente político para luego tomar una decisión, pero igual no es algo que pueda ocultar por mucho tiempo, solo me quedan 3 frascos con supresor así que es inevitable, nadie aquí ayudaría a un Omega a ocultar su casta y menos si ese Omega es un Targaryen, soy el primero Omega desde el rey Jahaerys—

—Todo estará bien, yo estaré aquí para protegerte, aunque sé que sin duda puedes protegerte tu solo— Erryk se acero para acariciar la mejilla del Omega

—Lo sé— susurró Aemond volteando su cara hacia las caricias— y agradezco que te quedes conmigo, a pesar de todo—

—Yo siempre estaré ahí para ti—

—¿Siempre? —

—Siempre— jura con una voz llena de devoción, misma devoción que reflejaban sus ojos

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JAJAJAJAJA ¿Qué piensan de esta pareja? honestamente a mi me gusta 

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