EL PRINCIPE OLVIDADO

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Aemond se despertó gracias a que alguien decidió entrar a su habitación, estaba listo para gritarle a cualquiera que se haya tomado el atrevimiento de entrar a sus aposentos, pero antes de que pudiera levantarse recordó que ya no estaba en Essos, recordó que estaba en la fortaleza roja por órdenes de su padre así que abrió su único ojo para poder ver al intruso

Era una sirvienta que se veía muy nerviosa e incómoda por estar ahí

—¿Sí? — Aemond fijo su vista en la niña que se retorció al ver que estaba viendo al príncipe abandonado como lo habían apodado cuando se conoció lo de su exilio

—Mi príncipe, se solicita su presencia en el salón del trono — la niña hizo una reverencia

Esto confundió Aemond, esperaba que su padre lo llamara a sus aposentos para poder verlo, pero no al parecer quería humillarlo en frente de todos los lores

—¿El rey pidió mi presencia? — pregunto la mandíbula apretada

—Uhm... No su alteza se pidió que todos los miembros estuvieran presentes para el reclamo— la pobre sirvienta tartamudeo al ver al príncipe apretar la mandíbula en un claro gesto de molestia

—¿Reclamo? — ahora su voz salía más curiosa

—Si su majestad, ser Vaemond Velaryon está haciendo un reclamo para ser nombrado heredero de Driftmark—

—¿En serio? — ahora Aemond di estaba intrigado que llevaría a el hombre a cuestionar la sucesión que ya había sido acordada

—Si la princesa Rhaenyra y su familia ya ha llegado para presenciar la petición, ahora todos se están dirigiendo al salón del trono —

—Está bien, que me preparen un baño y luego déjeme, iré apenas termine— La sirvienta hizo una reverencia y salió a cumplir la orden, minutos después varias sirvientas entraron para prepararle el baño y luego salieron

Cuando estuvo sumergido en el agua calienta Aemond se permitió pensar en lo que había aprendido hace unos momentos

Así que estaba cuestionando la legitimidad de los hijos de Rhaenyra, bueno no es como si eso no fuera verdad, cualquiera con dos ojos podría ver que esos bastardos no tienen ni una gota de sangre Velaryon, lo que estaba haciendo su hermana está en contra de todas sus tradiciones, la herencia de Driftmark debería pasar a una de las hija de Daemon ya que ellas si son Velaryon de verdad pero su hermana jamás permitiría esto, ni su padre, el siempre estará ahí para justificar todos los errores de su hija sin importar que esto le cueste la lealtad de muchas personas, nadie respeta a los bastardos y la única razón por la cual respetan a los de Rhaenyra era porque el rey siempre estaba ahí para defenderla

Oh Aemond no podía esperar a que el viejo decrépito se fuera a la tumba, en ese momento vería que tan buena es Rhaenyra como reina ya no tendrá a nadie quien la defienda estará sola y Aemond se asegura de estar ahí en primera fila para ver cómo los lobos se la comen

Después de lo que pareció una hora Aemond salió de la bañera y se cambió, el no usaba ningún color de ninguna de las facciones políticas que sabía que existían en su familia, él no era ni un verde, ni un negro con rojo, su guardarropa era solo cuero negro, nunca usaba otro color

Cuando estuvo listo con su ropa, su cabello y su parche en el ojo mutilado perfecto salió de la habitación para encontrar a un caballero que lo dirigió al salón de trono, al parecer era el último en llagar porque ya todos estaban ahí

Todos los presentes se quedaron paralizados al escuchar a quien presentaban

—El príncipe Aemond Targaryen de la casa Targaryen, tercer hijo del rey Viserys Targaryen y jinete de Vaghar—

Aemond entro con la cabeza en alto y los brazos en su espalda, no le iba dar la satisfacción a esas víboras de verlo frágil, el Aemond del cual se burlaron ya no existía, él quería morir así que él se encargó de matarlo, no permitiría que lo volviera a humillar

Se acomodó en un lugar lejos de su madre que lo veía con ojos bien abiertos y mil emociones pasado por sus ojos, pero él no le dedicó ni una solo mirada

Eligió un lugar en el cual podía ver a todos para a la vez no tenía que hacer contacto visual con nadie este le daría la mejor vista para lo que estaba por pasar que sin duda será entretenido

Tampoco le dedicó una mirada a su abuelo el cual se veía muy cómodo en el trono de hierro Aemond se burló internamente un beta con grandes ganas de poder pero que a pesar de ser la mano del rey todavía no tenía suficiente, Aemond sabía que para hombres como Otto nada es suficiente siempre quieren más como sanguijuelas

Él podía sentir como todos los miraban, pero él jamás apartó la mirada del trono ignoro al que estaba sentado y concentro solo en el trono, era hermoso, imponía respeto con solo estar en el mismo salón de el

Aemond registro como Otto empezó a hablar y luego le cedió la palabra a Vaemond, pero él estaba muy concentrado en la imagen de el mismo sentado en el trono de hierro con la corona de Aegon el conquistador en su cabeza

Se vería perfecto

Se vería poderoso

Se vería como un verdadero Rey

Salió de sus pensamientos al escuchar como Otto ahora le otorgaba la palabra a Rhaenyra para defender a su hijo

Oh esto iba ser interesante, esta era la oportunidad de Rhaenyra de demostrar que sería una reina capaz y con el conocimiento y fortaleza suficiente como para poder imponerse a un hombre lleno de rencor y ambiciones

Esta era la oportunidad de Rhaenyra para demostrar de que ella era un dragón y no un gatito rodeado de lobos

Era su oportunidad de probar porque su padre siempre la eligió a ella como su heredera, era el momento de probar que ella era capaz de sentarse en el trono y gobernar a pesar de las oposiciones de las personas

Pero apenas su hermana inicio su discurso fue interrumpida por las puertas las cuales se abrieron para dejar ver a rey

—El Rey Viserys de la casa Targaryen, el primero con el nombre, Rey de los Ándalos y de los Rhoynar y de los primeros hombres, señor de los siente reinos y protector del reino—

Esto debe ser una broma

Ese fue el pensamiento al ver cómo su padre con dificultad se sentaba en el trono con ayuda de su hermano

Aemond se desconectó por completo de lo siguiente sintiéndose decepcionando por como siempre todos parecían salvar a Rhaenyra de todos sus deberes, el vino a ver un espectáculo vino a ver cómo todos sacaban las garras y se despedazaban entre ellos, pero eso no pasó

Aemond vio como la cabeza de Vaemond salió rodando después de que su tío le cortada la cabeza con la hermana oscura, la cara de Aemond se llenó de disgusto al ver cómo la cabeza rodo hasta sus pies llenado sus botas de sangre, pero antes de que alguien pudiera hacer algo, Aemond patio la cabeza devuelta cerca de su cuerpo para luego hacer una mueca al ver sus notas manchadas

Todos se quedaron con la boca abierta la ver al príncipe agacharse y tratar de limpiar su calzado con un pañuelo sin estar ni un poco perturbado por que acababan de cercenar le la cabeza a un hombre en ese momento

Todos por un momento se quedaron sin palabras al ver cómo el príncipe se levantaba y tiraba el pañuelo al suelo, todos salieron de su impacto al escuchar al rey toser y a la tenía correr hacia el para ayudarlo

Aemond tomo esto como una señal para irse y lo hizo, rápidamente se mezcló entre las personas y se fue a sus aposentos para pensar en todo lo que había visto y aprendido hoy

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la primera vez que Aemond ve a su familia 

espero que les este gustando déjenme sus opiniones