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Horas después los recién casados se encontraban cambiándose para celebrar una nueva coronación, tanto Daemon Aegon como Cregan estuvieron presentes en la reunión del consejo donde todos aceptaron coronar a Aemond como rey junto con sus recién casados esposos, todas se habían sorprendidos por la noticia pero nadie dijo nada al respectos, todos lo hombre decidieron que se leería la voluntad del difunto rey Viserys para que el nuevo nombramiento tuviera más peso y desde que la salió el sol se le informó a septon sobre la coronación

—Debemos hacer algo más— declaro Daemon

—¿Mas? — Cregan lo veía con curiosidad

—Rhaenyra no creerá la decisión de Viserys ella piensa que es su heredera lo fue por años—

—¿Crees que iría en contra de los deseos de su padre? —

—Creo que ha estado muy acostumbrada a su posición como para dejarla ir sin pelear— todos se quedaron callados ante las palabras del príncipe picara

—Tienes razón— Aegon asintió —pero nos ocuparemos de esto después de la coronación y la celebración de nuestra boda— los dos alfas le sonrieron al menor, —mañana convocaremos una reunión temprano— todos los presentes asintieron

Y si Daemon y Cregan se dieron cuenta como todos los hombres del consejo no los miraban a los ojos o de vez en cuando temblaban, así como las sillas vacías no dijeron nada al respecto

Nadie tampoco noto como una figura escuchaba toda conversación detrás de la puerta a cuál se encontraba sin guardias ya que todos estaban ocupados con las preparaciones, la figura después de unos segundos se separó y se deslizo por los pasillos sin que nadie lo viera, logrando así salir de la fortaleza

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Aemond se encontraba caminando por los pasillos con un hermoso conjunto rojo y una capa negra su cabello estaba cuidadosamente peinado despejando su rostro, con dos pequeñas trenzas a los dos lados de su cabeza dejando caer el resto de su cabello lacio por su espalda, las trenzas estaban decoradas con pequeños rubís

Detrás de él venia sir Erryk el cual admiraba al que sería su futuro rey

—¿Todo está en orden? — hablo el omega notando que ya casi llegaban a la entrada de la fortaleza

—Todo está bien su majestad— hablo el guarda con seguridad, —aunque nadie ha logrado verlo, parece que se esfumo— Aemond se detuvo por un segundo antes de continuar

—Debemos encontrarlo sir Erryk—

—Hare todo lo que pueda— el omega asintió

—Necesito a Daemon— hablo el omega más para él, guardia iba a preguntar, pero en ese momento llegaron a la entrada en donde los esperaban la reina viuda su hermano menor y sus 3 maridos, al verlo los alfas sonrieron y Aemond se acercó a ellos con una sonrisa beso a los 3 en los labios, luego miro a su hermano menor y sin decir nada lo abrazo

—Debemos hablar— susurro en alto valyrio el menor asintió y sonrió

—Te ves hermoso hermano— Aemond sonrió —te vez como todo un rey— esto provoco la risa entre todos los Targaryen

Al separarse Aemond miro a su madre, la reina viuda la cual vestía de verde oro eso no molesto al omega, con un poco de vacilación Alicent se acercó Aemond y tomo de las manos, el omega la miro con curiosidad y espero

—Lo siento— susurro la mujer por todo Aemond la miro y asintió —te ves hermoso hijo— la última palabra sonó quebrada —serás un excelente rey Aemond miro a su madre y asintió dejando ver una pequeña sonrisa

EL PRINCIPE OLVIDADODonde viven las historias. Descúbrelo ahora