♱ 𝐈𝐝𝐞𝐚 𝟗 ♱

485 58 45
                                    

Haruko

¡Ay! Esta imagen no sigue nuestras pautas de contenido. Para continuar la publicación, intente quitarla o subir otra.


Haruko

—Haruko, quédate a cenar y a dormir en mi casa.

Qué.

La duda ofendía, o sea, obvio que quiero entrar a su casa. Se rumoreaba que los Shiba eran hijos de empresarios, por lo que... bueno, digamos que tienen una buena cantidad de dinero, por ello tenían una casa realmente grande. Había que entrar si o si.

Aunque... tampoco sabía que era lo que iba a opinar ella... Espera, ¿qué mierdas me importa?

Bueno, iba a aceptar pero no hay que hacerse el fácil, y menos con Shiba-senpai.

—Yo.. es decir, tampoco quiero incomodar a tu hermano, seguro es incómodo.

Taiju me miró para después sonreír con algo de picardía.

—¿Te preocupa ese enano? Los fines de semana sale con su pandilla, a si que no hay de qué preocuparse— tomó mi brazo con delicadeza para deslizarse por mi muñeca hasta tomar mi mano, haciendo que el recorrido provocara un escalofrío en todo mi cuerpo.

Me gustaría saber como chingados acaba siendo tan sensual cuando se lo propone.

—Está bien... pero solo porque mañana no hay clase.— Carraspeé desviando mi mirada a un lado pero aún sin mirarlo, podía presentir que tendría un brillo en los ojos lo suficientemente intenso como para dejarme ciego.

—Bien, entonces, pasemos— me llevó de la mano con una notable emoción y sacó las llaves para abrir la puerta.

Efectivamente, los rumores eran los más acertados que había escuchado en mucho tiempo, ya que nada más entrar, veías una amplitud inmensa, y nada más entrar, ya veías unas escaleras que indicaban que había una segunda planta. La puta madre.

—Toma, puedes dejar los zapatos aquí— me ofreció unas zapatillas mientras que con la otra mano señalaba la fila de zapatos que había, por lo que opté por continuarla poniendo los míos y poniéndome las zapatillas que me ofrecía Taiju.

—Oh, gracias y... disculpen la intromisión— dije algo bajo, ya que realmente tenía la sospecha de que sí había gente en la casa.

Repentinamente se escucharon unos susurros seguidos de unos fuertes pasos que se silenciaron cuando una chica se asomaba por una puerta algo alejada de nosotros.

Inmediatamente abrió los ojos con sorpresa y se escondió nuevamente para 'susurrar' algo así como "TAIJU AL FINAL SE TRAJO A SU POLOLO".

Vale. Podían esconder algo más el hecho de que me llaman "novio de Taiju", más que nada porque es la primera vez que los veo y ya me entero de las pendejadas que andan diciendo.

Finalmente, la chica salió y vino directamente hasta donde estábamos. Específicamente hasta donde yo estaba, acercándose tanto que solo nos separaban unos centímetros de distancia y la diferencia de altura.

Ideas para conquistarle || Taiju Shiba x Male OcDonde viven las historias. Descúbrelo ahora