SERENDIPITY'S BEAUTY • [VMIN]

× DIECIOCHO ×

Que raro es estar en casa un miércoles por la mañana. Lo último que escuche fue a Jisoo llendose a trabajar, lo que me relaja pues no quiero verla y por el ruido en la cocina se que Yoongi está preparando su desayuno y el de su ahora novio que acaba de llegar debido a que estuvo tocando en un bar en Busan y acaban de regresar.

Yo estoy despierto desde las seis porque no se que hacer con mi vida en este momento. Me gustaría hablar con Hoseok y disculparme con mi Namjoon pero se que no es el momento. Hoseok necesita bastante tiempo para que se le pase el enojo y si lo presionó lo único que conseguiré es que se enoje más.

Cuando peleamos siempre me saca en cara lo que hice hace diez o quince años y lo empeora todo. Yo recuerdo lo que él me hizo también y la discusión se convierte en una batalla campal. Pero lo que peor me sabe de todo esto es que le he fallado a Namjoon

Ayer estaba tan enfocado en mi que no recordé el recital de mi cachorro. Aunque siendo sincero no recordaba que tenía un recital, es a él a quien tengo que pedirle perdón pero irlo a ver significa ver a mi hermano y eso ahora mismo no me conviene.

—Minie ¿Estás despierto? Te hice cafe— dice Yoongi asomándose por la puerta.

—Gracias, Yoongi— respondo aunque no quiero nada.

—¿Que haces tu aquí a estas horas— dice Jungkook quién se ha aparecido solo en boxers y abraza por la cintura a Yoongi.

—¿Y tú de dónde vienes a estas horas? Claramente no de la universidad...

El se ríe y deja un beso en el cuello de Yoongi y se va de la habitación, yo salgo con Yoongi y nos sentamos en el mesón de la cocina.

Doy un sorbo al café que me ha servido Yoongi amablemente. Si no me hubiese. Despedido ahora estaría en la oficina, deseando que dieran las dos para ir a almorzar. Estoy pensando que lo que ha sucedido debo tomarlo como una oportunidad de cambiar mi vida laboral. Nunca me ha gustado el trabajo en oficina, siempre he sido un fanático del baile, la moda y las tendencias, asi que me quiero dedicar a algo como eso.

En fin.

—Bueno, así que después de todo aquella bruja se salió con la suya— dice Jungkook después de enterarse de todo —Le has servido como pantalla de humo ahora nadie sospechara de ella.

Un momento, aquello tiene sentido.

—Tienes razón. Puede que haya planeado todo eso para lograr que me despidan— respondo pensativo —Es obvio... Ella es la que pasaba información a Sexy Beauties.

Demonios, con todo lo que pasó ayer no me había detenido a pensar en esto y por lo que veo Yoongi tampoco. Menos mal que tenemos a un eterno estudiante que ha dado con la respuesta.

—Esto huele a película de espías, pero que feo corazón tienen las arpías— dice Yoongi dándole un sorbo a su taza de té.

—Pero todo eso no pudo haberlo hecho sola, Jimin. Estoy seguro que tiene un cómplice, alguien que sepa de informática o tecnología. La persona que ha hackeado tu correo— dice Jungkook.

—Pues no se quién puedo ser, no se me ocurre nadie, la única persona que siempre está con ella es Jeongyeon y yo la veo muy poco intelectual para hacer todo eso, solo es una tipa bastante mediocre y más que todo acosadora de omegas.

Pero derrepente se me prende el foco. Esto era a lo que se referían cuando me encerraron en el baño en aquel restaurante. Hablaban de un polluelo, o era un pajarillo o pichón, no lo recuerdo exactamente pero dijo que era hora de pasar a la acción. Pensó que las había descubierto...

Ahora todo tiene sentido. Por eso Jeongyeon siempre miraba su laptop de maneras misteriosas.

Y yo pensando que veía cochinadas.