'°•-Me disculpo. Perdón. ¿Quieren gomitas?-•°'

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Admito que, en cuanto Sigma me tomó de la mano, pensé en echar a la basura la idea de disculparme con los chicos.

Es decir, era un día maravilloso. Había regresado de mi suspensión, Sigma me abrazó, me besó la mejilla, me tomó de la mano y aceptó ser mi novio. Y fuimos por galletas y gomitas  de la máquina expendedora. No quería que nada saliera mal y me dañara el día.

Pero en cuanto cruzamos el patio y vimos a ambos sentados en una banca sin mirarse ni hablarse, Sigma me puso una mano en el hombro.

—Oye, no quiero entrometerme en tu relación con tus amigos —Dijo—. Deben extrañarte mucho. Deberías hablar con ellos.

El hecho de que él se preocupara por mi relación con mis amigos sólo me reiteró que de verdad me amaba. Así que acepté. 

Él se inclinó y me besó la mejilla, y luego se fue por el pasillo, con su cabello bicolor sacudiéndose al aire.

Caminé hasta la banca y me paré frente a ellos. Ambos miraron al suelo. Yo desplacé mi equilibrio del talón a la punta del pie.

—Hola —Saludé. 

Vi que Fyodor hacía un pequeño, casi imperceptible, gesto con la cabeza. Dazai simplemente miró a un lado.

—Sigma y yo somos novios —Comenté. Fyodor inmediatamente alzó la cabeza. Dazai hizo lo propio. 

—¿De verdad? —Preguntó, boquiabierto.

—¿No me tenías fe? —Sonreí levemente— Yo sólo venía a... bueno...

—Felicidades —Dijo Fyodor con un hilo de voz—. Lo quieres mucho, ¿no? Espero que duren mucho.

La tristeza en su tono seguiría siendo un gran misterio para mi durante un largo tiempo.

—Gracias —Contesté—. Aunque eso no importa realmente...

—¿No importa? —Preguntó Dazai mirándome fijamente, con uno de sus ojos vendados todavía, aunque estaba seguro de que ya debería haber sanado—. Llevas esperándolo desde hace dos años, por fin tienes un novio, ¿y dices que no es importante?

—¡Porque no lo es! —Exclamé, ya un poco cansado de que me interrumpieran— Lo único que quiero ahora es que hablemos de toda la mierda que ha ocurrido este año, porque ya no soy capaz de soportar que no nos hablemos, o nos miremos, ¡ni siquiera parece que respiramos el mismo aire! ¡Quiero volver a como era antes de todo, de Sigma, Chuuya y Oguri! ¡Quiero que volvamos a ser amigos!

No me había dado cuenta de que había alzado tanto la voz y apretado tanto los puños, pero no me importaba. Sólo quería recuperar a mis amigos. Y en ese momento me sentí realmente culpable por haber considerado dejarlo así y disculparme otro día.

—Sé que debe haberse sentido mal que los abandonara por alguien que apenas conocí este mismo año y dedicarle tanta atención, cuando ustedes han estado conmigo desde hace tanto tiempo y me han apoyado tanto... debí ordenar mis prioridades.

Fyodor y Dazai me miraron, y no sé por qué me dio la impresión de que no se habían mirado ni se habían hablado desde la pelea que tuvimos. 

—Yo también lo siento —Se disculpó Fyodor—. No debí ser tan grosero contigo. Entiendo que te guste Sigma, y no debí ser tan celoso. No quería que nos abandonaras y nos dejaras a un lado, y supongo que pensé que sería mejor hacerlo yo primero para que no doliera tanto. Perdóname. Yo no quería perderte.

—Yo también lamento haberte ignorado —Se apresuró a decir Dazai—. Y por haberte golpeado, estrangulado y casi sacarte un ojo.

Me miró muy fijamente. 

El Crush (Siglai/Fyogol) (Hiatus)Donde viven las historias. Descúbrelo ahora