El Crush (Siglai/Fyogol) (Hiatus)

'°•-De mal a peor...-•°'

Bueno, no puedo decir que realmente haya sido malo malo, osea, Sig y yo terminamos bien ¿no? Todo tranquilo. Seguiríamos siendo amigos y nos íbamos a apoyar en todo. Y en parte, mi cerebro dijo "uff, por lo menos ya terminó todo", aunque eso fue como media hora después, porque seguía reiniciando el Windows después de lo que había sucedido.

Como suponía que la cita se había cancelado, regresé a casa. Fyodor seguramente seguiría molesto, Dazai no querría hablar de nada y no tenía ganas de ir a casa de Chuuya.

—¿Niko? ¿Eres tú, cielito? —Preguntó mi amá al escuchar el picaporte.

¿"Cielito"? ¿Hacía cuánto mi mamá no me llamaba "cielito"? Mi mente terriblemente imaginativa empezó a imaginar (valga la redundancia) los peores escenarios, además que mi madre sonaba nerviosa. ¿Y si estaba como rehén? ¿O si había matado a alguien? ¿Habría recibido una llamada de amenaza?

Decidí que estaba exagerando.

—Sip. Ya llegué —contesté y cerré la puerta tras de mí.

Mamá y papá estaban sentados en la mesa, uno al frente del otro. No había sangre, ni nadie estaba amordazado o con una pistola apuntando a su cabeza, por lo que supe que mi ligero momento  de paranoia había sido bastante innecesario.

—Bienvenido a casa, hijo —saludó mi padre con un gesto un poco tenso—. ¿Qué tal el colegio hoy?

—Ah, pues, Fyodor y Dazai casi se matan. —Expliqué— Y Sigma y yo terminamos.

El semblante de mis padres cambió a un gesto de preocupación y se miraron entre si.

—Ay, Niko, cuánto lo sentimos... —Empezó mi mamá. 

Yo la estuve con un gesto de la mano y les sonreí levemente. Sabía que ellos adoraban a Sigma y creían que era bueno que estuviéramos juntos (aunque menos mal nunca se enteraron de esa vez que nos escapamos del colegio para comprar unos stickers de un anime y nos quedamos por fuera). Yo no quería que se preocuparan.

—Hey, está bien —los tranquilicé—. No fue nada malo, fue más bien... Bastante tranquilo. Seguimos siendo amigos, sólo que... ya no era lo mismo. Todo está bien, en serio.

Ambos suspiraron y volvieron a mirarse. Parecieron tener una discusión silenciosa mientras yo miraba sin poder descifrar qué se estaban diciendo tácitamente.

—Bueno, pues si tú lo dices... —Mi madre se levantó y me quitó la mochila para luego guiarme al sofá y hacerme sentar— Bueno, tu padre y yo queríamos, eh... ¡Invitarte! Nos pareció que sería buena idea. Además ahora que dices que terminaste con Sigma... Incluso aunque digas que no fue tan malo, quizás sea bueno ir y despejarnos, ¿No crees?

Obvio había algo más escondido en esa idea de irnos. Pero la verdad, ya me hacía falta. Y si, mi madre tenía razón. Sería buena idea ir para despejar la mente.

Al día siguiente en el descanso decidí hablar con Fyodor y Dazai. Ellos estaban sentados en la banca de siempre, aunque mucho más separados que de costumbre. Yo solía verlos, con Fyodor montando una de sus piernas sobre el regazo de Dazai y esté tomando a su novio de la cintura. Ahora parecía que estaban en una isla flotante y que cada uno quisiera estar en el extremo opuesto del otro. Así que me senté en medio.

—¡Hey! —Saludé, quizás con demasiada alegría mirando la situación— ¿Qué tal?

Ambos me miraron de reojo, pero no me contestaron. Me dio la impresión de que no habían hablado desde el día anterior, y que sólo se sentaban juntos porque no tenían con quién más hacerse. No porque se llevarán bien. Era evidente que no.

Suspiré.

—Sigma y yo terminamos.

Es sorprendente el cambio de actitud que esa frase provocaba. ¿En serio era tan importante?

Ambos se incorporaron se inmediato e incluso intercambiaron miradas. Lo mismo que habían hecho mis padres. Esa comparación me irritó un poco. Aunque, bueno, sólo se miraron por un momento, y luego desviaron su atención hacia mí.

—¿Qué? —Exclamó Fyodor— ¿En serio? Mierda, Nikolai, lo siento tanto.

—Oh, mierda, ¿fue por lo de ayer? —Preguntó Dazai— Te juro que no era nuestra intención...

—¡Hey, hey, tranquilos! —Dije yo levantando las manos y sonriendo un poco— Está bien. No fue culpa de nadie más que de nosotros mismos. Desde hace un tiempo no era lo mismo, y nosotros mismos nos forzamos a continuar... Pero está bien. Terminamos bien. Lo conversamos y estamos en buenos términos. Es decir, no creo que para terminar con tu novio deban haber gritos y odio... También se puede quedar en paz, ¿no creen?

Por segunda vez (no sólo desde que yo estaba, me pareció que desde ayer) se miraron. Pero Dazai se mordió el interior de la mejilla y giró su cabeza hacia otro lado.

—Yo me voy.

Y luego se levantó y se fue de allí. Fyodor se cruzó de brazos y se recostó en la pared, parecía pensativo.

—Entonces ¿estás bien? —Preguntó.

—Lo estoy, no te preocupes por mí —le sonreí levemente—. ¿Tú estás bien?

Él no contestó.

Ese fin de semana fui con mis padres a la isla se Enoshima. Es un lugar muy lindo. Pasamos el primero y el segundo de Junio allí. Fue divertido.

Ese domingo, antes de regresar a casa, mis padres me pidieron acompañarlos a ver el atardecer. Fue muy hermoso. Pero en ese momento fue en el que decidieron soltar lo que llevaban aguardando decirme desde ese lunes por la tarde en el que Sigma me terminó.

—Nikolai, tu madre y yo nos vamos a divorciar.

En ese momento fue que empezó a derrumbarse la vida que conocía y la que había vivido desde hacía tres años, y lo único de lo que pude aferrarme fue de Fyodor.

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Damos y Caballeras, una gran F por Nikolai, por favor.

F

Ahora sí, ¿Qué creen que pasara en el siguiente capítulo? ¿Por qué Niko dice que su vida se va a derrumbar?

Jijiji, se vienen cositas

Iba a actualizar ayer pero como era 3 de diciembre me daban muchas vibras de Heather y no c, no quería escribir sobre eso porque lloro

Gracias por leer!