Capituló 19

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HABÍAMOS PASADO como una hora o dos, no se con exactitud, solo se que ahora nos encontrábamos en la Ruleta De la Fortuna, podía ver todas las atracciones, puestos y personas desde arriba

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HABÍAMOS PASADO como una hora o dos, no se con exactitud, solo se que ahora nos encontrábamos en la Ruleta De la Fortuna, podía ver todas las atracciones, puestos y personas desde arriba. Se veía bastante lindo ver todo desde una gran altura.

La atracción se detiene de la nada, volteo hacia abajo viendo como la última pareja bajaba, eso me tranquilizó un poco. Volteo a ver a Miguel, estaba tan concentrado en las vistas del lugar que seguramente se había olvidado que me encontraba junto con el.

Me la pase en todas estas horas pensando lo que me había contado Miguel, conozco mis sentimientos por Miguel, se que si no estoy con Miguel no sería totalmente feliz. Pero tengo miedo de lastimar los sentimientos de Sam, de... Robby.

No sabia con exactitud si es que le sigo gustando, tal vez ya no le gustaba, pero tenía miedo de herir sus sentimientos, ya no más. No quiero ser una de las personas que ha lastimado a Robby, aunque creo que eso ya pasó.

— Miguel —el me voltea a ver con una sonrisa. Me dolía—. No creo que debamos estar juntos.

— ¿Qué? ¿Por qué? —su sonrisa estaba desapareciendo—

— Por fin estoy en buenos términos con mi hermana. Tal vez te diga que acepta tus sentimientos por mi, pero se que no lo está haciendo.

— ¡No es justo! Lo único qué haces es por el bien de los demás, nunca por el tuyo. Los demás son felices, pero tu eres infeliz.

Se que Miguel tenía un poco de razón, pero no le podía hacer esto a Sam. No podía llegar a casa y contarle que regrese con Miguel cuando ella no se encuentra muy bien.

— Lo siento, Miguel —me dolía tanto como a él haberle dicho esto—

🥋

Después de bajar de la Rueda de la Fortuna me fui a casa y Miguel a la suya, nadie se encontraba en mi casa lo cual agradecí. Saco del refrigerador un bote de helado de vainilla junto con la botella de Nutella y me fui a mi habitación. Enciendo el aire acondicionado y me puse a ver una película.

Era como una típica escena de película cuando a alguien le corta, pero sería yo quien corto o mas bien rechazo a alguien.
Me encantaría desaparecer por el resto de mi vida, no me sentía bien conmigo misma, no me gusto haber rechazado a Miguel, pero siento que fue lo mejor. Aunque eso me destruía, me gustaría rebobinar el tiempo y decirle que claro que quería volver con el y no pensar en los demás, pero sabía que de igual forma estaría como ahora. Ninguna de las dos opciones iba a estar feliz.

¡TOC TOC!

Tocan la puerta de mi habitación, mis padres ya habían regresado, pero en estos momentos no me gustaría que me vieran en este estado.

—¡No hay nadie!

— Entonces, ¿Quién me contesto?

Esa voz no es de mis padres y mucho menos de mis hermanos.

Me levanto de la cama y abro la puerta llevándome una sorpresa. La verdad no me imaginaba verlo y mucho menos en este momento.

— Pensaba que no había nadie.

—Hola, Hawk. ¿Qué haces aquí? ¿Y  como entraste?

—Un pajarito me conto lo que paso y me preocupe por ti. Y siempre dejan una llave de repuesto abajo de la alfombra —me enseñó su mano donde tenía una llave—

"Deberíamos cambiar el lugar de esa llave, cualquier delincuente buscara ahí"

—Bueno, vamos a salir.

—No tengo muchas ganas de salir, Hawk —le respondo volviendo a la cama—

—Lo se, pero no me interesa. Levántate —toma mis manos y hace que me vuelva a levantar de mi cómoda cama. No debí abrir la puerta—

[...]

Nunca imagine decir que me gusto haber salido con Hawk.

Primero fuimos a comer una rica hamburguesa y luego fuimos a comprar algunos comics para Hawk, eso fue una parte que no me gusto ya que no entendía nada, pero luego decidimos ir al cine. Fuimos a ver una película de acción, no quería nada de romance y mucho menos de terror.

Compramos dos palomitas grandes, refrescos grandes y algunos dulces para comer mientras vemos la película.

Hicimos lo típico que hacemos Hawk y yo cada vez que vamos al cine. Les tirabamos  palomitas a la gente que estaba adelante nuestro, siempre me divertirá ver como la gente no saben muy bien quien se los aventó y como se enojan. Pero lo que mas me divirtió fue que al final de la película decidimos tirar todas las palomitas para arriba para ver a quien le caían.

Salimos corriendo al ver como una chica se levanto junto con su novio y nos miraron listos para empezar una discusión.

Corrimos por un gran rato hasta que ya no podía mas. Deje de correr e intentaba recuperar el aire.

—Gracias por todo, Hawk.

— Eso hacen los amigos, Raquel. Están cuando mas los necesitas  —solo siento como me rodea con sus brazos y yo sin dudarlo se lo correspondí. Es lo que mas necesitaba, un abrazo sin pedirlo—

Empecé a llorar, creo que fue algo esperado al ser abrazada y mas cuando estas triste. El abrazo me puso mas sentimental.

—¿Deseas que me quede contigo? —me pregunta y sacudí mi cabeza de arriba hacia abajo como respuesta—

[...]

Ya habíamos llegado a la casa y nos fuimos directo a mi habitación. Hawk se iba a quedar a dormir esta noche conmigo lo cual me agradaba demasiado la idea.

Nos quedamos mirando una película mientras comíamos palomitas y Sabritas que compramos antes de llegar a la casa y también tenía algunas en casa.

Agradezco saber que tengo amigos que se preocupan por mi aunque en estos momentos solo parece que tengo a Hawk, pero con el es suficiente.

𝔏𝔢𝔳𝔞𝔫𝔱𝔞𝔱𝔢 𝒴  𝔓𝔢𝔩𝔢𝔞 /Miguel Diaz/ [Parte Dos]Donde viven las historias. Descúbrelo ahora