[NARRA AMIRA]
Me tumbé encima de los cojines boca abajo y no pude evitar que las lagrimas recorrieran mis mejillas.
-Por lo menos tengo a Dani, el si que me quieré-pensé.
Estuve un rato bastante largo echada de esa manera hasta que oí que alguien estaba subiendo.
-mierda-pensé.
Me quedé mirando a la puerta para ver quién era.
Distinguí una silueta pero no sabia exactamente quien era por que gracias a las lagrimas veía borroso.
-¿Jesús?-pregunté.-Si,soy yo.-respondió-¿por qué te has escapado?, ¿sabes lo preocupados que nos tenias?
-¿lo dices por Dani y por ti no?
-No, tu tía nos ha llamado toda preocupada diciendo que no estabas en casa.
-Lo hace para quedar bien.
-pues entonces tu tia a debido de ir a una buena escuela de teatro- insistió Jesús.
-No quiero volver a casa.
-Tienes que hacerlo, te están buscando por todos los lados.
-Me da igual.
-Pues a mi no- dijo Jesús y me cogió como un saco de patatas.
-Jesús bajame ya- le ordené.
-No.
Jesús me bajo del árbol y luego me dejó en el suelo.
-ahora, vas a ir a casa, y vas a hablar con tu tía. Todo ha sido un mal entendido.
-No quiero Jesús, osea me niego, no sabes lo que me ha dicho.-Que cabezota eres eh.- dijo y no pyse evitar soltar una carcajada.Cuando estoy con el me lo paso tan bien que se me olvidan los problemas. Pero con Dani también.
-quiero ver a Dani.-le dije.
-vale, habla con el.-me dijo pasándome su móvil.
●Conversación telefónica●
-¿Jesús? La has encontrado. Antes de nada, me han vuelto ha llamar los de la apuesta.
-Dani, soy yo, Amira, Jesús me ha dejado su teléfono. Por cierto ¿de que apuesta hablas?
-nada, ninguna, ¿donde estas? ¡me tenias preocupadisimo!
-En la casita, bueno abajo, osea no estoy en la casita estoy abajo.
-vale, ya voy esperarme alli.-dijó y colgó
-Toma- le dije dándole el móvil a Jesús.
-¿que te ha dicho? - preguntó.
-que viene, que le esperemos.
-Vale.
-¿Por cierto sabes algo de una apuesta? -pregunté curiosa.
Jesús me miró triste y agachó las orejas.
-No puedo hablar de eso.- me dijo.
-Vale pero me estáis preocupando. Ninguno de los dos queréis decirme nada.
No le dió tiempo de contestarme porque justo llegó Dani.
-Ami, ya estoy aquí- venia corriendo.
Cuando llegó inhalaba y exhalaba rápidamente mientras ponia sus manos en las rodillas.
-Madre mía,¿estas cansado eh?.-Es que me he pegado una carrera de flipar.- dijo el y soltó una carcajada la cual me contagió.