My Stepmother's Boyfriend ➳♡

DEJAME SABER MÁS

—¿Puedes dejar de caminar en círculos? —Zhou Cheng cargó a Heinrich al ver que andaba en círculos al igual que su dueño.

Xiao Zhan meneó la cabeza de izquierda a derecha, en negación. No podía. Simplemente no podía tomárselo con calma; Yibo llegaría en cualquier momento y le estaban dando náuseas por el exceso de nervios, su corazón no dejaba de latir apresuradamente y su cara seguía roja, incluso ya comenzaba a transpirar.

—¿Qué se supone que voy a decirle? Ni siquiera sé cómo comenzar una conversación con él —tronó, levantando las manos y auto abrazándose, buscando con eso sentirse al menos un poco menos histérico.

Zhou Cheng bufó, acariciando al cachorro y viendo fijamente los brillosos ojos de su amigo. Xiao Zhan jamás se había puesto tan dramático y verlo así le había provocado mucha gracia, sin embargo, no quería reírse porque la situación era seria, o más o menos.

—No digas nada, deja que hable y verás que luego podrás hablar con mucha facilidad. Entiendo tus nervios, pero ya vas a ver que pronto se te van a quitar.

—¿Tú crees? —Instó incrédulo, terminando por sentarse en la cama. Zhou Cheng asintió—. Lo que pasa es que...bueno.

—¿Qué pasa?

—Yo quiero...ya sabes, quiero que Yibo me toque y todo, pero no quiero ir más allá hoy en la noche. No estoy seguro de lo que me dirá Yibo, pero de lo que sí estoy seguro es que esta noche no quiero tener sexo con él. Ni esta noche ni otras próximas.

—Ajá. —Movió la mano para que Xiao Zhan continuara.

—Para el sexo quiero esperar, aunque no estoy seguro si él quiere que tengamos algo sexual. No quiero pasar vergüenzas con él si por alguna razón llegara a ensuciarlo. Estuve leyendo mucho sobre el sexo anal y quiero estar limpio, completamente limpio y preparado antes de hacerlo.

—¿Entonces te daría vergüenza mancharlo de mierda cuando te la meta? —Interpeló, haciendo una mueca.

—No lo digas tan feo, pero sí. Además, quiero oler muy bien, quiero estar muy limpio. ¿Tú nunca has pensado limpiarte antes de estar con Liu Hai Kuan?

Zhou Cheng rodó los ojos, pensativo.

—Nunca me lo había preguntado, pero supongo que antes de tener sexo necesitaría estar muy limpio y preparado para sentir dolor, porque por lo visto duele mucho la primera vez —contó algo asustado, estremeciéndose.

—Por un momento me había olvidado del dolor ¿Dolerá mucho?

—Pues no lo sé, nunca me la han metido, Xiao Zhan. Si Liu Hai Kuan algún día me propone hacerlo, creo que entraría en pánico. Tener sexo es demasiado íntimo, algo más allá de placer ¿Sabes? Se trata de conocer ambos cuerpos, encontrar los puntos débiles, dar y recibir placer y tener la confianza para que vean todas las expresiones excitadas. ¿Será lo mismo estar con un hombre que con una mujer? —Su pregunta lo hizo dudar.

Xiao Zhan se encogió en su lugar. —Ni idea —murmuró, escuchando el motor de un vehículo. Asombrado, corrió para asomarse por la ventana y al ver que se traba de Yibo, se paralizó —. ¡Está aquí! —Echó un gritillo, tropezándose con el pie de Zhou Cheng cuando quiso coger a Heinrich y esconderse. Por suerte no se cayó, pero eso no le quitó importancia a que Yibo estuviese tocando la puerta de Zhou Cheng en esos momentos —. Dile que no estoy, que ya me fui y que no sabes a dónde ¿Sí? Hazlo por mí ¿Sí? Zhou Cheng ... ¿sí?

—No, no seas cobarde Xiao Zhan. Nada va a pasar, además esta es una buena oportunidad para que hablen. Sólo van a hablar y verse, no es nada del otro mundo, además ya has dormido con él. —Elevó las cejas al recordárselo. Era cierto. No debía estar tan nervioso, sólo era Yibo. No debía temer. No debía tener vergüenza. Sólo era Yibo...sólo Yibo.