AMOR POR CONVENIENCIA © Sterek

7

Ese sábado Stiles esperó frente al edificio a las nueve en punto como había quedado con Derek, quien segundos después llegó frente a él en un camaro negro.

—¿Desde cuándo tienes esta hermosura? —preguntó sorprendido. Derek sonrió con superioridad

—Me lo compré hace un par de años, creí que ya era hora de mimarme un poco —admitió. Stiles se quedó observándole unos segundos y se dijo a sí mismo que si no tenía novia, quizá podría dejar sus sentimientos desbordarse.

Mientras se dirigían al hospital, la ciudad bullía de actividad. Había coches por todas partes, y las luces de los faros y el neón de las tiendas brillaban aun siendo de día. Stiles se sentía bien ese día, hacía mucho que no salía de casa a hacer algo distinto que no fuera ir al café de la esquina o a la librería.

Cuando llegaron, entraron a una sala vacía, y confuso, Stiles dejó las galletas en la mesita de noche.

—¿Dónde...?

—¿Otra vez tú Hale? ¿Es que no tienes nada mejor que hacer? —preguntó una mujer rubia saliendo del baño con ayuda de una enfermera. Stiles se abrió paso para no estorbar y se paró al lado de Derek al final de la cama.

—Erika, te presento a Stiles Stilinski. Stiles, ella es Erika—

—Así que este es el famoso Stiles —dijo la paciente, a pesar de ser militar tenía unos hermosos rasgos femeninos —Te aseguro que eres famoso en este hospital —

—Espero que por cosas buenas —murmuró mirando a Derek incómodo

—¿Der, puedes traernos algo de café?— preguntó ella y este asintió saliendo de la sala a paso relajado. Stiles la miró tragando despacio —Entonces Stiles —comenzó con una mirada intensa y penetrante, atravesando sus más profundos pensamientos. 

—¿Sabes? Realmente quería disculparme, sé que lo que Derek y yo estamos haciendo no está bien, y más cuando estás en esta situación —

—No sabía que estaban haciendo algo —murmura ella ceñuda

—Él... ¿no te lo ha dicho? —

—¿No? —suelta ella y le analiza con la mirada —¿Qué es lo que el sucio de mi hermano te ha hecho Stiles ?—

—¡Nada! Él no... —Stiles se quedó pensativo un momento —Espera ¿dijiste "hermano"? —

—¡Derek! — ella miró al recién llegado —Creo que tu chico aquí está algo confundido —comentó —¿Le dijiste quien soy?

—Mi mejor amiga, claro —contestó este dejando los vasos de café en la mesita

—¿Mejor amiga? —pregunta Stiles incómodo —¿Por qué me dejaste creer que era tu novia? —

—Porque no pensé que importara mucho qué fuera. Y no importa ¿verdad? —pregunta. Stiles no pudo evitar sonrojarse ante la sonrisa divertida de Derek

—Bueno, estoy segura que a Vernon va a importarle saber que le dices a la gente que soy tu novia —musita Erika desde la cama —¿Qué es lo que le has estado haciendo a este pobre Detective? —

—Él fue a sacar sus propias conclusiones, como de costumbre. Su imaginación es muy activa, discúlpalo. —

De repente Stiles se sentía muy contento de haber conocido a la mejor amiga. Decidió ignorar a Derek, y le dedicó una sonrisa amigable a Erika.

—Me alegra mucho conocerte de todas formas, y me alegra mucho también que estés recuperándote rápidamente —

—Gracias Stiles. Esto es jodidamente molesto, pero es lo que hay ¿Der, cariño, me traes un par de donas de la máquina de la esquina? —pide la mujer, y este se va sin emitir palabra alguna, muy bien adiestrado que lo tenía. —Tenía la sospecha de que Derek exageraba cuando me habló de lo apuesto que te habías vuelto, pero se quedaba corto. ¿Tienes novio? Estoy de novia, pero Vernon es de mente abierta —