ANTES
Stiles corría entre las ramas y hojas secas mientras su papá lo seguía lo más rápido que podía para seguirle el ritmo en la noche oscura. Faltan solo minutos para media noche y el inicio de un nuevo año, y él estaba muy entusiasmado por los fuegos artificiales que su papá había traído. No era común para ellos pasar las fiestas juntos ya que normalmente su papá debía hacer guardia, pero esa noche había conseguido liberarse, y eso emocionaba a un Stiles adolescente.
—¡Vamos papá! O nos perderemos la cuenta regresiva —gritó y se apresuró más para llegar al punto que habían acordado. Noah asintió con la respiración agitada. Era realmente difícil para él seguirle el ritmo a su propio hijo. —Bien, ¿Cuánto falta? —preguntó el castaño animado, se sentó en el suelo y comenzó a preparar sus explosivos.
—No los enciendas al mismo tiempo, la casa de los Hale está cerca y no queremos molestar —avisó. El castaño asintió y preparó solo los de luces para encenderlos cuando sea el momento.
—¿Siete están bien? —
—¡No, Stiles es demasiado! —
—¡Es la hora! —el castaño encendió la punta de los cohetes y se alejó corriendo hacia donde su papá lo esperaba. Los cohetes comenzaron a salir uno por uno hacia el cielo, explotando y llenando la oscuridad de distintos colores. Una chispa cayó sobre su mejilla quemándole al instante, y dejó salir un quejido mientras se cubría el rostro con las manos. El sonido de los fuegos artificiales seguía en lo alto, pero más chispas caían así que su papá lo llevó lejos y le alumbró el rostro con el teléfono.
—¿Estás bien? —preguntó preocupado
—Duele...
—Lo sé, tranquilo, no quedará marca —avisó y le sonrió —Le pediremos a Melissa alguna pomada para que deje de doler ¿está bien? —
Stiles asintió, pero eso no hizo que doliera menos. Quería meter el rostro en agua fría. Su papá lo llevó de vuelta a casa despacio, alumbrando el camino con una linterna, y sin soltar su mano. Una vez llegaron, le dio un cubo de hielo para calmar su mejilla, en lo que conseguía que Melissa contestara el celular, aunque sin éxito.
Unos minutos después escucharon varias patrullas cruzar frente a su casa, y el mayor se apresuró al frente de esta para ver qué sucedía, no oían demasiado, pero las sirenas del camión de bomberos eran inconfundibles. Stiles se quedó viendo como su papá llamaba a la comisaría en busca de información. Y luego volvía hacia él, que seguía sentado en el comedor.
—Debo ir, hay un incendio en la Mansión Hale. Quédate aquí —avisó mientras tomaba sus cosas. Las manos de Stiles temblaron levemente. Un incendio. Sus cohetes. La lluvia comenzando a caer en la madrugada.
ACTUALIDAD
30 HORAS ANTES.
Durante los siguientes dos días, Stiles ni siquiera había ido a casa más que un par de veces para darse una ducha y cambiarse de ropa. Había estado yendo de la oficina a la casa de Kristen, y así sucesivamente. La búsqueda había sido incansable desde que descubrieron la identidad del sujeto. Hombre de 32 años, veterano que prestó servicio en el Golfo cuatro años atrás, y se retiró luego de ser herido en combate.
No había rastros suyos en los últimos años, no utilizaba tarjetas de crédito, no tenía nada a su nombre, no tenía licencia, ni siquiera un perro a quien cuidar. Pero sí tenía dos hermanas mayores que estaban siendo monitoreadas por si él se contactaba. Lo que sí había podido determinar era que trabajaba solo, no había registros de nadie más o de algún cómplice. Por lo que al enterarse de esto envió un informe para que Derek y su equipo pudieran eliminar la conexión con un caso de trata, aun así, no abandonaron el caso.
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AMOR POR CONVENIENCIA © Sterek
FanfictionStiles se siente traicionado, roto y sustituido. ¿Causantes de esto? Su ex novio y su amiga. ¿Iba a demostrarlo? Claro que no, su orgullo seguía intacto. Lo que él necesita es un nuevo novio, y para beneficio o condena suya su recién llegado vecino...