You Are In Love || Mick Schumacher

Prólogo pt.2

Los siguientes días volvimos a ir a la misma hora, Mick me contaba de lo emocionado que estaba por su competencia y yo le contaba de lo que estaba escribiendo, también nos abrazabamos y hablábamos de cómo sería nuestra vida en cuanto fuéramos mayores de edad, también nos besábamos y nos tomábamos fotos para cuando el se fuera a su competencia, pudiera tener una foto que le gustará. Se sentía raro pensar en que Mick, el chico que conozco desde que nací, me gustaba, era conciente de eso desde hace un año, pero era irreal saber que yo también le gustaba.

Hoy era el último día que nos veríamos en quién sabe cuento tiempo, el se iría a su competencia y yo me iría a Estados Unidos, mi mamá había enloquecido y decidió que me quedaría con ella y su familia en Estados Unidos, y mi papá estuvo de acuerdo con que pudiera verme cuando el quisiera y siguieramos en contacto.

–No puedo creer que te vas a Estado Unidos...– dijo Mick el día que le conté.

–Yo tampoco, no me quiero ir, toda mi vida está aquí y parece que a mi mamá no le importó una mierda eso.– dije, en realidad estaba muy molesta porque no me hubieran preguntado.

–Te irá bien, eres linda, amable e inteligente...te irá bien.– dijo Mick abrazándome.

–No quiero empezar desde cero.– dije escondiendo mi cara en su cuello.

Ahora mismo nos teníamos que despedir, mañana ya no lo vería, eso no me gustaba, claro que hablaríamos por mensaje o llamada, pero no es lo mismo, todo lo que habíamos montado en la bodega lo tuvimos que quitar porque no queríamos que le pasará nada, así que nos habíamos dividido las fotos para que tuviéramos recuerdos.

–Prometeme que me vas a escribir.– dije sonriendo.

–Te lo prometo, te escribiré diario, cuando me levanté y cuando me vaya a dormir.– dijo abrazándome. Obviamente eso no se cumplió.

–Te voy a extrañar.– dije intentando grabar en mi mente todo de el, me daba miedo qué me rompiera el corazón, si soy honesta, pero eso no va a pasar, es Mick, Mick no haría eso, seríamos la excepción. Obviamente eso TAMPOCO se cumplió.

Nos tardamos unos minutos más en despedirnos antes de que ambos nos fuéramos a nuestras casas, mi papá me estaba ayudando a subir las maletas al carro cuando voltee a ver la casa Schumacher, Mick veía todo desde la ventana con el ceño fruncido.

–Ni lo veas, no le puedes hablar.– dijo mi mamá molesta.

–María...crecieron juntos, no puedes esperar que se olviden del otro como si nada.– dijo mi papá.

–No, se van a olvidar del otro si o si, eventualmente.– dijo mi mamá jalandome del brazo para que me subiera al carro. Y vaya que tenía razón.

–Por lo menos deja que se despidan, probablemente no se vuelvan a ver.– dijo mi papá, me rehusó a creer eso. mejor creerlo, ahórrate las lágrimas yo del pasado.

–No, ya tomé la decisión y punto.– dijo mi mamá, aproveche que regreso a la casa por algo y me despedí de Mick con la mano antes de subirme al carro.

Ojala le hubiera hecho caso a mi mamá, la cantidad de lágrimas que me hubiera ahorrado...