LIBERTAD PARA AMARLA

FIESTA

Hoy. Hoy por fin, es la tan esperada fiesta de Ari. Exactamente son las 8 de la noche y ya estoy lista para la rumba. No puedo decir lo mismo de los pelotudos que tengo de amigos, claro. Llevo puesto un vestido negro, pegado al cuerpo, no soy mucho de usar vestidos, pero, Bill me pidió que me vistiera con esto para estar iguales, así que... 

Sí, soy una pisada de mierda. 

Pero es Billie Eilish, ¿Que podría hacer?

Los demás aún estaban en sus habitaciones mientras que yo, los espero sentada en el mueble de nuestra sala. Bill me dijo que llegaría un poco tarde a la fiesta, porque tendría una reunión de último momento con su manager. Por ende, yo no tengo ninguna prisa.

Los engendros se pueden demorar lo que se les salga de la cola, yo solo voy por ella. Continué mirando tiktok en mi celular, pero, segundos después, escuché pasos provenientes del pasillo de las escaleras.

- Que guapa te ves, ___ -halago Nam, mirándome de arriba a abajo con orgullo-

- Ya.

- ¿No dirás nada de mí? -cuestiono, resople mis labios-

 - Vos también te ves guapo, Nam.

- Gracias -susurro guiñándome, mientras caminaba hacia la cocina-

Jungkook y Jimin también bajaron, al voltear a verme, ambos quedaron boquiabierta. 

"Creo que se les olvidó lo homosexuales que son"

El pelinegro tenía puesto una camisa negra y pantalones negros, parecía emo, sí, pero es Jungkook se le ve bien y Jimin tenía una polera blanca con unos jeans.

- Wow -dijo el último en un murmuro-

- ¿Guau? ¿Sos perro ahora? 

- Ahora podría ser tu perro, sin ningún problema.

- Te ves hermosa, por dios -añadió el pelinegro-

- Gracias bebés, ustedes se ven de la puta madre.

- ¿Y eso? ¿De la nada te animaste a usar vestido? -pregunto Kook, con una ceja levantada-

- Bill me pidió que lo usará para estar iguales, pero... que sé yo, me siento rara -encogí los hombros, mientras me daba una última repasada a mi vestido con la mirada-

- Hoy van a pasar cositas con Billie, lo sospecho

"Dios te escuche Jimin. Dios te escuche" pensé.

El pelinegro y yo, sonreímos 

- Te resalta muy bien tus curvas -halago el pelinegro otra vez, reí levemente y suspiré-

- Ya pará, Jungkook, respeta a Tae.

- Te voy a acusar con él -añadió el rubio-

- Ash, pero solo era un comentario de amigos -se excuso con los brazos, cruzados formando un puchero-

-Es un nene literalmente -respondí señalándolo con la mirada-

- Y si.

Los tres soltamos una risita nasal al mismo tiempo y luego, nos percatamos de que, Nam salió de la cocina con 2 botellas de whisky en mano.

- ¿Y esas municiones?

- Pues llevaremos un presente -respondió como si fuera lo más obvio del mundo-

Vi a Taehyung bajar las escaleras, él también me miro de arriba a abajo y por su expresión facial pervertida pude saber lo que estaba pasando por su malicioso cerebrito.