El placer de la ira

Capítulo 26

Pasó cerca de una semana desde que tuve sexo con Jorge, Floragato se volvió muy unido a mí y yo me llevaba fenomenal con él, se empezó a quedar todos los días conmigo y dormía con él, Floragato se volvió muy agresivo con Jorge. Jorge extrañamente se le notaba algo dolido, empezó a hablar poco conmigo y no entendía los motivos

-Jorge... ¿Qué te está pasando? Apenas hablas ya conmigo...

-No te preocupes Rosa, estoy bien enserio

-Pero tus acciones dicen otra cosa, pareces enfadado y no sé por qué, ¿Te he hecho algo malo?

Suspiró amargamente mirándome a la cara, tenía una mirada muy triste, parecía que llevaba mucho tiempo sin dormir

-Rosa... Dime, ¿Floragato te ha dicho o hecho algo malo?

-No... ¿A qué viene la pregunta?

-¿Es que no lo ves Rosa? Ese Floragato está enamorado de tí, y tú le estás dando alas para que haga lo que quiera, mira cómo se está comportando, es como sí hubiese reclamado esta casa como suya y me quiera echar, ya ni puedo salir de la habitación tranquilamente sin que me intente atacar o amenazar

-Pero Jorge... ¿Cómo puede estar enamorado de mí?

-Rosa... Por favor míralo, sé que las relaciones sociales se te dan fatal y no entiendes el comportamiento indirecto, pero ese Floragato te está diciendo que te ama a gritos

-¿Pero qué mierda estás diciendo Jorge? Solamente quiere pasar conmigo, resérvate los celos para cualquier otro pokemon

-¿¡Y eso lo dices tú!? ¿Qué has sido quién me ha amenazado a todo lo que se ha acercado a mí y nos has metido en problemas?

Estaba totalmente impresionada, Jorge jamás me ha gritado

-Jorge yo...

-Mira déjalo, déjalo porque me estoy poniendo enfermo

Agarró una chaqueta y se la puso dirigiéndose a la puerta

-¿A dónde vas?

-A cualquier sitio donde poder relajarme, ¡Carajo! Quédate con el puto Floragato sí tanto quieres estar con él, ¡Estoy harto!

-¿En serio te crees que me es divertido hacer eso para poder tenerte? ¡Crees que me gusta hacerlo!

-¿Solamente puedes pensar en tí? ¿Tan egoísta eres? Que estoy contigo, joder dependo de tí Rosa, ¿y me usas como un juguete por ese maldito Floragato?

-¿Qué estás diciendo Jorge?

-Olvídalo, esta discusión ni sentido tiene

-Oh sí tiene todo el sentido del mundo, es cierto que he estado con Floragato, ¿Y que más da? ¡Estás pensando solamente en tí!

-¿Que estoy pensando en mí? ¿¡Que estoy pensando en mí!? Ten los huevos de decírmelo otra vez... ¡Vamos!

Me sentía acorralada y lo único que se me pasó por la mente es sisear a Jorge lanzándole una bomba de polen cerca suyo a modo de advertencia

-Está bien Rosa, se acabó, tú ganas...

Su tono era frío y sin emociones, tenía muchas ojeras, se le veía muy cansado y parecía estar teniendo un colapso emocional

Me sentía mal por lo que le hice a Jorge y empecé a llorar, solamente se me quedó mirando con una cara sin expresiones

-Sí vas a estar con él antes que conmigo no tiene sentido que esté más aquí, jódete

Vi que también soltó un par de lágrimas y salió corriendo de casa, me sentí destrozada y muchos malos pensamientos me empezaron a rondar por la cabeza, llegué a pensar que me había abandonado y rompí a llorar abrazando la bufanda que me regaló Jorge