𝐒𝐨𝐥𝐨 𝐦í𝐨

I

Severus Snape es conocido como el GRASIENTO por sus alumnos o otros apodos negativos y horribles que se les pueda ocurrir, cosa que todo lo que decían no describía como era severus Snape, por ejemplo como su apodo "El grasiento" su cabello no era grasoso, simplemente era brilloso por la herencia Prince, también su otro apodo "Gordo" El no era gordo, simplemente no quería verse débil y usaba ropa ancha, pero ese no es el caso, Severus está tan estresado y la causa de su estrés tenía nombre, Harry James Potter, ese niñito que siempre llevaba consigo ese complejo de héroe y que casi siempre se metía en problemas junto con su grupito conformado por Hermione Granger y Ron Weasley, pero también estaba asustado, sabía que Potter y todos los demás estudiantes sabrían quienes eran sus destinados apenas tuvieran 14 años, severus sabía perfectamente que Potter era su destinado y nadie exepto Albus lo sabía, este no podía interferir y pensaba que lo mejor sería juntarlos. Ahora dejemos todo atrás y veremos que sucede.

Todos veían como el profesor grasiento corría con desesperación y se preguntaban porque , severus había olvidado sus supresores, su celo había llegado hace tres días por lo tanto tenía que tomarlos a casa minuto, cosa que hacía que se cansará aun más rápido o incluso se desmayase por la sobredosis de supresores que llegaba a tomar todos los días aunque no tuviera su celo , por esa misma razón pasaba como un beta, ya llegando a su oficina abrió la puerta y la cerró rápidamente, estaba asustado, esperaba que no hubiera dejado ni una pizca de su olor dulzón pero eso era muy imposible, intento llegar hasta la vitrina donde había dejado las pastillas pero le fue imposible caminar, estaba tan agotado que se dejó caer sintiendo que todo le daba vuelta y llegó al punto de ya desmayarse, el glamour se estaba desvaneciendo mostrando su verdadero aspecto su verdadero todo, el olor se había esparcido por toda la oficina que cualquiera que entrara se caería por el olor fuerte y dulce que desprendía severus.

Hermione, ron y Harry caminaban lo más rápido que podían, llegaban tarde a la clase de pociones y sabían que Snape no los dejaría pasar a menos que tuvieran permiso de Dumbledore de llegar minutos tarde, ya al llegar al aula pudieron ver qué todo era una fiesta, no estaba el profesor y todos estaban besandose y manoseandose o tros simplemente hablando, claro que Harry se pregunto dónde estaba Snape, quería investigar a si que dejo que sus amigos se sentarán y hicieran de las suyas, salió del salón y empezó a recorrer pasillo por pasillo fijándose que nadie lo atrapé, dónde estaba severus?, Seguía buscando hasta que sintió un dulce aroma a coco con melocotón, muy exquisito para su delicado olfato sintiendo como su lado alfa jadeaba por el olor, empezó a seguir el olor para poder encontrar a cualquier persona que hacía que su alfa se derritiera por su olor pero se sorprendió al llegar a la oficina, la oficina de severus snape, se acercó a un pequeño hueco de la puerta y abrió los ojos lo más que pudo, de ahí venía el aroma, el aroma viene de su profesor, el maldito profesor que le cae mal, tenía muchas preguntas y una de esas eran de ¿Severus es Omega? No entendía como pudo ocultarlo por mucho tiempo, sus ojos empezaron a oscurecerse volviendose ya para rojo, tenía un deseo de montar y marcar al pequeño Omega que se escondía detrás de esa puerta, queria protegerlo y hacerlo sentir satisfecho, agarró la manija abriendo la puerta y ver al cuerpo tirado que se retorcía y jadeaba, ese no era severus, era todo menos ese profesor odioso, alto, aspecto de viejo y cabello grasoso, este era un ángel, pero pudo reconocer que si era severus por la marca en su mano, apenas vio que su profesor estaba llorando de dolor se preocupo aun más, no quería ver al Omega en ese estado, tenía que protegerlo y darle toda la atención del mundo, se acercó a este rápidamente y cargandolo lo dejo en la pequeña cama, fue a cerrar la puerta y se dirigió a severus, sabía que este estaba en celo por como ese líquido dulce se resbalaba y mojaba su pantalón pero ahora no podia pensar en follar con Snape, tenía que llevar a su Omega que estaba sufriendo a dónde Poppy lo más ante posible, agarró a su profesor y lo cargo al estilo princesa (v.v) fue a abrir la puerta y se fue lo más rápido que puedo. Ya dónde Madame Promfrey abrió la puerta asustando a Poppy por la manera en que casi rompe la puerta al entrar