Lizzie
Llevamos aproximadamente más de diez minutos sentados en la mesa con un silencio incomodo dominando el ambiente. El karaoke terminó hace algunos minutos y han vuelto a encender las luces de forma que se puede ver con claridad las miradas asesinas que se lanzan Jake y Rose. La noche está lejos de ser perfecta.
—¿No lees las noticias?—rompe el silencio el hermano de James.
—Bueno, suelo saltarme cualquier cosa que lleve tu nombre—se defiende.
Se cruza de brazos. Rose siempre fue muy bonita, no porta la clase de belleza fina, sino una más agresiva. Sus labios son gruesos, sus pestañas son larguísimas, su nariz pequeña y marcada. El pelo castaño lo lleva atado, ningún mechón suelto.
Viste un blazer y unos pantalones rojos, como si fuera una empresaria. El traje le queda pintado. Si hablamos de su cuerpo, ella siempre tuvo una gran figura.
—¿Y cuando Raven te contactó no sospechaste que era, no sé, mi boda?—pregunta, indignado.
El espacio entre las cejas de Jake se vuelve más pequeño.
—Él me dijo que era para una conocida de él, para Celina Avilarí, pero nunca que se casaba contigo.
Las miradas convergen en Raven, que se encuentra sentado a mi lado.
—Cel buscaba una organizadora de bodas que estuviera disponible y además, ella es muy buena.
Esto explica su extraño trato servicial, estuvieron planeándolo con James. No puedo creerlo, es cruzar un límite.
Celina se abraza a sí misma. Hasta el momento no ha dicho nada, solo la veo sufrir en silencio.
—Así es, soy muy buena y absolutamente profesional—alega ella —. No tiene por qué ser un problema.
En los ojos de él solo se pueden distinguir llamas ardientes.
—¿Podemos hablar?—Cel decide intervenir.
—Ahora, no—niega él, alzando la voz. Ella asiente, aplastando los labios—. Mierda Rose, ¿Cómo vas a aparecer así?
Frunzo el ceño.
¿Cuál es el objetivo de tratar de esa forma a su prometida? No ha hecho nada, es tan víctima de la situación como él.
—Bueno, tiene que haber una forma de que vuelvas mientras consigo otra organizadora—concluye Jake.
—Cancelé otros trabajos por tomar este—comenta, furiosa.
—Bien, te pagaré, no me importa—le resta importancia.
—No quiero tu dinero—Se indigna.
Doy un vistazo rápido al resto y noto que están igual de boquiabiertos con la situación. Me remuevo en el asiento incomoda, esta no es una conversación de la que quisiera formar parte.
Mi celular comienza a sonar desesperado.
Llamada entrante de Bill.
Mi casero, ¡No puede ser! ¿Qué hago? ¡Me va a pedir el dinero que no tengo! Genial, voy a vivir en un contenedor de basura. De solo imaginar mi maquina de coser entre bolsas de desechos, el corazón me cruje.
—Rose, eres imposible—escucho que dice Jake, allá a lo lejos.
—Siempre echando la culpa a alguien más, ¿No?—responde ella, irritada.
Mi cabeza no puede concentrarse en la pelea, tengo un problema muy grande. Las manos me tiemblan.
De pronto, un cuerpo se abalanza sobre el mío.
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Enamorada del Villano [ACTUALIZANDO ✔️]
Ficção AdolescenteLizzie siempre estuvo enamorada de su mejor amigo James, cuyo mundo se destruye cuando lee en el periódico que su hermano va a casarse con la mujer que ambos prometieron nunca volver a contactar para evitar conflictos: Celina. Ahora, James busca rec...