Somos Infinitos #CarrotAwards2016

Algo con A

-¿Alguno de vosotros sabe porque está así? -Preguntó Sirius, haciéndose el distraído.

-No hagas como que no te importa, chucho, que tanto Lily como yo sabemos que te mueres por que te digamos algo. -Respondió James mirando a su amigo con una sonrisa de oreja a oreja.

-Vale, necesito saber que le pasa conmigo. Esta muy raro, y no soy consciente de haber hecho nada malo. -Admitió poniéndose igual de rojo que el pelo de Lily.

-Nunca te había visto así, Padfoot... ¿Tanto te gusta? -Le preguntó sorprendido James a su mejor amigo.

-¿Que si me gusta tanto? Me vuelve loco, Prongs. Solo con rozar su piel una corriente eléctrica me recorre la columna vertebral. No, no es un capricho, te lo puedo asegurar. Le quiero. Y que esté raro conmigo me supera... Es demasiado. James, no lo puedes entender, no solo es amor, es... Es... -Pero Sirius bajó la cabeza intentando ocultar su rostro.

-¿Es que, Sirius? -Preguntó esta vez la pelirroja.

-Deseo. Lo deseo con todas mis fuerzas.-Aceptó cohibido.

Lily miró al chico con lastima. Sentía que tenía que hacer algo, al fin y al cabo él había confiado en ella primero para contarle su secreto. Se levantó siguiendo un impulso y se despidió de los chicos, diciendo la verdad: iba a buscar a Remus.

En el piso de arriba, cierto chico caminaba cabizbajo, abochornado por su comportamiento. No sabía que le pasaba, no entendía porque estaba portándose así con Sirius, y tampoco comprendía porque se le ponían los pelos de punta cuando recordaba el rostro sonriente de su amigo. Se llevó las dos manos a la cabeza y se sacudió todos los pensamientos.

-¿Estás bien? -Una voz inundó el pasillo vacio, y el chico se giró. No conocía a la chica, o al menos no recordaba su nombre.- ¿Estás bien, Remus? -Repitió, añadiendo el nombre de Lupin. Eso solo hizo que él se sintiera culpable, puesto que no tenía ni idea de como se llamaba ella. Recordaba que había sido la prueba (según Sirius) de que todas babeaban por el moreno, pero no lograba encontrar el nombre que tanto le interesaba. ¿Era Alla? ¿O tal vez Aviva? Empezaba por la A, de eso estaba casi seguro.

-Si, tranquila... -Vaciló un momento, tratando insistentemente de recordar su nombre. No lo había logrado cuando una pelirroja interrumpió en el pasillo y lo sacó de su apuro.

-¡Remus! -lo llamó. Después vio a la chica, le dedicó una sonrisa muy agradable y saludó.-¡Annie!