30 niveles, entre más sube la escala, Misa se siente más perdido y más descontento consigo mismo.
Spreen ayuda a que la escala suba.
On-Rol, no sé shipean Streamers.
Si identificas una de estas señales en tu relación o en alguna relación ajena, pide...
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Los primeros días desde la resurrección de Missa habían Sido tranquilos, lleno de mimos, besos y abrazos, incluso había llegado a pensar que su pareja podría cambiar, por qué claro un escenario traumático cambia a cualquiera ¿No? No.
Los rumores de que Spreen había vuelto a capturar y secuestrar a Missa corrían y eran ciertos, desafortunadamente, Missa ya no podía correr, le faltaban sus piernas.
Lloro y sufrió tanto por ellas, Spreen las había cortado. Casi no veía bien, Spreen le había quitado quitado la visión de un ojo. Casi no respiraba bien, seguro Spreen le había roto una o dos costillas. Spreen impedía una calidad de vida digna, no podía vivir de esa manera, no era vida.
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En cuanto al rescate de Missa, todos se esforzaban cada vez más, rodearon todo el bosque de Spreen, el oso lo sabía y se alertaba por ello.
Shadoune era el más desesperado, era el primero en querer encontrar al Humano y cuidarlo, quería tenerlo nuevamente sano y Salvo, por qué el en verdad cuidaría y trataría a Missa cómo lo merece.
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Missa, quien siempre fue un tonto cegado por el amor hacia alguien que no lo merecía seguía allí, aguantando todo lo que le hacían, solo por qué era su pareja y lo amaba, el amor no consiste en eso, pero Missa no lo sabía, el tenía al híbrido en un pedestal, lo sobrevaloraba.
—Spreen... Te amo...—
Dijo susurrando, mientras se acurrucaba en su pecho, las lágrimas salían, intentaba no forzar esa palabra, pero siempre se le dificultaba.
—Yo también, Missa.—
Y así, como sin más, se dieron un beso, uno de los que pocas veces se dieron y correspondieron, era un beso suave, cálido, lleno de amor, cariño e ilusión, pareciera una escena tan normal, si no fuese por los maltratos, abusos y heridas que habían por parte de uno al otro.
Ese día no hubo golpes, ese día no hubo gritos, ese día hubieron más lágrimas de lo habitual y besos cariñosos. Parecía una despedida, tal vez era una despedida.
Cómo si el destino jugase en contra de la pareja alguien irrumpió, pasando por encima de toda la seguridad de Spreen.
—¡Mon trésor.!—
—¿Shadoune?—
La cara de Missa se iluminó contra toda su voluntad, estaba feliz de ver a alguien en tanto tiempo, y de cierta forma parecía una esperanza para salvarle.
—¡Hijo de puta! ¡Te dije que te alejaras!—
—¡Cállate! ¡Lo mataste una vez! ¿¡Cómo puedes si quiera pensar que te dejaríamos!? ¡Te haré lo mismo que le hiciste!—
Las palabras apenas se le entendían por la furia y el mal acento que tenía, Miraba al humano con lágrimas, no creer todo lo que le habían hecho a aquella alma tan pura.
Los golpes y sonidos de las espadas filosas se hicieron presentes, Spreen consiguió sacar sangre al ente, pero no tenía demasiada ventaja.
Missa solo gritaba que se detuvieran, miraba a ambos con desesperación.
El corazón de los tres latía rápidamente, los TryHard iban muy equilibrados, comían manzanas doradas, pero en esta ocasión Shadoune saco una poción, dándole clara ventaja en el combate, Missa vio como estaban por clavarle la espada a su pareja, gritaba e intentaba llegar a el arrastrándose, cómo su cuerpo le permitiese, pero Shadoune retrocedió.
—Mon amour, vine a salvarte, no dejaré que tus bellos ojos vean esto, no dejaré que nada más te pase.—
Acaricio las mejillas de Missa, finalmente, dando un beso en su frente, el Chico solo rogaba que ayudarán a su pareja, cosa que le partía el alma a Shadoune, negó, dando a entender que Spreen tendría el Final que le correspondía, beso sus labios de una forma corta, Missa nuevamente intento llegar a su pareja.
Cuando ambos voltearon, el oso estaba empuñando su espada, Shadoune había Sido tan tonto de dejarse llevar y ver a Missa más que al Peligro, logro esquivar el ataque, pero Missa fue quien recibió el ataque.
La sangre de Missa salía de su pecho y boca, Todo pasaba tan rápido.
—S-Spreen... No... No siento nada...—
Su pareja tomo su cuerpo débil, miro la situación, por primera vez analizó, dándose cuenta que Missa ya no necesitaba esto.
—¿Amor? ¿Que... Que haces? Yo... Te... Te Amo, Spreen.— Pero Spreen no contesto.
Missa quien temía, negaba y veía como su pareja sacaba la espada de su abdomen, la sangre salió más, por primera vez, Shadoune tuvo piedad de Missa, en un corte Fino u profundo corto la garganta de su amado, así asesinandolo.
Todo fue en cuestiones de Segundos, tan poco que Shadoune no pudo reaccionar, nuevamente habían quitado a su Missa.
El Joven en ningún momento dejo de amar al oso, incluso en sus últimos segundos le vio con ojos de Amor, ers un tonto por amarlo.
Dejo su cuerpo, dispuesto a tomar su espada y correr el mismo destino que su amor.
El Francés lo detuvo.
—No, si tú lo haces, tendrás redención, no mereces redención, no mereces piedad, no mereces nada.—
Pero a pesar de eso, ¿Cómo podía ser Shadoune tan cruel con algo que Missa amo tanto?
"MissaSinfonia ha Sido Víctima de Spreen." "MissaSinfonia tiene 0 de 3 Vidas. "MissaSinfonia ha Sido Eliminado.
"Spreen ha Sido Víctima de Shadoune." "Spreen tiene 0 de 3 Vidas." "Spreen ha Sido Eliminado."
Shadoune lloraba claramente, en esos días había a sus amigos, el amor de su vida, su familia, ya nada tenía sentido.
Ahora solo podia hacer una cosa, Ganar ese maldito juego para enfrentarse a los dioses y darle una vida Digna a su amado Missa.
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