[Extra Uno]

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VIVA LA HORNYLERIA
DENSE COMO CAJON QUE NO CIERRA.

Después de aquel encuentro en la casa de Pavitr, el menor no podía caminar, también porque aquellos encuentros se habían vuelto seguidos, casi todos los días, algunas veces era detrás de la escuela, en el salón de música menos usado, la enfermería que ni siquiera las enfermeras estaban ahí o los baños que estaban lejos de los salones.

O a veces en las clases ,como en las mesas no se podía ver las piernas ya que estaban tapadas, Pav se ponía abajo y le hacía una felación a Hobie en las clases, nadie se daba cuenta porque era silencio y el británico era tolerante a las estimulación que recibía por parte del menor y no soltaba gemidos e incluso tomaba el pelo de el hindú y lo hundía para que chupara más su miembro , el menor siempre tenía sus manos en las rodillas .

Jugaba su cabello , lo peinaba,entre otras cosas.

El menor parecía ahogarse , pero en realidad no, estaba mojandose mientras hacía la felacion al mayor ,lo miraba directamente a los ojos y tragaba todo lo que salía del miembro del mayor.

Al llegar a la casa siempre era la misma historia.

El menor soltando jadeos y gemidos mientras el británico se hundía cada vez más en el , amaba eso , lo hacia tocar las estrellas, se agitaba ya que estaba saltando de forma seguida en el miembro del mayor, gimiendo y gimiendo.

-Eso fue maravilloso-Dijo el menor entre jadeos, sus piernas estaban temblando y estaba encima de su novio.

-Me encantas-Dijo el mayor abrazandolo por la cintura,amaba eso, sus manos grandes en sus cinturas, lo miraba a los ojos deseando más de el.

-A mi también me encantas, pero mis papás ya van a llegar-Dijo el hindú, tenía que limpiar todo, desde las manchas de semen en la alfombra de su cuarto, echar ambientador , y recojer todos los condones que estaban en el suelo.

-Te ayudo si?-Dijo el más alto.

-Bien-El menor se paró, se puso una bata y recogió los condones del suelo para botarlos.

El más alto recogió la ropa del suelo, la ropa interior, la vincha del menor , etcétera.

Después de un rato ya habían recogido todo , el menor se despidió del mayor con un beso para que se vaya a su casa.

El menor solo se queda sentado en la sala esperando a sus padres, ellos veían a su hijo como un pequeñito todavía, que era inocente, si le dijeran que trae a alguien tres años mayor que el a la casa para coger y que hasta lo han echo en su cama, no lo creerían, su niño inocente no era capaz de eso.

Que necesitaba de alguien 34 centímetros más alto que el para satisfacerse , retorcerse en sus brazos mientras lo dejaban sin aliento en cada embestida que le daba.

Que en su cama fue la vez que lo habían echo gritar cuál perra en celo, le ataron las manos y le sostuvieron los muslos para que salte encima del miembro de quien confiaban a el como el cuidador del menor.

Que aquel cuidador le gustaba metérsela a su hijo hasta dejarlo sin aliento y lleno de semen hasta revalsar.

Aquel, ahora también se lo estaba cogiendo en la cama de los padres del menor.

Sweet Pussyboy Donde viven las historias. Descúbrelo ahora