Mi Contrato Con Un Mafioso

Capitulo 34

Capitulo dedicado a MarianaCastillo522
Seguidora de la historia 👾💗✨. Que me tarde porque tenía tantas expectativas con este capítulo así que disfruten y comenten que les pareció. ¡Por las sábanas doradas de Víctor! Comenten jajaja.

Capitulo 34

Víctor De La Peña

—¿Qué quieres? —contesto de mala gana la llamada de Martín.

Últimamente este cabron solo me causa problemas, es un inmaduro que solo me sirve para meterse en lío tras lío. Lo tolero por qué a su edad era igual o peor.

—No te imaginas a quien tengo enfrente —comenta como si ni el mismo pudiera creerlo.

—Déjate del misterio y habla —le bramo.

—A la falsa Eréndira Mayer —me suelta.

—Tráemela —le ordeno.

Rastreo su ubicación y mando refuerzos. Si la tiene enfrente es por que está sin protección, Salvatore descuido a su amada. Una sonrisa se me forma en los labios, me acaban de alegrar el día.

En meses he logrado lo que pocos en el negocio, y ahora estoy a su nivel. Tengo mi propia línea de armas que compite con la de Salvatore y me va de maravilla con la nueva droga que estamos manejando los hermanos Peña, el (Cafune) es la sensación del momento, nos ha abierto puertas para hacer buenos negocios con socios que antes no nos volteaban ni a ver. Han sido años de esfuerzo y hoy por fin estamos en la cima, donde debimos estar desde siempre. Aún recuerdo cuando Jhoony y Salvatore se internaron burlar en mi cara, pero no contaban con que tenía a Eréndira de mi lado, persona que también ha sido pilar para escalar, no lo niego. De esa burla salió algo bueno, ella, la debilidad de Salvatore. Esa mujer tiene algo que me dejó con sueños húmedos frustrados. Llevo tiempo buscándola pero el egoísta de Salvatore la tenía bien cuidada en su mansión, y ni como entrar allí.

<<La soltó por un instante, y no va volver>>.

Si Martín me trae a la misma mujer de ojos negros que vi aquella vez, juro que le haré un altar en su memoria. Para atacar a tu enemigo hay que conocer sus debilidades, no le conocía ninguna. A Salvatore lo creía invencible, hasta que me la puso enfrente.

Soy rencoroso, ¿Quién no lo es?.

—Señor, su hermano ya está aquí —me informan a la puerta.

Llevo horas esperando, tardaron más de lo que creí. Bajo a la sala y efectivamente, Martín se sacó la lotería. La mujer llora mientras la arrastran hasta una silla donde la amarran. Detesto el chiche, secuestrar a la mujer de tu enemigo no estuvo en mis planes pero ella es la única alternativa, solo que cambiaré un poco las cosas, Salvatore no moverá ni un solo dedo por rescatarla. De eso estoy seguro.

—¿Qué modales son esos? —intervengo—. Me harás quedar mal con la señorita. Los Peña somos unos caballeros.

Es sarcasmo, obviamente de caballeros no tenemos ni un pelo.

—Es por seguridad —habla Martín.

—Suéltala —ordeno.

—Pero…

—Se hace lo que yo digo —reafirmo mi postura.

Me acerco y la mujer tiembla sin poder contener el llanto. La observo de pies a cabeza, no es de mis gustos pero tiene algo que me incita a perderme en sus ojos. Las bellezas exóticas son tan…

Tentadoras.

—¿Me recuerdas? —le pregunto arrodillándome y le tomo el mentón—. Estoy seguro que si, porque así como yo no te he olvidado tu tampoco a mi.