La vida de los adolescentes - JENLISA g!p

Capítulo 43

POV DE LISA

-Jennie, amor. ¿Qué estás haciendo? -golpeé la puerta del baño

Estábamos en su habitación y hace media hora se encerró en el baño. Me dijo Déjame hacer algo y salgo. Escuché un par de ruidos y después silencio. Me preocupé pensando que le pasó algo.

No creo que esté cagando.

-Princesa -tomé el picaporte y no estaba con seguro

Entré y...-Pero... -muda quedé

Tragué saliva al verla depilarse su parte íntima.

-¡Lisa!¡Sal! -no me moví ni una pulgada- ¡Vete! -se arrancó la cera de la piel y se acercó a mí- Mi amor, espera afuera

-¿Por...por qu...por qué te estás depilando? No tienes ni un jodido pelo -fruncí las cejas

-Ve a la cama -me tomó por los hombros

-¿Por qué te depilas?

-Porque tengo pelos -se sonrojó

-Eso no es cierto

-Si lo es

-No -se tapó la cara con las manos y suspiró

-Cariño, no mientas. Sé que ayer los sentiste -hice un flashback en mi cabeza del día de ayer

Jennie y yo despertándonos.

Jennie y yo tomadas de la mano mientras caminamos a su clase.

Jennie y yo en el entrenamiento.

Jennie y yo haciendo el amor.

Ahí recuerdo.

Pude haber sentir unos vellos muy pequeños pinchando mi pene, pero fue solo unos segundos.

Le destapé la cara y la sostuve de las mejillas- Sabes que no me molesta que tengas vellos, te lo dejé en claro muchas veces

-Entonces si los sentiste ayer

-Amor, no me molestan

-A mí sí -negué la cabeza con una media sonrisa

-Te dejo que termines

Antes de salir me detuvo- Cariño

-¿Si, princesa?

Me dio una sonrisa gomosa y miró entre la espátula de madera y yo.

Sé lo que tiene en mente y absolutamente no.

-No

-Ni siquiera sabes lo que te voy a pedir

-Si lo sé

-Por favor -negué- Por favor -sus ojos se transformaron como el del gato de Shrek

No me pongas esos ojos porque voy a terminar cediendo, pensé.

-No, Jennie

-Por favor, Lili

-Me va a doler como la putísima madre -nunca me depilo mis partes con cera, solo me rasuro

Siendo sincera no me rasuro hace dos meses, Jennie me dijo que le excita más que tenga vellos porque le pinchan y le hacen cosquillas y, como buena novia que soy, los dejé crecer. Pero viéndola ahora, tal vez lo dijo para después ella depilarme.

-No te va a doler, confía en mí

-No

-Por favor, mi amor. Será divertido

-Será doloroso -repliqué

-No seas marica -¿me acaba de decir marica?

Eso sí que no.