¿𝑺𝒐́𝒍𝒐 𝑪𝒐𝒎𝒑𝒂𝒔? [sɪʟᴠɪᴏ ɢᴀᴍᴇʀ x ᴏᴄ]

[ 2 ]

La chica llevaba una sonrisa en su rostro, podría estar empezando la semana y con ella un montón de trabajos escolares, pero le importaba poco, sólo pensaba en lo bien que lo pasó esos últimos días.

En un momento observó a su grupito de cinco amigas y decidió acercarse, las vió muy concentradas en su conversación que no notaron que ella se acercaba. Las asustó gritando cualquier cosa al azar, miró como todas se sobresaltaron y pegaron grititos de la impresión, ella sólo rió por sus reacciones. Ni siquiera sabía cómo lograba encajar en ese grupito, ellas eran tan diferentes a Color que hasta podría decirse que eran polos opuestos.

—¿Cómo estáis, chicas? —preguntó la pelinegra aún riendo, aunque intentaba cesar su risa para no molestarlas

—Pues, casi me da un paro cardíaco por su repentina aparición —expresó una peliblanca con una mano en el pecho aún recuperándose del susto

—Ah, bueno, ya me conocéis —Color chasqueó la lengua mientras se encogía de hombros sin darle importancia

—¿Qué hay de tí? Te desapareciste todo el fin de semana, ni siquiera fuiste ayer a la fiesta en casa de Omega —habló Dixsy con cierta curiosidad, aunque suponía la razón de su ausencia

—No hice nada, sólo estuve con Silvio y ya —dijo con simpleza

Sus amigas se miraron entre sí de manera cómplice, también sospechaban de ellos dos. La pelinegra notó eso y rodó los ojos fastidiada, en cierto modo le molestaba al igual que a Silvio que pensaran así de ellos.

—Ay, no, ya les he dicho que él y yo no tenemos nada, ¿qué parte de que es sólo una amistad no entienden? —se quejó aunque ellas no habían dicho nada

—Bueno, lo que tu digas —volvió a decir la rubia levantando las manos pacíficamente

—Cambiando de tema, ¿estudiaste para el exámen de química? —preguntó ahora una rubia de mechas anaranjadas

Al escuchar eso la expresión de la pelinegra cambió drásticamente a una aterrada.

—¡¿Cuál exámen?! —inquirió con notable sorpresa

—Lo dijo el profesor el jueves pasado, había que estudiar todo el fin de semana —contó Lyna con obviedad

—¿Qué se supone que vas a hacer si no estudiaste nada? —dijo esta vez la castaña del grupo

—A-ah, p-pues no sé —comenzó a pensar una solución desesperadamente—. ¡Ya sé! L-le pediré a Silvio que me pase las respuestas por mensaje y las anotaré, é-él no tendrá problema con pasarme las respuestas

Sus amigas la escuchaban hablar nerviosamente, sabían que ella era muy inteligente, pero a la vez muy irresponsable y se olvidaba las cosas fácilmente. Notaron algo detrás de la de ojos marrones y se miraron disimuladamente reprimiendo una risa. Color notó eso y se calló de golpe mirando a sus amigas, frunció su ceño extrañada, su cambio repentino la desconcertó.