Anoche soñé contigo, llevabas puesta esa polera gris que tanto me gustaba. No recuerdo mucho, solo que me sonreíste como si todo estuviera bien en el universo y nada pudiera herirnos.
También llevabas el piercing, ya sabes, el que te hiciste hace apenas un año cuando llevábamos algunos meses sin hablar.
Claro que lucias diferente. Más pleno, más lleno, más feliz.
Desperté con ganas de no dormir nunca.
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Allá abajo.
Short Story𝗔𝗹𝗹á 𝗮𝗯𝗮𝗷𝗼 𝗻𝗼 𝗲𝘀 𝗹𝗼 𝗺𝗶𝘀𝗺𝗼 𝗱𝗲𝘀𝗱𝗲 𝗾𝘂𝗲 𝘁𝘂 𝗻𝗼 𝗲𝘀𝘁á𝘀. 𝗡𝘂𝗲𝘀𝘁𝗿𝗮𝘀 𝗰𝗮𝗻𝗰𝗶𝗼𝗻𝗲𝘀 𝘀𝗼𝗻 𝗮𝗽𝗲𝗻𝗮𝘀 𝘂𝗻 𝘀𝘂𝘀𝘂𝗿𝗿𝗼 𝗮𝗵𝗼𝗴𝗮𝗱𝗼 𝗯𝗮𝗷𝗼 𝗲𝗹 𝗳ú𝗻𝗲𝗯𝗿𝗲 𝗿𝗲𝗰𝘂𝗲𝗿𝗱𝗼 𝗱𝗲 𝘂𝗻𝗮 𝗲𝘀𝘁𝗮𝗰𝗶ó𝗻...