Imagina que escribes un fic de Bill... y él lo protagoniza en la pantalla grande... ★彡
La novela fantástica de TN es llevada al cine, donde es protagonizada por Bill, quien inspiró su personaje principal. Sin embargo, eso es algo que ella no ha quer...
Recordar todo lo que pasó en mi infancia y adolescencia me dejó melancólico. Pero hacer parte de ello a TN, me da una fuerza que no esperaba. Me hace sentir acompañado en la lucha contra mis demonios. Si creía que no podría estar más enamorado de ella, estaba muy equivocado. A la mañana siguiente de nuestra plática, me disculpé con mi madre por la manera en que le hablé. Mi novia me reiteró lo orgullosa que está de mí, y me ayudó a volver a enfocarme en todo lo que My logró con tal de apoyarme, de sacarme adelante de mis propios problemas. Sé que es algo que debo seguir trabajando emocionalmente, porque odio que esos sentimientos del pasado lastimen a mi madre, o que tomen nuevas formas para lastimar a TN. No voy permitir eso.
A pesar de ese episodio incómodo, hemos pasado unos excelentes días en Estocolmo, tanto que TN me pidió quedarnos más de lo pensado, por lo que ya no podríamos ir a Malmö. Sin embargo, el quedarse más tiempo con mi familia a disfrutar el archipiélago la ha hecho muy feliz. Creo que uno de nuestros momentos favoritos fue cuando todos salimos al patio trasero a disfrutar la tarde del domingo con comida casera; mi princesa se ha encariñado tanto con mi madre y mis hermanos que nuestra pronta partida la está poniendo extraña.
—¿Ya terminaste de empacar?
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—No me quiero ir, señor Skarsgård.
—Ay, mi amor —me río con su dramática broma. La abrazo y ella frota su mejilla en mi pecho.
—Me gusta escuchar cómo palpita.
—A mí también me gusta poner mi cara en tu pecho —bromeo con una sonrisa de lado que la hace sonrojar.
—Me encantó tu ciudad.
—Me alegra oír eso, porque tienes las puertas abiertas aquí, TN. Todas las veces que te dijimos que te mudaras fueron en serio. Tú sabes que te amo.
Ella me mira con sus ojos cristalinos, tanto por las lágrimas de felicidad que se asoman como por lo honestos que hemos sido el uno con el otro.
—Bill, hay que hablar; tengo algo que decirte. Anoche...
—¡TN! Hermana —Valter se asoma por la puerta abierta e interrumpe hablando en el idioma de TN, lo cual la sorprende.
—¡Valter!
—No te vayas, TN, que me pongo triste.
—Aw, Valty. Yo también te voy a extrañar —los dos se abrazan y me dejan viendo, hasta que se dan cuenta de mí y me incluyen.
—Los esperamos abajo para el fika —nos avisa antes de salir de la habitación.
—Ahora sí, princesa, ¿qué me ibas a decir?
—Ah... ya se me olvidó —sonríe, pero sé que lo recuerda muy bien. Anoche... anoche al salir del baño se quedó sentada en la orilla de la cama, en silencio; me miraba y volvía a quedarse quieta. Le pregunté qué tenía, pero ella no respondió. Me asustó un buen rato, sobre todo cuando se le salieron varias lágrimas; acaricié sus mejillas y entonces se acostó a mi lado, me abrazó y tardó en quedarse dormida con mis cariños.
