El día del viaje llegó, el mexicano se encontraba emocionado, viajaría a lado del más grande de sus amores, estados unidos, pero este último solo de preocupaba por la situación del latino, sin embargo, ya todo está listo, no había marcha atrás.
Ambos empacaron sus cosas, se despidieron de sus amigos y partieron hacia el aeropuerto.
—Bien ya todo está listo...¡No puedo creer que ya llego la hora! —Miraba el paisaje, adoraba apreciar cada detalle, no quería perderse de nada
—¿Ya tomaste tus medicamentos Arti?...no quiero que te pongas mal en el camino
—Por su puesto que si Evan...
La preocupación en el pelirubio podía sentirse en el aire, solo miraba de reojo al contrario, viendo lo feliz que aparentaba, pero y si ¿Estaba ocultando su dolor?...
—Si no te sientes bien, podemos suspenderlo , me preocupas mucho
El mexicano solo lo abrazo con una enorme sonrisa iluminando su rostro, sus mieles parecían ahora soles, era majestuoso aquel hermoso ser que por un instante creyó que la enfermedad no se hayan en el, pues parecía no tener nada.
—¿Cómo lo haces?...no pareces estar enfermo...—Pregunto confundido
—No me gusta lamentarme, prefiero disfrutar los pequeños placeres de la vida ¿Sabes?....como por ejemplo, tu compañía
El silencio gobernó por varios minuto, las mejillas blancas del estadounidense se colorearon de un carmesí muy tenue, la vergüenza lo hizo desviar la mirada.
—Uy que serio —Rie con cierta ternura y picardía — Bueno, andando que se nos hace tarde...
—¿Has visto alguna vez la nieve?.
—Ammm muy pocas veces jejeje, pero sip ..aunque no lo creas, en México también cae nieve, pero bueno ¿Es época de nieve en Estados Unidos?...
—Amm no, pero si quisieras...
—A bueno, no lo sé, pero tal vez si, podamos ir alguna vez, si nos da tiempo
Continúa la amena charla hasta el aeropuerto, el estadounidense ayuda a cargar las maletas del mexicano, algo que desaprobó este último
—Oye, no tienes que cargar mis cosas ¿Sabes?...
—Amm si tengo niño cachetón, estás enfermo y debo cuidarte, así que vamos que tu lo dijiste, de nos hará tarde aunque falta más de una hora para nuestro vuelo
—Nunca es demasiado temprano...así sirve que no perdemos el vuelo...y puedo darte esto —Saca una pequeña cajita y se la da — es un obsequio por cuidar de mi
—No tienes por qué darme esto Arthur, me preocupas...
—Anda, aceptalo por favor, es una ofrenda de agradecimiento
—Bien, lo voy a tomar — toma la cajita y la abre, encontrandose con un par de pulseras tejidas en color rojo, el color favorito de Estados Unidos y convenientemente también el de México —Vaya que lindas, ¿Tu las hiciste?...eres realmente talentoso
—Mi mami me enseñó a hacerlas, y bueno jejeje creo que saque lo talentoso de ella
—Si me imagino, ella debe ser increíble, deberías presentarmela
—Eemm si jejej, tal vez lo haga cuando vayamos a México...bueno, vamos al avión
—A si...pero antes, supongo que una pulsera es mía y otra tuya — Toma una pulsera y de la da, notando que en el dije estaban las banderas de ambos —Mira que lindo detalle, me encanta —Toma la mano del mexicano y le pone la pulsera, posterior a ellos se pone la suya en su mano derecha — Gracias, que lindo detalle
Se escucha en los altavoces del aeropuerto que a su vuelo le faltaba poco para despegar, por lo que ambos dieron paso en marcha para así entrar al avión y sentarse en sus respectivos lugares, uno a lado del otro, Mex a un lado de la ventana claro.
—¿Ya habías estado antes en un Avión México?
—Ammm sip, pero realmente me dormí y no pude experimentar lo que se sentía
—Bien, lo bueno es que ya te has subido a uno, me preocupaba eso...considerando también la situacion en la que te encuentras, pero no habrá tanto problema —Justo en ese instante, el avion despega, el mexicano, al recibir el movimiento, toma el brazo del estadounidense un tanto asustado — ¿Todo bien Mex?
—Es que ya no recordaba está sensación, y me asusté jejeje, ¿Tienes problema con que te abrace un ratito?.
—Para nada, si te hace sentir seguro adelante...por cierto ¿A qué hora te tocan tus medicamentos?..
—A si...me toca en la tarde y en la noche
—Exactamente a qué hora —Mira su reloj y pone su alarma
—Me toca después de la comida que es a las 3:00 y a las 11:00 de la noche
—Bien, ya se cómo notificarme de que debes tomar tu medicamento¿Ya no te ha dolido el pecho o has tenido problemas para respirar?
—Solo hoy en la noche...pero se me quitó
—Cuando sea así no dudes en llamarme Mex, quiero estar más al pendiente de ti, y si es necesario iré a vivir a tu casa...¿Tienes problema con eso?...
—¿A mi casa?...es que bueno, es muy chiquita y mi
—O en mi casa, no hay ningún problema, aunque no tengo problema si duermo en el sofá
—No te haré dormir en el sofá, además, estaré bien, no tienes por qué preocuparte...pero te dejo pensarlo hasta que termine el viaje...no quiero que estés solo
Sigue el vuelo, tenían que subir más o menos a dos aviones más para llegar a Estados Unidos, algo que no molesto a ninguno, ya que sería un camino muy largo, y con respecto a las reuniones, ONU ya les había aclarado que ellos podían ausentarse en las juntas, pues además de que no eran los únicos.
Ya estaban por llegar, el mexicano dormía en el hombro del estadounidense, mientras esté leía, un mensaje interrumpió sus pensamientos, era Adeline la emisora.
—¿Cómo vas con México?...le estas haciendo creer que le preocupas ¿No es así?
—Sip, poco a poco me gano su confianza, ¿Que fue exactamente lo que le dijiste a Francia y a ellos?
—Lo que me dijiste esa vez que nos encontramos en la cafetería, obvio no les dije acerca de nuestros planes, no quería arruinar todo, ellos siguen creyendo que cambiaste por México
Su estómago se revolvió un poco al escuchar acerca de esto, pues era un poco cierto, todo era confuso, aceptaba sus sentimientos por el mexicano, pero tampoco podía permitir que eso arruinara su plan de sacar provecho de todas las ganancias que esto le traería.
Por esto pidió ayuda de Adeline y le dijo exactamente lo que está debía decir y hacer, así que su plan comenzó, justo cuando el estadounidense fue por primera vez a la casa del mexicano, esto antes de que se mudará, puesto que ahora Arturo estaba pasando por problemas económicos y ya no le alcanzaba para pagar la anterior casa.
El plan del estadounidense, así como el de los europeos se ponía en marcha, sin que el latino sospechara, pues justo estaba cayendo en la trampa, pues al estados unidos sentir algo por Mex, lo hacía ver aún más real.
Tanto Evan como Adeline dejaron de charlar para que así no haya sospecha, sin saber que alguien si sopechaba, quien se mantendría en silencio hasta averiguar que planeaban.
Así es gente, Estados Unidos resultó ser un doble cara, pido disculpas por tanta ausencia pero la chamba aveces no me permite seguir, espero les guste el capítulo y de verdad gracias por el apoyo, aunque sea muy poco, significa mucho para miLos tqm 🌷
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Si mi luna muere
RomansaEvan (Usa), un joven egocéntrico y narcisista, debe hacer un trabajo con su joven vecino y admirador México (Arturo) por mandato de ONU, con el objetivo de unir más a ambas naciones, algo que no le apetece para nada al estadounidense, pero al recibi...