𝗠𝗶 𝗣𝗮𝗱𝗿𝗲 𝗘𝘀 𝗔𝘅𝗹 𝗥𝗼𝘀𝗲

𝗖𝗮𝗽𝗶𝘁𝘂𝗹𝗼 𝘁𝗿𝗲𝗶𝗻𝘁𝗮-𝘂𝗻𝗼

Aquella mañana Axl despertó por el sonido de una molesta alarma y el olor a humo.

Bajo corriendo a la cocina.

-Chico... Qué...

-Trate de hacer el desayuno- Aarón apagó la alarma contra incendios- veo que ahora la cocina no se me da bien

Aarón fue a abrir las ventanas de la cocina.

-¿Por qué estabas tratando de hacer el desayuno?

-¿El humo te afectó padre?- Aarón estaba regresando a la cocina

Estaba ocultando algo detrás de él.

-Es tu cumpleaños- Aarón saco de sus espaldas una caja envuelta en papel de regalo con figuras de guitarras- Quería hacer algo casero, ya sabes que me gustan los clichés y como ves en las películas se despiertan con desayunos y pasteles en los cumpleaños... Tengo el pastel en el refrigerador pero... No se da la cocina

Aarón dejo el regalo en la mesa.

-Bueno, no se quemó todo, no queme la casa- Aarón sonrió- y te sorprendí... Tomaré eso como una victoria

Aarón estaba sirviendo dos platos de comida.

-No te lo tienes que comer sabes- y dejo un plato al lado del regalo

-Entonces tu intento de cocinar o de quemar la casa habrán sido en vanos- Axl tomo el plato- gracias hijo

No se suponía que Aarón tenía que estar ahí, tenía que estar en una sección de fotos en Londres para una entrevista pero había pedido que lo dejaran quedarse para festejar el cumpleaños de su padre.

Aunque su avión salía en la noche aun así los dos querían ir a dar un pequeño viaje de carretera.

-Podemos comer el pastel como postre, le pregunté a Duff cuál era tu sabor favorito- Axl pudo notar la emoción que tenía Aarón

No es que el no estuviera emocionado, lo estaba pero estaba más contento de pasar lo que sería su primer cumpleaños con su hijo.

O que Aarón moviera su agenda para poder pasar tiempo con él.

-¿Vas a abrir tu regalo?- Aarón estaba sacando el pastel

Era pequeño, exactamente para dos personas.

-No es nada malo, ¿Verdad?- Axl pregunto

-Un disco de Nirvana- el pequeño Rose lo miro con una sonrisa sarcástica- puedes solo abrirlo y dejar de verme así

Axl suspiro.

-Supongo que no envolviste tú el regalo, digo... No tienes ordenado tu cuarto y esto está perfectamente envuelto

-Lo hice- otra mirada por parte de Axl- Linda me ayudó... Bueno Linda lo envolvió, solo ábrelo quieres

Aarón se cruzó de brazos, aquel gesto solo hizo que Axl se riera de él.

La caja en si tenía otra adentro, un sombrero negro con un solo liston blanco con una pluma que se encajaba en la liston.

Dentro había otra caja, está no tenía envoltura pero el contenido que tenía.

Era un collar con la figurilla de un ave, un churrinche. Lo sabía por qué uno de los pasatiempos de Emilia eran las aves, les encantaba verlos y estudiar sobre ellos.