Un Amor Prohibido

CAPITULO 22

Narra Sara.
Ya habían pasado como cuatro días desde mi cita con Agus y la verdad era; que no había podido pegar un ojo en toda la noche; pensando en si debía o no contarle a Jazmín lo que había pasado; al final, llegué a la conclusión de que lo mejor sería no decirle nada para no herir sus sentimientos.

Pero no crean que fue fácil; ya que en cuanto esa niña me vio, empezó con el interrogatorio y yo por otro lado no sabía cómo responder a ciertas preguntas cómo: dónde estabas? Por qué te desapareciste como por 3 horas? Y la más importante; con quién estabas?.

Tuve que inventar una respuesta y rápido; porque si algo era seguro, era, que Jazmín no me iba a dejar en paz hasta que le contara lo que supuestamente había pasado; por eso, le dije que había salido a caminar y que como la ciudad era tan grande me perdí y que no tenía señal para llamarlas.

Lo bueno fue que por lo visto, me terminó creyendo el cuento; porque después comenzó el típico sermón de, pero por qué te fuiste sola y sin avisar? Para la próxima buscas la manera de contactarnos, entendido.

Y yo por otra parte, le tuve que decir que sí porque si no quién la soportaba; después de eso ella me miró y me dijo.

Es que solamente a ti se te ocurre ir a conocer la ciudad sola, te volviste loca o qué?

Ya entendí mamá. Respondí y el resto de los días trataba de evitar el tema lo más que se pudiera; porque no quería que me hiciera más preguntas al respecto.

En todo ese tiempo trataba de buscar la manera para poder hablar con Nicole a solas para contarle todo!; Pero era un poco complicado ya que Jazmín se la pasaba todo el tiempo con nosotras; entonces se me ocurrió una idea.

Le dije a las chicas que el día estaba muy bonito como para estar encerradas en el hotel; por eso les comenté de que había un parque de diversiones muy cerca de ahí al que podíamos ir, cosa la cuál no les pareció mal plan.

Cuando llegamos, intentaba buscar una excusa para poder hablar con Nicole y cuando vi la fila para los juegos; y me oportunidad, por lo tanto, tratamos de convencer a mi tía y a Jazmín para que fueran a comprar las entradas; por eso, les inventamos un millón de razones por las que teníamos que subir y justo cuando se fueron; tomé a Nicole de la mano y la llevé hasta un lugar apartado donde no estuviera mucha gente.

Me quieres explicar qué hacemos aquí? Y por qué te has comportado tan extraño últimamente?. Preguntó mi amiga con un poco de curiosidad.

Solo quería decirte, qué tenías razón.

Ya lo sabía; pero me podrías decir en qué tengo razón?.

Casi me besa.

Quién?.

Casi me besa.

Quién?.

El, casi me besa.

Pero te estoy preguntando quién? Ah! casi se me olvida; cómo te fue en tu cita con Agus?.

Eso es lo que trato de decirte.

Bueno y qué pasó?.

Agustín.

Y qué pasa con Agustín?.

Qué, Agustín, casi, me, BESA.

Qué?

Cállate, que acaso quieres que nos escuche toda la ciudad o qué?.

Pues no, pero qué fue lo que pasó?.

Nos fuimos a comer helado de lo más normal, pero de un momento para otro, me dijo que le gustaba una chica; pero cada vez que trataba de contármelo, alguien nos interrumpía y como yo tenía el presentimiento de lo que me iba a contar, trataba de cambiar el tema de conversación lo más que se pudiera; sonó que tal vez hice un comentario que no debía.