Un Amor Prohibido

CAPITULO 18

Narra Nicole.
Justo cuando estábamos saliendo del cine, recibí una llamada de maxi; así que decidí contestar y lo que me dijo fue que nos invitaba a las tres, para ir a ver una película en su departamento.
Cosa a la cual no me negué; porque sabía que las chicas se iban a emocionar demasiado y yo por otro lado, tenía que admitir que esos dos me caían súper bien; la película sería para mañana en la noche, entonces tendría mucho tiempo para contarles y se preguntarán; por qué mejor no se los contaba en este momento; era muy simple, quería darles una pequeña sorpresa además, conociéndolas como las conozco, sabía que eran demasiado impacientes por eso decidí dejarlo pasar.
Cuando llegamos al lugar donde nos hospedábamos, nos despedimos rápidamente de las chicas y les agradecimos por el increíble día que habíamos pasado; después, subimos de prisa hasta nuestra habitación, donde la tía de Sara nos estaba esperando para hacernos un interrogatorio, ya más tarde cuando le habíamos contado todo con lujo y detalle nos fuimos a dormir.
Al día siguiente, fui la segunda en despertar, en eso me dispuse a levantar a las chicas.
Niñaaaaas!, Despierteeeen!, Hoy es un hermoso día.
Qué te pasa loca? Preguntó Sara, entre dormida y despierta.
Nada, solo que hoy es un muy bonito día, como para que lo estén desaprovechando mientras duermen.
Okay, tienes razón; solo dame un segundo. Dijo la ojos verdes mientras se levantaba de su cama.
Y tú qué; ya despierta jazmín. Dije a la chica pelo negro quién se estaba tapando con las almohadas.
Déjame dormir Nicole y deja el fastidio.
Ay ya, jazmín; tendrás mucho tiempo para dormir cuando regresemos a casa. Respondió Sara.
No me importa; porque nada de lo que digan o hagan me va a sacar de aquí..
Estás segura, porque los chicos ayer me llamaron para invitarnos a ir a ver una película esta noche en su depa. Contesté con una gran sonrisa.
Que! Y por qué no me contaste esto antes, ahora tengo que ver que voy a ponerme.
Pero si la salida es esta noche. Respondió Sara con un toque de confusión.
Por eso mismo, es mucho peor de lo que me imaginé!, Tengo que ir a la peluquería e ir a comprar más ropa.
Pero sí fuimos de shopping ayer?. Interrogué con un toque de diversión; ya que me entretenía bastante lo dramática que podía llegar a ser Jazmín en ocasiones.
Y te parece poco?, Ya no tengo nada nuevo que ponerme!; Sara, vienes conmigo?.
No, yo paso; voy a ver que me estreno de lo que compramos ayer.
Bueno, tú te lo pierdes. Finalizó la ojos azules.
Okey, mientras ustedes siguen con su crisis existencial de moda, yo me iré a desayunar con la tía de Sara; quien quiera puede venir conmigo y si no triste; así que chao. Dije cerrando la puerta tras de mí.
Necesitaba estar sola por un momento sí quería planear bien cuál sería mi próxima jugada; porque sé perfectamente que las chicas pensaban que yo iba a ir, lo que ellas no sabían era que me iba a inventar una excusa para poder dejarlas a solas con los chicos.
Cuando cayó la noche, me dispuse a comenzar con mi gran idea para que no me dejaran ir.
Hey Nicole qué te parece esta ropa?. Preguntó Sara emocionada.
Abuela Miranda, eres tú?. Dije de forma dramática esperando a que se creyeran mi gran actuación.
Que!, Me veo tan mal?. Respondió la chica horrorizada.
Sara, jazmín, son ustedes?.
Si, somos nosotras; pero tú qué tienes? Y por qué no te has arreglado aún?. Preguntó Jazmín mirándome con preocupación.
Lo que pasa es que me siento mal; dudo mucho que pueda ir así, por lo tanto, será mejor que vayan sin mí.
Eso ni lo pienses; nos quedaremos aquí cuidándote. Contestó Sara con determinación.
No, no hace falta; yo le diré a tu tía que me cuide; de todos modos no es tan grave.
Cómo que no; déjame ver; Nicole tienes fiebre, no podemos dejarte en estas condiciones.. dijo la chica pelo negro dispuesta a quedarse.
Si, saldremos con los chicos otro día; cuando tú ya te sientas mejor. Contestó la pelo castaño terminando la oración.
No, no y no; ya les dije que voy a estar bien, es solo un pequeño resfriado; ahora vayan y diviértanse sin mí.
Estás segura?. Preguntó Sara apenada.
Si, muy segura; ahora largo, fuera.
Okay pero cualquier cosa nos avisas y vendremos para acá volando.
Si, si, Jazmín Yo cualquier cosa les aviso; ahora vayanse, adioooos. Dije prácticamente cerrándole la puerta en la cara; cuando por fin logré que se fueran me puse a ver qué encontraba de interesante en la televisión; pero como no encontré nada que me gustara, decidí ponerme a escuchar música; pero con lo que no contaba era, que justo en ese momento entró la tía de Sara.
Nicole; las niñas me contaron que tú... Me quieres explicar qué significa esto señorita!.
Aamm! Yo, puedo explicarlo. En resumen, tuve que contarle todo y pedirle que por favor no me delatara por qué lo único que quería era que las chicas fueran felices.
Narra Sara.
Estábamos un poco tristes al saber que Nicole no podría acompañarnos; pero me tranquilizaba un poco el saber que cualquier cosa ella o mi tía nos avisarían; justo cuando estábamos bajando las escaleras recibí una llamada de Agus; quién me dijo que ya nos estaban esperando afuera.
De modo que bajamos prácticamente corriendo hasta donde estaban; cuando nos vieron se bajaron del carro rápidamente y nos abrazaron. Cómo están? Hermosas, todo bien?. Dijo el ojos cafés mirándonos con alegría.
Sí chicos todo bien y qué hay de ustedes?. Respondió mi amiga con una gran sonrisa.
Todo bien chicas; hey, dónde está Nicole?-?;que no la veo por acá?. Preguntó el ojos verdes.
Aaah, si, lo que pasó fue que ella se siente mal y por eso no pudo venir hoy. Respondí
Ooh, qué mala onda; bueno recuérdenos traerle algo, para que se sienta mejor. Contestó Maxi.
Si, como una torta de chocolate con frutillas; sí le gusta? O no?. Pregunto Agus.
Y a quien no?. Dije mientras habría la puerta del carro.
Bueno, la torta será; vamos!. Pregunto Maxi a lo que nosotros le respondimos con la señal de okey.
Cuando llegamos al edificio en el que vivían; nos bajamos en un dos por tres y subimos hasta su departamento; era muy grande y espacioso; aunque la verdad era que yo creía que con la fama que tenían era lo suficiente como para comprarse un penthouse.
Y les justa?. Preguntó Agus con un brillo en sus ojos.
Si, está muy bonita; pero yo pensaba que con la plata que ganaban era lo suficiente como para comprarse una mansión o algo así. Respondió jazmín.
Naaa, para que tanto lujo?; Creo que estamos bien así o no?. Respondió Maxi.
Pues si, creo que tienes razón. Contesté.
Bueno, quien? quiere un pequeño recorrido por la casa?. Dijo Agus con emocion; ha lo que nosotras le contestamos con la misma euforia que el; yoooooo!.
Después de terminar con el recorrido, nos sentamos en el sofá de la sala para ver la película; pero no habían pasado ni cinco minutos cuando a Jazmín se le ocurrió la brillante idea de hacerle cosquillas a Maxi.
Ya, jajajaja, por favor, jajajaja, no, jajajajaja, cortá con las bromas jazmín en serio. Contestó el chico mirando a mi amiga de forma suplicante.
No, esta es mi venganza por lo que nos hicieron en el karaoke. Respondió Jazmín a lo que Maxi salió corriendo para que no lo atrapara.
Por favor jazmín teneme compasión; porque en todo caso, tratamos de resolver la situación; y si hay alguien que se debería vengar acá soy yo; porque gracias a ustedes, le tuve que mentir a mi mamá, así que vení para acá.
Pero por qué la agarras contra mí?; En todo caso la culpable es Sara?.
Traidora!. Le grité; en eso venían Jazmín y Maxi detrás de mí; después de esa persecución tan rara Agus me hizo señas de que ya venía y cuando regresó, traía dos almohadas; una para mí y la otra para él; así podríamos contraatacar.
Pero, con lo que no contábamos, era que no sé cómo ni cuándo; pero de un segundo para otro, los chicos se aparecieron con dos globos de agua.
Así que cómo se imaginarán, lo que empezó como una guerra de dos contra dos; terminó siendo una batalla de todos contra todos.
Y como verán, todos terminamos empapados y riéndonos por lo que acababa de pasar; fue muy divertido.