little cat ♡ haobin

XXV.

Los pequeños chasquidos que hacen sus labios al separarse provoca que Hanbin comience a desesperarse.

—Siento muchas cosquillas en mi estómago Bin, ¿eso es bueno? —pregunta aún sobre sus labios, el castaño

Asiente antes de volver a besar al tintado.

—Creo que debemos ir a dormir —dice separándose provocando que un pequeño colmillo de Hao lo muerda—. Vamos pequeño.

—Pero aún no te has acabado tu pastel —sus orejitas muestran tristeza—. ¿No te gusto?

—Claro que me gustó —repara nervioso—. Pero lo comeré mañana, necesitamos dormir, y más tú pequeño —acuna su rostro entre sus mejillas para después besarlas—. ¿Ya viste esos hermosos ojitos hinchados con ojeras? —cambia un poco el tono de su voz mientras que ahora sus labios se dirigen a los párpados de Hao provocando risitas del híbrido.

—Ya basta Bin —pide entre risitas, el castaño se detiene y le sonríe—. ¿Vamos a dormir juntitos?

—Sí —besa ahora su nariz provocando un sonrojo pequeño en el tintado, ambos caminan por el pasillo hasta llegar al fondo, a la habitación del castaño.

Colocando sus respectivas pijamas, ambos se acuestan mirándose frente a frente.

—¿Te cuento algo? —dice en voz bajita.

—¿Qué sucede? —coloca una de sus manos en las caderas del más pequeño.

—Cuando no estábamos juntos, sentía que no tenía la necesidad de pensarte porque tú no me pensabas —cuenta, Hanbin sonríe triste y niega constantemente con la cabeza—. Pero sabía que eso era mentira; porque... —lleva sus manos a donde debe estar su corazón—. Mi coranzocito me lo decía, decía que tú me pensabas y eso era muy bonito —le sonríe—. Solamente quería decirte que; te extrañé mucho y que no quiero volver a separarme de ti, nunca —se acerca aún más y recarga su quijada en su pecho.

—También te extrañé mucho, jamás dudes de eso, ¿sí, pequeño? —Hao asiente mostrando sus perfectos dientes.

Hanbin comienza a cerrar sus ojitos con la intención de dormirse.

—Hanbin, quiero decirte otra cosa más —añade Hao, esconde su rostro en su cuello y lo abraza aún más, quiere sentirse protegido.

—¿Qué sucede? —su voz está cansada.

—Seokmin me dio un libro de geografia y decía qué hay billones de personas.

—¿Qué tiene que ver eso ahora Hao?

—Todas esas personas están viviendo cosas diferentes, pero... Me siento muy feliz que en este momento yo esté viviendo algo contigo.

Hanbin sonríe y besa la cabecita del tintado.

—Tu forma de decir que me quieres es única, te amo, Hao.