+48 Hours With You (Yeongyu ver.)

Capítulo 15: Eso No Es Muy Justo, Verdad?

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El aliento de Yeonjun lo baña mientras suspira suavemente, la fragancia del merlot y el champán se asienta en la parte posterior de su lengua.

—Kaisito y Soob serán felices— Una pequeña risa, sobre todo una exhalación de aliento más que nada, suena de Beomgyu mientras retuerce los mechones de la nuca de Yeonjun entre sus dedos.

—Mmm, probablemente porque no tendrán que romper más peleas.

—No, todavía vamos a luchar, eso mantiene las cosas interesantes— Los labios de Yeonjun se enroscan en una sonrisa de satisfacción, su nariz rozando una vez más mientras inclina su cabeza a un lado.

—Nos divertiremos mucho más cuando nos reconciliemos— los dedos de Yeonjun encuentran el cuello desnudo de Beomgyu entre las finas telas de su camisa, deslizando las puntas de sus dedos sobre su cálida piel. La sensación de su toque frío contra el hace que le dé un escalofrío en la columna vertebral, y Beom a su vez se acerca más a él, pero mantiene el espacio de unos centímetros entre sus labios. Hay una anticipación entre ellos, pero también una terquedad y una negativa a ser el primero en romperse.

—Mucho más divertido?— pregunta Beomgyu masajeando las puntas de sus dedos en el cuero cabelludo de Yeonjun. Deja que sus uñas le rasquen suavemente a lo largo de él, lo suficiente para que sus párpados se agiten ante la sensación —Qué quieres decir exactamente?

—Podría decirte...— Yeon ronronea sus palabras, presionando su cabeza en la palma de su mano —o podría mostrarte, pero eso depende de ti— Sus palabras ofrecen a Beomgyu una elección.

Continuará el presionándolo? O se rendirá? Cuando sus manos se retiran de su cabello, Yeonjun gime en silencio, sus ojos medio tapados mirándolo con confusión. Beomgyu se apoya en sus hombros mientras el se retira cuidadosamente de su regazo, cogiendo la tela de su saco con una mano mientras agarra la botella de vino medio vacía con la otra. Yeonjun mira mientras Beom da un paso atrás, sus ojos pegados a los de él mientras lo evalúa y por muy cómodo y atractivo que parezca en el sofá con las piernas abiertas, las mangas medio arremangadas y el pecho levantado por su contacto cercano, Beom lo necesita en otro lugar.

La lengua de Yeon se desliza lentamente sobre sus labios separados mientras Beom eleva la botella de vino a su boca, tomando un pequeño sorbo antes de girar sobre sus talones y caminar hacia la escalera que lleva al dormitorio principal de la cabaña. Sólo sube dos escalones antes de sentir el aliento caliente de Yeonjun en su nuca, con su espalda y brazos apoyados en el mientras ambos suben lentamente. Con una mano todavía sosteniendo su saco fuera de su camino, Beom sube a la cima de las escaleras, sin esperar a Yeonjun antes de llegar al dormitorio.

La habitación ha sido limpiada por el personal del hotel desde la última vez que la vió, y nunca ha estado más agradecido por ello. Soobin y el la dejaron hecha un desastre en sus esfuerzos por prepararse esa mañana, pero en cambio, el personal ha hecho perfectamente la cama, con todas las almohadas decorativas que Beomgyu había tirado al suelo la noche anterior, ha puesto velas nuevas en las mesas de noche y en el tocador, también ha dejado toallas blancas cuidadosamente enrolladas en el borde de la cama, de pronto, un par de brazos tatuados rodean la cintura de Beom, y una sonrisa ilumina su rostro mientras cae de nuevo en el fuerte pecho de Yeonjun.

—Tú habitación es encantadora, mucho más bonita que esos moteles— Le raspa la oreja, los dientes apenas rozan su lóbulo mientras habla —Tienes un encendedor para las velas?