+48 Hours With You (Yeongyu ver.)

Capítulo 5: Pero No Somos Amigos, Yeonjun

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Lo bueno de Daejeon es que sus moteles tienen múltiples habitaciones individuales disponibles a corto plazo. Aunque no se dió cuenta de la importancia de este hecho antes de que este viaje comenzara, tener una tarde de soledad y su propio espacio estable lejos de Yeonjun por primera vez en dos días es nada menos que una bendición. Cuando entra en su habitación privada de motel, que, aunque todavía está muy deteriorada, está a leguas de su anterior motel, Beomgyu cierra la puerta con llave antes de dar un suspiro de alivio.

El silencio en la habitación es maravilloso, y aunque sabe que Yeonjun está al lado, tener una pared entre ellos es un lujo que no da por sentado. Cuando se ducha, no tiene que preocuparse de ser rápido, o de secarse tan rápido como pueda para poder vestirse dentro del baño sin que Yeonjun lo vea. No tiene que preocuparse de que nadie escuche cantando en voz baja bajo el (aunque débil) chorro de la ducha, ni de que se le pegue un incómodo lado de la camisa en la espalda causado por las gotas de agua que no pudo alcanzar en su prisa por secarse.

Y después de la ducha, con algunos de los nudos de su espalda finalmente resueltos,
Beomgyu es capaz de estirarse en la cama doble en el centro de la habitación, con el teléfono en la mano mientras busca los menús de comida para llevar apilados en la mesilla de noche. El examina los menús disponibles antes de decidirse por la comida china para llevar, y en cinco minutos, su pedido de un plato de dos entradas y arroz frito está en camino. Beomgyu suspira suavemente mientras se apoya en las almohadas, deseando que Yeonjun y el hubieran parado en una licorería antes de llegar al motel. Sabe que probablemente podría caminar hasta una, pero ahora que está duchado y cómodo, lo último que quiere hacer es vagar por Daejeon hasta encontrar una botella de Moscato.

En su lugar, Beom se pone a ver en la TV con un clic del antiguo mando a distancia, y comienza a desplazarse por los canales hasta que encuentra una repetición de Dirty Dancing que acaba de empezar. Una divertida pero irónica sonrisa aparece en los labios, es culpa de esta película que Yeonjun y el estén en un improvisado viaje por carretera, en realidad. A HueningKai y Soobin les encantó, e insistieron en que tenían que casarse en un resort en los Catskills similar al de la película. Mientras sus dos amigos cruzan su mente, se asienta en las sábanas mientras Baby comienza su narración, contemplando si debería o no llamar a Soobin para registrarse.

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Sin embargo, justo cuando el pensamiento aparece en su cabeza, el teléfono suena. Beomgyu responde en un momento, sin molestarse en comprobar el identificador de llamadas. Soobin y el tenían la extraña costumbre de llamarse en el momento en que el otro lo pensaba, pero cuando levanta el teléfono al oído, espera oír la respuesta de la voz familiar de su mejor amigo

—Hola?— sin embargo, la voz que oye realmente le sorprende.

—Hey, Beomgyu! Me alegro de que hayas contestado— Yeosang dice fácilmente, su voz crujiendo ligeramente a través del altavoz —Cómo estás?

—Shua!— se levanta en la cama sorprendido, el mando a distancia cayendo de su pecho sobre su estómago a las sábanas —Yo... yo estoy bien, cómo estás tú?

—Oh, está bien, sólo que he estado ocupado con el trabajo, pero eso es lo habitual— Beomgyu puede prácticamente imaginar la expresión neutra de su cara, y cómo se encogería de hombros mientras habla —Cómo va el viaje por carretera? No puedo imaginarme conduciendo durante tanto tiempo como tú tienes que conducir.

—Está... está bien, sí— Beom habla despacio mientras pone su teléfono en el altavoz, balanceándolo sobre su rodilla mientras sus manos empiezan a moverse con sus
anillos —Largo, pero no muy malo.