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Habían transcurrido seis largos años después de aquella despedida. Ninguno de los dos volvieron a hablar mucho menos verse.

El corazón de Adele seguía roto, durante los primeros dos años sus noches solo eran para llorar, estaba segura que nunca podría olvidarlo.

¿Pero quien puede olvidar al primer amor tan fácil?

Hay amores que es imposible sacarlos de tu cabeza y del corazón. En esos cosos se debe optar por esconderlos muy en el fondo. Como un baúl de los recuerdos.

Esperar a que el tiempo pase y los mate de a poco, llenándolos de polvo hasta que dejen de latir, de respirar y de sangrar.

Aunque a veces somos tan necios, que cuando creemos que ya han muerto, nos da por volver abrir ese baúl y revivir lo doloroso de aquellos recuerdos.

Su amor era mutuo y aún así...se volvió imposible.

" Hoy, ¿Quien soy o en quien me convertí? .
Sigo siendo la misma soñadora, pero algo en mi cambio"

Escribió aquel día de octubre, sentada en el balcón de su habitación viendo como terminaban de caer las hojas secas de aquellos grandes arboles.
Ni si quiera puedo completarlo, solo cerró su libreta con los ojos inundados de lagrimas.

Estaba decidida a no volver a pensar en el, en su eterno amor.

Al parecer su amor no fue tan fuerte para superar todo lo que se venía encima, su amor no fue tan fuerte para que él dejara el orgullo atrás, su amor no fue tan fuerte para que el volviera a buscarla.

Al contrario de eso, el quiso encontrarlos en otros brazos. En otro corazón.

Sin embargo no podía negar, que ella siempre sería su debilidad.

Recuerdo (Dos años antes).

–¿Lista mi amor?–Asintió con nerviosismo

Estoy muy nerviosa mamáSoltó un gran suspiro–¿Y si no funciona?

–No perdemos nada con intentarlo Delly, es una operación sencilla y aunque debimos haberla hecho hace mucho tiempo no es demasiado tarde–Aunque ella también se estaba muriendo de miedo necesitaba darle ánimos a su hija

Si funciona, se que probablemente nunca pueda hablar pero yo me conformo con solo escuchar aunque todo eso me requiera de tiempoIntento ser positiva y no pudo evitar ilusionarse

–Haremos todo lo que esté en nuestras manos, pero yo necesito que tú seas feliz, que vuelvas a sonreír–Para Penny era muy difícil ver a su hija tan decaída y tan triste

Sus ojeras eran tan notables, su aumento y baja de peso continuamente, el encierro en el que se encontraba. Ya no era su hija, no era la misma y sabía perfectamente a qué se debía.

Adele prefiero no contárselo, pero la depresión en la que se encontraba no era por cualquier cosa.

(...)

–A ver consuelo–Sonó molesta–Se que Adele te tiene mucha confianza y ahora mismo vas a decirme porque está así–Le reclamo

–Yo no sé nada señora–Se giro para esconder su nerviosismo

–Por favor–Sollozó–Necesito saber que le pasa para poderla ayudar, mi niña se me está dejando morir y no puedo permitirlo–Hubo un silencio

–Esta bien–Hablo–Es por Simon

–¡¿Que?!–Se exaltó–¿Que tiene que ver el en esto? ¿Le hizo algo?

–¿Ha escuchado hablar de los corazones rotos?–Se sentía demasiado confundida

–No te estoy entendiendo Consuelo.

–Ellos estaban enamorados, tenían una relación, pero pasó algo que honestamente no sé qué fue y desde ese entonces Delly está así–Penny caminaba de un lado a otro desesperada sin entender como no pudo darse cuenta

–¿Como no me di cuenta? Ni si quiera pensé que mi bebe estuviera sufriendo por amor.

–Señora, no todas las cosas cuando se rompen hacen ruido. Hay algunas que se derrumban por completo en el más absoluto de los silencios-Se acercó a abrazarla y ella lo aceptó–Lucharemos para que ella vuelva a brillar

(...)

–Vámonos–Se encaminaron a una de las clínicas más reconocidas

Adele solo movía sus manos con nerviosismo, miraba por la ventana las calles que raramente estaban un poco vacías, el frío invadió su cuerpo y solo apretó el abrigo a ella.

–Tranquila mi vida–La abrazo y ella solo se recargó en su hombro cerrando los ojos hasta llegar a su destino

–Es hora–Anunció el doctor

–Todo estará bien, yo estaré contigo mi amor.

Al otro lado de la ciudad Simon se encontraba en su escritorio cuando su celular sonó.

–Hola cielo–Su voz chillona retumbó en sus oídos–Estoy en casa de tu mama preparando la cena con ellos ¿A qué hora llegas?

–Solo terminó unas cosas y voy–Continuo escribiendo–Tal vez en una hora más

–Dice Diego que te apures-Se escucharon risas–Que se muere de hambre

–Lo intentaré–Sonrío y colgaron

Abrió otra pestaña entrando a Facebook, puso su nombre y la página se llenó de fotos, noticias de ella.

Seguía estando igual de hermosa, pero ahora con su cabello rubio, había terminando su carrera y no solo trabajaba como la "modelo estrella" si no que también era una maravillosa diseñadora.

Dio clic en su perfil y no había mucho, probablemente llevaba bastante sin usarlo, solo su reciente cambio de foto. Su cabello estaba corto y se notaba más delgada.

–No puedo seguir pensando en ti–Se recriminó–Estoy casado y se supone que la amo–Acarició la pantalla–Tengo que dejarte ir completamente

Sintió ese dolorcito en el pecho, sabía que esa decisión lo iba a romper en mil, pero en el fondo también sabía que era lo mejor.

Recordó aquel último mensaje que ella le envió, y se sintió caer nuevamente.

"Yo te amé en todo momento, en las buenas y en las malas, y en las peores. Yo te entregue hasta mi alma entera y aún así, para ti eso jamás fue suficiente"

Tú & Yo.Donde viven las historias. Descúbrelo ahora