El Secreto Que Compartimos (Chat Noir/Adrien y tú) [PAUSADA]

7. Llevar La Fiesta En Paz

Narrador

Chat terminó de explicarse y se encogió sin darse cuenta, sintiendo que acababa de fallarle a su querida compañera.

―Así que... te irás en un mes ―repitió Ladybug cruzada de brazos, pensando desde ése instante en quién podría ser el héroe perfecto para reemplazarlo durante su ausencia. 

―Intenté evitarlo. Sabes que me tomo muy enserio mis responsabilidades como héroe.

―Claro que lo sé, Chaton, tranquilo.

―Es algo importante ―volvió a decir, apenado.

Ladybug chasqueó la lengua y tomó su rostro con las manos para que la mirara.

―Lo entiendo perfectamente, relájate. Tienes una vida, no se puede evitar. ―Le mostró su mejor sonrisa y esperó a que él comprendiera que no tenía nada de qué preocuparse.

―Te juro que iré y volveré antes de que... ―ella cubrió su boca con la mano.

―Sólo son cinco días, ¿qué podría pasar en tan poco tiempo?

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Narra ____

Los días pasaron, se volvieron semanas y en cuanto me di cuenta, el día del viaje llegó.

Todos entrenamos muchísimo para ésto y nos preparamos como ningún otro año.

Incluso el testarudo de Adrien vino a los entrenamientos consistentemente, aunque sus escapes a media clase y excusas baratas siguieron como de costumbre.

Por otro lado, mis encuentros con Chat Noir continuaron y se volvieron más frecuentes. Seguimos en contacto aún durante los días más ajetreados y ahora somos amigos… algo así. No es como si pudiera contarme mucho sobre sí mismo sin comprometer su identidad, pero algo es algo, supongo.

―Oh, mira quién viene allí ―la voz de Kagami me saca de mis pensamientos y volteo hacia donde está mirando.

A unos pocos metros de nosotras, Adrien camina hacia el grupo con pasos calmados y sonrisa perfecta, como si estuviera sobre una pasarela.

¿Quién se cree que es?

¿Alguien que ya ha estado sobre una pasarela?

Cállate.

―Me sorprende que su padre no le haya pagado un vuelo privado… ―Mi comentario me hace ganar una mirada reprobatoria de parte de mi mejor amiga.

―_____, ya supéralo ―me reprende con ése tono de voz que me pone los pelos de punta.

―¿A qué te refieres? ―finjo inocencia agitando las pestañas. Kagami rueda los ojos.

―¿No crees que estás algo obsesionada como Adrien?, ya déjalo ir, _____. Crece. Supéralo. ¡Sé libre!