La chica del broche Rojo (MICHAENG) PAUSADA

11. Culpas

—¡Vete!—Le gritó Mina en medio de llantos ahogados entonces Chaeyoung retrocedió con lentitud hasta la entrada de la cueva sintiéndose un monstruo, un ser despreciable. Mina tenía toda la razón, por eso se iría de allí, cumpliría su pedido, desaparecería de su vida.

Al igual que Mina, Chayeoung también lloró desconsolada a los pies de la cascada.

Mina no la quería ver y no la culpaba. Ella era una criminal. ¿Quien se atrevería a confiar en una criminal?

¿Como pasó de ser una estudiante de medicina con las mejores calificaciones a una secuestradora, casi cómplice de asesinato?

Maldijo la hora y el día en que decidió volver a Corea y dejarse llevar por la maldad de sus hermanos. Ella solo debió quedarse en Taiwán, alejada de las fechorías de su familia.

Se maldijo a sí misma por todo, una y otra vez.

Una chica inocente podría morir y todo por su culpa. La culpa y remordimiento la aplastaron esa mañana fría y gris en la Orilla del rio.

****

Al diablo sus hermanos.

Después de haber llorado y lamentado por todo por un buen rato, Chaeyoung tomó una decisión.

Se iría del país cuanto antes.

Dejaría atrás toda esa basura.

Lo primero que a haría era recuperar sus pertenencias en la cabaña, así que hacia allá se dirigió con cuidado de no encontrarse con sus hermanos. Estaba segura que ambos seguían buscándolas y no estaba equivocada. Minho y Dahyun muy temprano volvieron al bosque.

Chaeyoung a toda prisa corrió entre los árboles mojados. La lluvia amenazaba con volver a caer, necesitaba llegar a la cabaña lo antes posible para luego buscar la salida de ese bosque y finalmente irse de Corea.

Lluvia más bosque no era buena combinación por lo que apresuró sus pasos esquivando ramas, rocas, Troncos y árboles caídos. Sin duda el bosque no estaba hecho para cualquier persona.

Después de haber corrido por casi una hora, Chaeyoung empapada de sudor finalmente llegó a la vieja cabaña donde todo inició.

Afortunadamente no había rastro de sus hermanos fuera de la cabaña.

Respiró aliviada detrás de una de las ventanas al ver que tampoco en el interior de la casa había alguien. Eso le alegró.

La lluvia para ese momento ya estaba comenzado a caer en una fina capa enfriado su cuerpo. Maldijo haber dejado su sudadero amarillo en la cueva.

Con mucho cuidado entró por la puerta principal. Necesitaba recuperar su billetera donde tenía su identificación personal y otros documentos importantes, además necesitaba dinero para cuando llegara a la ciudad. Así que, si o si debía encontrar su billetera.

Su plan era:

Recuperar su billetera.

Salir del bosque.

Encontrar algún teléfono y llamar a la policía para informar de manera anónima el paradero de Mina. Esperaba que Mina fuese inteligente y se quedara más tiempo en esa cueva. Pero dada la situación... Mina podría irse de allí por miedo a que los hermanos llegasen.

Y finalmente comprar algún boleto e irse del país.

—¡Maldición!—Exclamó cuando no encontraba su billetera por ningún lado. No estaba en la sala y mucho menos en la habitación donde Mina estuvo. Recordó haberlo sacado de su bolsillo la primera noche para mirar la foto de sus amigas.
—¿Donde estas?—Frustrada caminó de un lado a otro, pero entonces recordó que esa noche volvió a la VAN y allí sacó el broche rojo de su billetera para admirarlo. Seguramente su billetera estaba allí.

Sin perder tiempo salió a toda prisa al exterior donde ya llovía.

—¡Maldición!—La cabeza se tomó. El vehículo estaba cerrado.

No le quedaba de otra mas que romper el vidrio de una de las ventanillas.

Quitándose la playera se la enrolló por el codo para luego estrellarlo contra el vidrio creando un agujero por donde metió la mano y abrió una de las dos puertas.

"Bingo" celebró cuando vio su billetera sobre el asiento del copiloto. Sin dudarlo lo tomó y guardó en su bolsillo trasero rápidamente. En la guantera buscó y encontró un mapa junto a una linterna.

Bien. Ya tenía todo para irse de ese lugar.

Por el vidrio se dio cuenta que la lluvia comenzó a caer más fuerte. Sus hermanos pronto volverían en busca de resguardo. Debía salir de allí de inmediato, ¿pero a dónde iría para resguardarse de la tremenda lluvia?

No. No había tiempo que perder quedándose en algún lugar. Debía iniciar su camino para salir del bosque, ya.

En un cobertizo viejo detrás de la cabaña Chaeyoung se metió por un par de minutos. Necesitaba revisar el mapa y tener una idea de a donde dirigirse.

En el mapa se dio cuenta que si seguía la ruta por donde habían llegado a ese lugar, tardaría muchísimo más tiempo. Tendría que caminar el resto del día y noche para llegar a una carretera transitada. Era demasiado.

Su única opción era ir al Este, cruzando el bosque. Por el mapa se podía ver que había un par de carreteras y un pueblo pequeño.

Quizá le llevaría unas 7 u 8 horas llegar hasta allí, aunque con esa tormenta iba a ser muy difícil tardar solo ese tiempo. Tardaría más.

"No importa" "Vamos tú puedes" Se dijo a su misma antes de guardar el mapa en su cintura dentro de su playera.

Un par de inhaladas y exhaladas dio antes de salir de su escondite y emprender el peligroso viaje bajo la tormenta de lluvia que ya bañaba el bosque entero.

Chaeyoung corría bañada en sudor, casi sin aliento entre los árboles mientras los truenos y lluvia torrencial caía sobre ella. Llevaba aproximadamente dos horas de camino.

Para ese momento sus piernas ya comenzaban a doler y sus pulmones a arder. Cada cierto tiempo, ella descansaba un par de minutos para luego correr otra vez hasta que sucedió algo lamentable.

Todo iba bien, el paso que llevaba era perfecto, pero lamentablemente resbaló hacia un barranco de unos 6 o 7 metros de profundidad cuando intentaba cruzarlo. Lastimosamente cuando estaba descendiendo, uno de sus pies resbaló por el lodo y agua haciéndola perder el equilibrio y caer rodando hacia abajo golpeándose la cabeza y demás cuerpo en el proceso.

Por desgracia Chaeyoung quedó inconsciente en medio del Barranco donde pasaba cierta cantidad de agua.

Si Chaeyoung no despertaba pronto, ella se ahogaría allí.

Chaeyoung necesitaba despertar ya. Si la
Lluvia seguía cayendo con esa intensidad, el agua subiría y ella se ahogaría en el.

Chaeyoung estaba sola, inconsciente en medio de la nada. Lejos de alguien que pudiese ayudarla.

La vida de Mina y Chaeyoung corría peligro esa tarde, casi noche.

¿Podrán salir vivas de ese bosque frío y peligroso? ¿O morirán intentado escapar de allí?

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