El estrés en el cual se sumerge Tzuyu es inhumano, soportando a suspiros todo lo que conlleva ser una estudiante de medicina. Chou no tenía posibilidad de hablar con su familia ya que todo el día se atasca con tareas y los impulsos de sus compañeras.
Lleva días sin poder dormir correctamente, su mente siempre está llena de cualquier tipo de pensamientos que le impiden tener un horario de sueño fijo.
Estaba sentada frente a su escritorio, leyendo un libro de histología que le habían pedido en clase. Tomaba notas en un pequeño cuaderno a la vez que leía la información, estaba tan concentrada que no se percató de la presencia de otra persona en la habitación.
— Tzuyu...
La taiwanesa se asustó un poco, Mina era demasiado silenciosa a veces.
— ¡Mina, me asustaste! — Exclamó volteándose rápidamente, llevándose una mano al pecho; sentía su corazón latir con velocidad por el susto. — ¿Qué necesitas?
Mina y Tzuyu nunca tuvieron una relación muy estrecha, ambas eran muy calladas e introvertidas como para tener conversaciones largas. Tzuyu podría decir que sólo tuvieron dos o tres de estas.
La japonesa se había alejado justo después de que Tzuyu fue asignada en el "cargo". Así que tenía mucho tiempo sin hablar directamente con ella.
Mina tragó saliva, cruzándose de brazos y mirando fijamente a los ojos a su compañera. — Necesito que me hagas un favor.
— ¿Qué tipo de favor? — Chou siente los nervios poniéndosele de punta, y sus manos empezando a sudar por lo mismo.
— Tú entiendes a cuales me refiero.
Mira hacia abajo, avergonzada y con pánico en su rostro.
Siempre pensó que Mina jamás la necesitaría, que ella tenía alguien fuera de la universidad quien la satisficiera; tal como lo tiene Nayeon. Pero empieza a pensar que se equivocó rotundamente al pensar eso.
Deja las cosas sobre el escritorio, levantándose de la silla y caminando hasta donde estaba Mina; evitando en todo momento la mirada de esta, moriría de la pena si la mira fijamente a los ojos.
Mina carraspea. — Si no quieres hacerlo no importa, no te obligaré a nada.
— No pasa nada, para eso estoy. — Tzuyu responde simplemente.
La nipona toma a su compañera de las mejillas, temblaba un poco de sus manos pero la contraria no se percató de eso por estar pensando en otras cosas.
Comienza un beso suave, pues recién ha probado los labios de su menor. Quiere ser suave y no una desesperada como lo son sus otras amigas, Mina no quiere lastimar a Tzuyu.
Pero sabe que aunque fuera la persona más tierna del mundo, seguirá perjudicando a la taiwanesa. Ella no tiene porqué acostarse con Mina.
La lleva poco a poco al borde de la cama, sentándose en esta y separándose de ella. — Quítate la ropa y siéntate sobre mis piernas. — Le da un cálido beso en la frente antes de desviar un poco su vista de la menor, Tzuyu solamente sigue las órdenes sin rechistar quitando de a poco su ropa, teniendo su anatomía al aire libre.
Una incomodidad la rodea, no puede explicarlo con nada, simplemente su cuerpo tiembla ante algo, y sabe lo que es. Tzuyu se sienta en el regazo de Mina, esperando el próximo movimiento de la japonesa la cual no tardó en poner sus manos en su cintura.
En un momento, Mina les da la vuelta.
Tzuyu cae en la cama ante la fuerza de la mayor, esta la deja inmóvil tomándola con un poco de presión en los brazos, sacándole un pequeño quejido.
— Perdóname. — Dice Mina, con un tono de voz un poco arrepentido y asustado.
La mayor suelta a Tzuyu y se reincorpora, pero solo fue para quitarse rápidamente su ropa.
Uno de los suaves dedos de Mina viaja hasta llegar a la caliente entrada de la menor, la japonesa juega un poco con el orificio de la contraria hasta meter su dedo completamente.
Los minutos pasan demasiado lentos para el gusto de Tzuyu, el sudor de acumula en su frente haciendo que algunos de sus cabellos se peguen a esta. La chica ya se está acostumbrando poco a poco a tener dedos ajenos dentro de ella, así que ya no se queja tanto por el dolor o las sensaciones.
De pronto Mina se endereza, subiéndose sobre Tzuyu y acomodándose entre sus piernas. La nipona pone su entrepierna sobre la de su compañera y baja poco a poco hasta rozar ambas. Las dos sueltan un gemido un poco fuerte.
La mayor no espera demasiado antes de moverse de adelante hacia atrás, provocando gemidos por parte de ambas. Los dos cuerpos están llenos de sudor.
Para Tzuyu no es del todo lindo, sigue siendo incómodo. Jamás había estado en esa posición, además de que estaba sensible ya que había tenido encuentros con Momo y Sana.
Comienza a ver oscuro a los minutos, aunque no es la primera vez que lo experimenta, sus sentidos se vuelven más tenues y cierra los ojos lentamente cuando Mina aumenta la velocidad de sus empujes.
Mira detenidamente a la nipona respirando irregular, gotas de sudor caen en el vientre de las chicas. Esa fue su última vista antes de cerrar los ojos y perderse.
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desestresante » tzuyu harem
Fanfiction트와이스 + 쯔위 | tzuyu harem Tzuyu amaba a todas sus compañeras, compartir carrera universitaria y habitación con ellas en aquella enorme escuela. Ella las veía como sus hermanas mayores. Eran una familia. Tzuyu las protegería. Tzuyu las apoyaría. Tzuyu...