Kim Tae-ri: hola, abuela, ya regresé
Bisabuela: ¿cómo te fue?
Kim Tae-ri: bien... me fue... bien ¿qué hiciste hoy?
Bisabuela: me escape a Seúl a comprar unos deliciosos Mandus.
Kim Tae-ri: muy bien abuela.
La chica se encontraba completamente desconectada de todo, antes de salir de su trabajo, le suplico a Lucifer que por favor no fuera con ella a su casa, que necesitaba mantener a su abuela a salvo y no quería que le fuera a dar un ataque al corazón del susto al verlo. Aunque tardo mucho, pudo al fin convencerlo.
Bisabuela: ¿qué rayos te sucede ahora?
Kim Tae-ri: ¿qué?
Bisabuela: ¿qué es lo que te sucede?
Kim Tae-ri: ¿a mí? Nada, todo está perfecto.
Bisabuela: entonces repite todo lo que te acabo de decir.
Kim Tae-ri no dijo nada, simplemente tomo asiento a un lado de donde se encontraba su bisabuela, y sujeto sus manos.
Kim Tae-ri: lo siento, tienes razón, no escuche nada de lo que me has dicho.
Bisabuela: ¿qué te sucede? ¿qué ocurrió?
Kim Tae-ri: creo que el señor Hang ha desaparecido y me siento mal por él, me siento... culpable.
Bisabuela: ¿el señor Hang? Cariño, él no ha desaparecido, hace unas horas lo vi salir de su casa junto a su esposa, escuché que iba a internarse para controlar su irá y dejar la bebida, dijo que quiere cambiar y que quiere ser un mejor hombre.
Kim Tae-ri: ¿qué? ¿de verdad lo viste? ¿él se veía bien?
Bisabuela: el semblante de ese hombre era diferente, en sus ojos pude ver arrepentimiento sincero, incluso cuando me vio se acercó y me dejó un recado para ti.
Kim Tae-ri: ¿un recado?
Bisabuela: él dijo que quería darte las gracias, que fue por ti que decidió cambiar su vida por completo y que no olvides que todos necesitamos siempre la ayuda de los demás. Ahora me dirás qué es lo que te sucede.
Kim Tae-ri: ¿recuerdas las historias que tú, el bisabuelo y mis abuelos me contaban cuando tenía 5 años?
Bisabuela: ¿historias?
Kim Tae-ri: sí, aquellas de seres sobrenaturales.
Bisabuela: ¿cuándo hablábamos de ángeles blancos y negros?
Kim Tae-ri: sí... de ellos.
Bisabuela: claro que lo recuerdo, a ti te gustaban esas historias, todos los días corrías a los brazos de tu bisabuelo y le pedías que te contara esas historias, podían estar sentados hablando por horas, hasta que tenía que ir para separarlos.
Kim Tae-ri: casi no lo recuerdo... no recuerdo al bisabuelo, pero... si recuerdo a mis abuelos, ellos también me contaban esas historias.
Bisabuela: lo hacían porque nosotros se lo contábamos a ellos de pequeños, y ahora solo quedamos tú y yo, vi morir a mi esposo, a mi hija y a mi nieta.
Kim Tae-ri: aun así, seguimos siendo una familia abuela.
Bisabuela: claro que lo somos.
Kim Tae-ri: tienes que vivir por más años.
Bisabuela: ya casi cumplo los 100 ¿quieres que viva algunos más?
Kim Tae-ri: yo espero que sí, eres una mujer muy fuerte.
Bisabuela: solo fui una mujer muy afortunada, lo que me ha mantenido por tantos años viva y fuerte, es algo tan sencillo.
Kim Tae-ri: y ¿qué es?
Bisabuela: el amor...
Kim Tae-ri: vamos abuela, tú no eres cursi, es extrañó escucharte decir algo como eso.
Bisabuela: lo que es realmente extraño es tu comportamiento ¿porqué de pronto me preguntas sobre aquellas historias que solíamos contarte?
Kim Tae-ri: por qué lo que quiero preguntarte es... es algo que jamás pensé que te preguntaría.
Bisabuela: ¿qué es?
Kim Tae-ri: esas historias ¿fueron reales?
Bisabuela: ¿me estás preguntando si los ángeles existen? – observaba a su bisnieta son un semblante algo serio. –
Kim Tae-ri: lo siento... supongo que pensarás que estoy loca al creer que quizás pudieron ser ciertas aquellas historias que me contaban sobre ángeles que bajaban a la tierra ayudando a los humanos y que al final los humanos eran quienes terminaban ayudándolos a ellos.
Bisabuela: no creo que estés loca por pensar eso, porque de ser así, entonces creería que toda nuestra familia lo está, ya que fuimos nosotros los que te contábamos esas historias. Es solo que estoy sorprendida, es decir desde que cumpliste los 10 años, dejaste de interesarte por esas historias, y ahora 10 años después, de sorpresa, me haces estás preguntas.
Kim Tae-ri: es solo que... ahora que recuerdo las historias, creo que jamás les pregunte ¿cómo era posible que seres como ellos, pudieran pedir ayuda de personas tan ordinarias como los humanos?
Bisabuela: nadie es ordinario, hija, nadie... todos los humanos somos extraordinarios a nuestro modo, el hecho de que en las historias que te contábamos dijéramos que los ángeles bajaban porque necesitaban ayuda, era para que aprendieras que cualquiera puede ser el salvavidas incluso del ser más fuerte que pueda existir.
Kim Tae-ri: las historias que tú y el bisabuelo nos contaban... ¿eran reales?
Bisabuela: las historias que les contábamos fueron experiencias que vivieron personas cercanas a nosotros, el que las creas tú o no, bueno, ya es tu elección, nosotros cuando te contamos todo eso, lo hicimos con la idea de que entendieras que existen seres mucho más fuertes y sabios, seres que para algunos es solo mera imaginación.
Kim Tae-ri: entonces... ¿el ser que cuida el infierno también es real?
Bisabuela: claro que lo es, pero, también es de quien más te debes de cuidar, él suele mentir, engañar y confundir a los humanos para su propio beneficio, no se le debe de creer nada de lo que diga.
Kim Tae-ri: ¿por qué? ¿acaso sabes de alguna historia que lo involucre a él?
Bisabuela: no... ninguna historia.
Kim Tae-ri: pero, me acabas de decir que todos necesitamos la ayuda de los demás, sí el necesita ayuda ¿no es correcto que se la demos?
Bisabuela: ¿confiarías en alguien que ha causado dolor en otros solo por satisfacción?
Kim Tae-ri: todas las acciones siempre tienen un detonante. Yo, por ejemplo, no odio a mi padre, sin embargo, tampoco lo quiero cerca de mí, y si el llegará a buscarme, simplemente le pediría que se siguiera manteniendo lejos y apartado de mi vida. Pero mi actitud es algo que él detono en el momento en que él nos abandonó a mi madre y a mí. Es probable que, para aquel ángel desterrado, sea lo mismo ¿no lo crees? Que su actitud se debe al daño causado en algún momento.
Bisabuela: honestamente, no me gustaría averiguarlo, pero, si me gustaría saber ¿tú lo ayudarías?
Kim Tae-ri: no lo sé... quizás... probablemente lo haría.
Bisabuela: te pareces a tu bisabuelo... ayudando incluso sabiendo que pueden lastimarte.

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LUCIFER
FantasíaSiempre va a existir una historia diferente sobre el rey del inframundo, todas contadas desde un punto de vista distinto. Está es una versión más. Quizás un poco más interesante. Tal vez mucho más aburrida, depende la forma en la que lo tomen los de...