El hombre bajo la lluvia

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Ro Woon: comienza a preocuparme tu actitud, creo que esa mesa va a desaparecer si sigues limpiándola de la forma en la que lo haces.

La chica había estado limpiando la misma mesa por más de diez minutos, su jefe había tratado de llamar su atención, pero no lo había logrado. Y eso comenzaba a preocuparle, ella nunca se había comportado de esa forma.

Ro Woon: ¿me quieres decir qué diablos es lo que te sucede?

Kim Tae-ri: ¿disculpa?

Ro Woon: ¿Qué es lo que te sucede? Haz estado actuando muy raro últimamente ¿la bisabuela se encuentra bien?

Kim Tae-ri: sí, ella se encuentra bien.

Ro Woon: entonces dime ¿tienes algún problema?

Kim Tae-ri: no, todo está bien... lo mejor será que siga trabajando, podría llegar un cliente en cualquier momento.

Ro Woon: eso se soluciona muy rápido, - se acercó a la puerta y coloco el letrero de cerrado, - listo, ahora sí ya podemos platicar.

A Kim Tae-ri le sorprendió la actitud de su jefe, es decir, siempre había sido muy amable con ella, era como un hermano mayor, le tenía mucha confianza, pero, no la suficiente como para decirle que el hombre que venía a visitarla era el mismísimo Lucifer. Además de que era muy probable que pensará que se había vuelto completamente loca. Pero necesitaba hablar con alguien, tenía muchas preguntas en su cabeza y si no lograba al menos encontrar la respuesta de alguna de ellas... de verdad perdería la razón.

Kim Tae-ri: de acuerdo, platiquemos, - se sentó en la silla más cercana y observo como su jefe hacía lo mismo, - hace algunos meses yo... bueno, yo he comenzado a estudiar un poco de historia universal, y me han surgido muchas preguntas.

Ro Woon: ¿cómo cuáles?

Kim Tae-ri: por ejemplo ¿será cierto que los deseos que tenemos son tan absurdos que incluso somos capaces de cualquier cosa con tal de hacerlos realidad? Por ejemplo, el presidente de los estados unidos que obtuvo el poder de una gran nación y que ahora por sus malas decisiones está llevando a la quiebra a su país, o Hitler que termino con la vida de millones de personas inocentes por su odio absurdo y que al final terminó dándose un tiro en la cabeza.

Ro Woon: son ejemplos muy extraños, pero, entiendo lo que quieres decir, o al menos eso creo.

Kim Tae-ri: ¿de verdad?

Ro Woon: hay cosas que hacemos que afectan a otros, puede ser en gran magnitud o en una muy pequeña, pero, siempre con alguna consecuencia. ¿Por qué te surgieron esas dudas?

Kim Tae-ri: es solo que, bueno, cada vez que hay algún acontecimiento negativo, se culpa siempre a alguien ¿verdad?

Ro Woon: sí, muchas personas culpan a la suerte, al karma, al destino...

Kim Tae-ri: al diablo...

Ro Woon: sí, a él principalmente, parece que es el culpable más grande de todo lo que sucede en el mundo.

Kim Tae-ri: ¿tú también lo culpas cuando algo malo te sucede?

Ro Woon: es una pregunta muy extraña la que me estás haciendo, pero, mi respuesta es no, yo no lo culpo.

Kim Tae-ri: ¿de verdad?

Ro Woon: claro, aunque no me preguntes porque no lo hago, simplemente no culpo a nadie de lo malo que me puede llegar a suceder, solo lo acepto y sigo adelante.

Kim Tae-ri: supongo que tienes razón.

Ro Woon: ¿era esto lo que te tiene tan distraída?

Kim Tae-ri: lo siento, es que... últimamente el recuerdo de las historias que los abuelos me contaban cuando era pequeña, me han regresado a la memoria, esos cuentos de ángeles, del bien y el mal.

Ro Woon: recuerdo esas historias, incluso cuando yo era un adolescente tu bisabuelo me llegó a contar una historia.

Kim Tae-ri: ¿en serio? Y ¿qué historia fue la que te contó?

Ro Woon: una sobre un viejo árbol en medio de un parque, aunque jamás me dijo que parque era, quizás jamás fue algo real, pero él decía que según las leyendas ese árbol era el favorito de algunos ángeles, y que incluso algunos bajaban para poder admirarlo, era especial porque había nacido de uno de los sentimientos más oscuro de todos. El odio. Era por eso por lo que si lo tocabas te daba una paz inexplicable, y absorbía todas las ideas negativas de tu mente. Me hizo entender que sin importar lo malo que puedas haber experimentado en tu vida, puedes transformar esa experiencia en algo positivo para que tu futuro sea mucho mejor.

Kim Tae-ri: jamás me contó esa historia ¿por qué lo hizo contigo?

Ro Woon: porque cuando era un adolescente era muy rebelde, me drogaba, bebía demasiado y siempre me encontraba metido en problemas. Y no fue, sino hasta que tu bisabuelo hablo conmigo, que pude enderezar mi vida, él tenía ese don de calmar a las personas y ayudarlas, su corazón era tan grande que creo que por eso se detuvo de repente, porque ya no había espacio suficiente en su frágil cuerpo.

Kim Tae-ri: es verdad, mi bisabuelo era algo especial. Y me duele el hecho de que ya estoy olvidando su voz. Nunca será sencillo aceptar la pérdida de un ser querido.

Y de pronto comenzó a llover, la lluvia caía con fuerza y traía algunos rayos junto con ella, así que Ro Woon decidió que lo mejor era mantener cerrado hasta que se detuviera esa tormenta, pero estando atentos por si alguna persona quisiera entrar para protegerse.

Ro Woon: espero que no haya un corto en la electricidad, tenemos muchos alimentos en el congelador y no puedo permitir que se echen a perder.

Kim Tae-ri: no se preocupe jefe, estoy segura de que la lluvia se detendrá muy pronto, - se levantó y recogió el material de limpieza que estaba utilizando, - lo mejor será que vaya a la bodega y guarde esto, ya no lo voy a necesitar, - se dio la vuelta y dio solo algunos pasos cuando escucho nuevamente a su jefe. –

Ro Woon: ¿acaso ese tipo está completamente loco? ¿acaso no sabe que le puede caer un rayo encima? PERO QUE DIABLOS, ESTA PARADO EN MEDIO DE LA CALLE BAJO LA LLUVIA, PERO... NO ESTA MOJADO, EL AGUA NO LO TOCA... KIM TAE-RI, MIRA, EL AGUA NO LO TOCA ¿CÓMO ES POSIBLE ESO?

Al escucharlo, soltó lo que tenía en las manos y regreso para quedar parada a un lado de Ro Woon quien seguía congelado mirando a través de la ventana. Y entonces lo pudo visualizar, Lucifer estaba parado con las manos dentro de los bolsillos de su pantalón, observando directamente a ese establecimiento.

Sin pensarlo dos veces, salió corriendo en dirección de él, se detuvo al estar frente a frente, completamente empapada, el agua chorreando por su rostro.

Kim Tae-ri: ¿ACASO ESTÁS DEMENTE? ¿CÓMO SE TE OCURRE APARECERTE ASÍ? MI JEFE CREE QUE ERES UNA VISIÓN POR QUÉ EL AGUA NO TE ESTÁ TOCANDO.

Lucifer: creo que ahora va a pensar que tú eres tan demente como yo al salir corriendo y encontrarte con el hombre que permanece seco bajó la lluvia.

Era verdad, había sido tan tonta que salió sin pensar en las consecuencias, ¿ahora como le iba a explicar esto a su jefe? Había cometido una completa estupidez. Se dio la vuelta e intento regresar al local, pero Lucifer no la dejó y sujeto su muñeca.

Kim Tae-ri: ¿qué es lo que estás haciendo? Suéltame, debo regresar y explicarle todo a Ro Woon.

Lucifer: es hora de la quinta historia.

Kim Tae-ri: ¿aquí, bajo la lluvia?

Lucifer: te llevaré a otro lado. Y no tienes que explicarle nada a nadie.

No dejó que la chica hiciera más preguntas, ella solo sintió un leve mareo que la hizo cerrar los ojos, y cuando todo dejó de moverse, se dio cuenta de que ya no estaba lloviendo, al abrir los ojos se dio cuenta de que ya no estaban fuera del lugar donde trabajaba, de hecho, ya no se encontraban en Corea.

Kim Tae-ri: ¿dónde estamos?

Lucifer: bienvenida al Palacio de Versalles, en Francia.

Kim Tae-ri: ¿QUÉ HAS DICHO? ¿FRANCIA?


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