Cap 33 °Blancanieves y el Cazador°

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COMO FUE QUE UNA INOCENTE CHIQUILLA PUSO A MI HERMANO COMO UN ESTÚPIDO ARMADA CON UN CLAVO Y YA...-Dijo Ravenna con gran furia sobre su trono mientras los soldados que habían acompañado a Finn se encontraban arrodillados ante ella. "DE TENER UNA ESPADA TENDRÍA MI REINO...Te pedí ayuda y tú la dejaste escapar... ¿Como fue que paso? ¿Dónde está ella?...

Los soldados la siguieron hasta el bosque y la perdieron allí...-Dijo Finn frente a ella mientras podía sentir la ira salir de su hermana.

De nada me sirve que este allí, tú me fallaste NECESITO SU CORAZÓN...-Exclamo Ravenna "No tengo poderes en ese bosque...Tú tienes que encontrar a alguien que lo conozca... a uno que quiera cazarla y creo que tengo una idea de quien puede ser...

Mientras tanto en un callejón tenuemente iluminado, lejos del castillo y de las persecuciones que se habían desarrollado, el cazador se vio envuelto en una pelea clandestina y sombría. Su apariencia desaliñada, un testimonio de su estado problemático, lo había llevado a ser expulsado de un bar local, arrojándolo a las sombras y el peligro. Un amargo intercambio de palabras se había convertido en una pelea, el aire cargado de tensión cuando el hombre al que el Cazador le debía dinero dio un paso al frente, con un brillo depredador en sus ojos. Los adoquines bajo sus pies daban testimonio de su violenta lucha, los sonidos de los puños y golpes resonaban alrededor. Los movimientos del Cazador fueron impulsados ​​por una potente mezcla de ira, imprudencia y ebriedad, cada golpe una liberación de frustración y desesperación reprimida por el fallecimiento de su amada.

El repiqueteo del metal y el roce de las botas contra los adoquines resonaron en el estrecho espacio, la visión de Erick se volvió borrosa, su conciencia se desvaneció cuando un golpe final aterrizó con una fuerza brutal en su rostro. El mundo giró y se retorció a su alrededor antes de descender a un vacío de oscuridad e inconsciencia. Momentos después, el Cazador fue despertado de su estado de inconsciencia por la sensación de agua fría salpicando sobre él. El impacto del líquido helado contra su piel lo despertó de golpe, sus sentidos tambaleándose mientras jadeaba para recuperar el aliento. Parpadeó rápidamente, tratando de dar sentido a su entorno mientras su visión nadaba. Un grupo de hombres que de inmediato reconoció como los soldados de la reina lo rodeaban.

La reina demanda tu presencia...-Dijo Finn mientras lo miraba con asco y burla en su rostro.

No ves que me estoy bañando...-Respondió irónicamente el Cazador mientras se acomodaba en el suelo ya húmedo. Aunque los hombres lo tomaron firmemente por los brazos haciéndolo levantarse con gran brusquedad..." Tranquilos tranquilos...ya" Fue lo último que dijo para luego emprender camino hacia el castillo siendo guiado por los soldados de la reina y su hermano Finn.

°°° pov Cassandra °°°

Mi corazón estaba pesado con una mezcla de tristeza y confusión mientras deambulaba por el castillo, mis pasos resonaban en los pasillos vacíos. El recuerdo del arrebato de ira de Ravenna aún persistía en mi mente, una herida dolorosa que no podía ignorar ella jamás me había tratado así, incluso cuando estaba molesta conmigo ella jamás me había empujado y gritado de esa forma. Solo había querido consolarla, estar ahí para ella en su momento de necesidad, pero mi presencia había sido recibida con frustración e ira. No podía soportar la idea de ser la causa de su angustia, no sabía que era lo que le había pasado por lo que toda la culpa la sentí sobre mis hombros, así que salí a buscarla decidida a reparar lo que se había roto entre nosotras. Mis pasos me condujeron a través de pasillos serpenteantes y grandes cámaras, cada una de las cuales era un testigo silencioso de las emociones tumultuosas que se habían apoderado de mí.

Y luego, cuando doblé una esquina y entre en el gran salón la vi: la mujer que amaba, pero parecía diferente, distante tal y como la vi la primera vez que sus soldados me llevaron ante ella. La imagen que tenía ante mí era como un espejo que reflejaba los mismos temores que había albergado en lo más profundo de mi corazón. Se quedó allí, rodeada de un aura de frialdad e indiferencia, con la mirada fija en algún punto lejano.

"Un retrato de amor", °Ravenna x lectora°Donde viven las historias. Descúbrelo ahora