𝐌𝐢 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐩𝐫𝐨𝐡𝐢𝐛𝐢𝐝𝐨 || 𝐏𝐚𝐛𝐥𝐨 𝐆𝐚𝐯𝐢

8 | Play

Leah.

—¿Le decimos a los demás si vamos al desierto? —le pregunté a Gavi mientras recogía mi ropa que había por la habitación. —No me digas que no,tenéis día libre.

—Bueno,estará bien ir,podemos ir en helicóptero —dijo él desde la cama jugando con la play conectada al televisor de la habitación.

—Pues apaga ya la play,tenemos que bajar a comer —dije abriendo la puerta del baño para que se ventilase un poco.

—5 minutos más —me pidió él moviendo el mando.

—Abajo te espero —cerré la puerta de la habitación de un portazo,tenía hambre y no lo iba a esperar.

—Hola Leah —escuché a Pedri.

—Hola plátanito,¿y mi hermana?

—Lo mismo te pregunto de Gavi y tu hermana está abajo,es que se me había olvidado el móvil —me lo enseñó.

—Jugando a la play,no ha querido bajar ahora que en cinco minutos —dije recordando sus palabras.

—Que pesado es. La play es el amor de su vida —llamo Pedri al ascensor.

—He pensado que podríamos ir al desierto esta tarde —dije entrando en el ascensor.

Pedri asintió haciendo puchero. —Buena idea,ahora lo proponemos abajo.

—Va —sonreí.

Llegamos al comedor y estaban sentados todos comiendo menos Pedri y yo,que teníamos que ir a sacar nuestros platos.

Cogí agua,pasta con tomate,patatas fritas y un yogurt. Y Pedri igual,pero un plátano es don plátanito.

—Bona tarda —salude sentándome en la mesa.

—¿Desde cuando sabes catalán argentina número 5? —preguntó Ferrán riendo.

—Shhhhh,y no pregunten por Gavi,anda jugando a la play —dije mientras me llevaba una patata a la boca.

—Hemos pensado en ir esta tarde al desierto —anunció Pedri.

—¡Dios si! ¡Que buena idea mi amor! —exclamó mi hermana.

-Eh eh,que la idea a sido mía —sentencie.

—Perdón señorita Leah —junto Pedri las manos haciendo un "perdón" riendo.

—Así me gusta,cada cosita donde es —guiñe el ojo y ellos rieron.

—¿A qué hora más o menos? —preguntó Sira.

—¿A las 16:30? —dijo Savanna.

—Pues voy a reservar el helicóptero ahora —dije.

|...|

—¡No has bajado a comer! —grite cuando entré en la habitación. —Oh —dije al ver a Gavi dormido profundamente. —Tsss,Gavi,despiértate —lo moví.

El hizo un movimiento extraño y se cayó de la cama.

—Joder —dijo él en el suelo.

Me intente contener la risa.

—Eres huevon Pablito —dije intentando no reír.

—Calla,me he reventado la espalda.