14 | Alumbrado

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𝐋𝐞𝐚𝐡.

El día del alumbrado llegó.

Acepté en ir con Nayara y su casi algo en los que Savanna y... Pedri,que no sabía que venía,se apuntaron.

Mi hermano había vuelto de Argentina,pero iría con Wada y Lena a ver las luces.

—¡Apúrate Savanna! ¡Son las 6!—le grité.

Estábamos los tres en el sofá viendo Outer Bancks.

—Joder,que susto Leah —se llevó una mano al pecho.

—¿Tanto tardaréis? —nos miró Pedro alzando una ceja.

—Si no eres chica,no lo entenderás Pedro pony —dije riendo.

—Vale Leahita —dijo el.

—Pesado —dije subiendo las escaleras.

Mi hermana y yo nos metimos en un cuarto de baño diferente.

Me duche y me vestí.

Me puse un vestido (con medias color carne) beige de terciopelo con unas arrugas en las caderas.

Me puse las zapatillas de estar por casa antes de ponerme los zapatos que usaría y me metí en el baño.

Allí estuve como 40 minutos haciéndome unas ondas en mi largo pelo.

Me maquille y por último,los labios rojos,un clásico,como Taylor.

Salí del cuarto de baño poniéndome unas botas negras con algo de tacón.

Fui hasta el joyero y me coloqué de todo un poco (anillos,pendientes,pulseras...)

Por último,preparé un pequeño bolso donde guardé varias cosas necesarias.

Me mire en el espejo una última vez.

Me senté en la cama y abrí tiktok.

Allí estuve unos minutos hasta que llamaron a mi puerta.

—¿Puedo pasar? —oí la voz de Pedri.

—Sí —le respondí y él entró para luego cerrar la puerta.

—Hace tiempo que no hablamos como buenos mejores amigos,cuéntame cómo estás —me dijo el sentándose a mi lado. —Tú hermana se estaba maquillando o no se y ya me vestí,me duche y hasta casi me da tiempo de ponerme ha hacer croquetas —dijo mi cuñado riendo y provoco mi risa.

—No sé ni cómo estoy Pedri —dije sincera y suspirando.

—¿Que te ocurre?

Que estoy enamorada de Gavi —confesé.

Pedri me miró triste.

Cerré los ojos pensando en que la había cagado hasta que sentí el calor de Pedri junto a mi cuerpo.

—Creo que el de ti también Leah —acarició Pedri mi espalda.

—Pero no quiero autolesionarme a mi misma Pedri,yo no creo en el amor.

Fuimos interrumpidos por Savanna que abrió la puerta.

—¿Pasa algo? —preguntó ella.

—No —sonreí falsamente. —¿Estas ya? —dije y ella asintió.

Le levanté y me eche perfume.

Savanna y Pedri entrelazaron sus manos y se besaron mientras bajaban.

Devolví la vista en el espejo de mi dormitorio suspirando y con ganas de ahogarme en mis propias lágrimas.

𝐌𝐢 𝐚𝐦𝐨𝐫 𝐩𝐫𝐨𝐡𝐢𝐛𝐢𝐝𝐨 || 𝐏𝐚𝐛𝐥𝐨 𝐆𝐚𝐯𝐢Donde viven las historias. Descúbrelo ahora