Sospecha

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Mischa entró al consultorio de su hermano con una enorme y brillante sonrisa en su rostro, esperando ver a su joven amigo detrás del escritorio donde solía trabajar. Para este punto se había aprendido los horarios de Graham, así que no había duda de que él estaría ahí. Sin embargo, grande fue su sorpresa cuando se dio cuenta de que aquel lugar estaba vacío.

Retuvo el aliento y miró a su alrededor, temiendo lo peor. Aguardó unos minutos solo para asegurarse que no fuera una breve pausa para ir al baño o algo por el estilo, pero después de media hora se dio cuenta de que Will en serio no estaba ahí.

Hannibal salió después de los cuarenta minutos, observando con curiosidad el gesto contrariado de su querida hermana.

—Hanni, ¿Dónde está Will? — fue lo primero que escapó de sus labios, y el doctor Lecter se limitó a suspirar con cansancio.

—Llamó esta mañana para reportarse enfermo. — bueno, algo así.

"Hannibal, hoy no iré al consultorio. No me siento bien. Lo lamento." En realidad, eso era lo que Graham le había escrito a través de un mensaje de texto, y el hombre mayor supuso que el chico estaba sobrellevando su ruptura de la mejor manera.

—¿Y qué haces aquí? ¿Por qué no has ido a verlo? ¿Y si necesita algo? ¿Y si es grave? ¡Oh Dios, debemos ir a verlo!

—Querida, por favor, calma. — el hombre se acercó a tomar a su consanguínea por los hombros, antes de dirigirla al sillón más cercano para que pudiera tomar asiento. Mischa así lo hizo, analizando las acciones del contrario cuidadosamente. Hannibal se veía demasiado calmado.

—Will está enfermo, Hanni. Enfermo y solo, ¿cómo es que eso no conmueve tu corazón?

—Cariño, claro que me conmueve. Sucede que Will mencionó que no se sentía dispuesto a ver a nadie, así que respeto su decisión, por ahora. Pienso pasar más tarde para ver como está, y si es necesario, cuidarlo.

Las delgadas cejas rubias de Mischa se fruncieron en angustia al escuchar esas palabras.

—Cuidarlo, claro. ¿Y qué le dirás a Alana, Hanni? ¿Has hablado con ella acerca de lo que sucede entre Will y tú?

—Estoy buscando el momento óptimo, y de paso ofrecerle los papeles de divorcio en ese mismo instante. Mi abogado está llevando el proceso, no debe de tardar.

La notó morder sus labios, antes de terminar desviando su mirada hacia el suelo de la habitación.

—Es tan triste, ella en verdad quería que las cosas entre ustedes dos funcionaran.

—Me siento terrible, en verdad. No poder cumplir con las expectativas de este matrimonio es algo que probablemente nunca pueda superar. La culpabilidad me acecha todas las noches. — mintió, ganándose una risita floja por parte de la menor.

—Tú y yo sabemos que eso no es cierto, Hannibal. Luces demasiado feliz para un hombre que está a punto de divorciarse.

Esta vez ambos rieron, cercanos como solo dos hermanos podrían serlo.

—Lo lamento Mischa, sé que cometí un error, pero no amo a Alana.

—Lo sé, no puedo evitar sentirme un poco triste por ella, pero es obvio que lo que sucede entre Will y tú es algo especial. Esa mirada de adoración que le diriges cada vez que están juntos es... diferente.

—Lo es. — su voz fue suave, mientras acariciaba los cabellos dorados con cariño.

———

Will no era muy bueno manejando el rechazo. Bueno, de hecho, era pésimo.

Sus ojos estaban hinchados por el llanto de la noche anterior, su garganta dolía y en general se sentía como la mierda. Todo gracias a Jo y su crueldad disfrazada de honestidad.

Casual Affair | HannigramDonde viven las historias. Descúbrelo ahora