Mi pequeño mundo

Capítulo |15

Red Hot Chili Peppers
~Chloe~

—Vamos, rubia —pronunció con tanta seguridad que no pude resistirme.

No sabía en donde estábamos, hace mucho tiempo que no salía tan lejos de mi vecindario que no recordaba los lugares que existían alrededor. Así que me limité a mirarlo con extrañeza.

Sabía que no me diría nada hasta que lo empezará a seguir. Y sin hacer tantas preguntas me limité a tomarlo de la mano en un acto repentino que lo tomó por sorpresa. Al igual que a mi.

—¿Qué hacemos aquí? —pregunté viendo como abría la puerta principal.

—Le pagué un par de horas extras a un conocido que trabaja aquí, para que pudiéramos venir después de que cerrarán.

Solté un jadeo involuntario al escuchar su confesión. ¿De verdad le importaba tanto para que hiciera eso por mi?

No lo quería aceptar, pero en el fondo sabía que si lo era. Todo lo que esté tiempo Lucas hacía, lo hacía para que volviera a vivir y fuera feliz.

—Me has dejado sin palabras por segunda vez en una noche —deje caer después de algunos minutos de silencio.

Él soltó una cargada y tiró de mi mano, siendo ese movimiento el que me hizo consciente de que habíamos estado tomados de la mano todo este tiempo.

Mis mejillas se ruborizaron, cual tomate. Nunca me había ruborizado tanto cómo estás últimas semanas. Solo Lucas tenía ese efecto en mi... Y no podía negar que no me molestaba en absoluto.

•

Al entrar había una sala obscura, repleta de todas las constelaciones. Entre las que principalmente destacaba la Osa Mayor. O igual era porque apenas tenía conocimiento sobre las constelaciones, me encantaba mirar al cielo estrellado y verlas. Pero nunca había decidido averiguar sus nombres o cómo llegan a crearse.

Simplemente lo sabía porque mi padre me mostró esa constelación.

Tomé una bocanada de aire. No era un momento para pensar en ello, no me ataría al pasado. No en este momento.

—Si te soy sincero, siempre soñé con ir al espacio y visitar todos los planetas —habló con la vista perdida en el techo, que simulaba ser la galaxia entera—. Pero después de un tiempo me di cuenta de que era solo eso, un sueño.

Me giré en busca de su mirada. Se veía triste y apagada al hablar de ello, era como si le siguiera doliendo.

—Aveces nos alejamos tanto de lo que soñamos, que se nos olvida que puede llegar a ser real —murmuré. Mientras Lucas se tornaba pensativo.

—Tienes razón —dice, atrayéndome hacía un abrazo—. ¿Alguna vez escuchaste Red Hot Chili Peppers?

—No, esa es una de las pocas bandas que no he escuchado.

Se separó indignado, lo cual me generó una sonrisa. Una real.

—Dios, ¿En qué universo has estado metida? —habló en broma—. Son una banda, con canciones realmente buenas.

Sacó su teléfono y en medio del planetario, con las estrellas literalmente rodeándonos, comenzó a sonar una canción que el nombró I Could Die For You.

Yo me quedé perpleja. Era una escena que quisiera guardar para siempre en mi memoria.

—¿Me permite esta pieza, linda rubia? —murmuró extendiéndome su mano.

—Por supuesto, entrometido.

Es así como comenzamos a bailar de una manera muy des sincronizada al ritmo de Hot Chili Peppers. Convirtiéndose en un momento memorable, cuando me incliné para profundizar nuestros labios en un casto beso.

Definitivamente había saltado de la muralla y no temía por el impacto.