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17 DETALLES

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El mensaje de Seto a Atem, "Me encanta cómo eres tan atento", resonaba en el corazón de Seto. Después de todos los regalos y gestos de cariño que habían compartido a lo largo de su relación, Seto quería asegurarse de que Atem supiera cuánto valoraba su atención constante y su afecto.
Habían planeado un fin de semana juntos en una cabaña aislada en las montañas. 

Seto sabía que Atem disfrutaba de la tranquilidad y la belleza de la naturaleza, y había elegido este lugar con mucho cuidado. La cabaña estaba rodeada de bosques exuberantes y ofrecía una vista impresionante de un lago cristalino. Era el lugar perfecto para una escapada romántica.

Cuando llegaron a la cabaña, Atem quedó impresionado por la belleza del entorno. El aire fresco de la montaña y el canto de los pájaros llenaban el ambiente, y el lago reflejaba el cielo azul como un espejo.

"Seto, esto es muy hermoso ", exclamó Atem, admirando la vista. "No puedo creer que hayas planeado todo esto."

Seto sonrió y tomó la mano de Atem. "Quería que fuera un fin de semana especial para nosotros, Atem. Para celebrar nuestra relación y todo lo que significa."

Atem asintió con gratitud, sintiéndose afortunado de tener a alguien como Seto a su lado. "Seto, nunca podría igualar los detalles que me das"

Después de instalarse en la cabaña, Seto condujo a Atem a una pequeña área al aire libre que había preparado cuidadosamente. Había dispuesto una manta y almohadas, creando un lugar acogedor para relajarse juntos.

"¿Qué tienes planeado esta vez?¡Cuentame!" preguntó Atem, curioso.

Seto sacó una caja de picnic que había traído consigo y comenzó a sacar deliciosos bocadillos y bebidas. "Quería que pasáramos un tiempo juntos, solo nosotros dos. Así que pensé en un picnic al aire libre."

Atem sonrió y se sentó en la manta junto a Seto. Comieron y hablaron mientras disfrutaban del sol cálido y la brisa fresca de la montaña. Seto había preparado todos los platillos favoritos de Atem, desde sushi hasta pastel de chocolate.

Después del picnic, Seto llevó a Atem al borde del lago. Había alquilado un bote pequeño y les remaron juntos hacia el centro del lago. Mientras se deslizaban suavemente por el agua, Atem apoyó la cabeza en el hombro de Seto.

"Gracias por esto, Seto", dijo Atem en voz baja. "Es el mejor fin de semana que he tenido en mucho tiempo."

Seto rodeó con su brazo los hombros de Atem y lo atrajo más cerca. "Estoy feliz de que lo estemos disfrutando juntos, Atem."

El sol comenzó a ponerse, bañando el cielo de tonos dorados y rosados. Seto remó de regreso a la orilla y ayudó a Atem a salir del bote. Luego, lo condujo de regreso a la cabaña, donde había preparado una cena especial para dos.

La cena consistía en una selección de platillos gourmet, con velas encendidas y música suave de fondo. Seto había creado un ambiente romántico y acogedor, perfecto para una noche especial.Atem miró a Seto con admiración. 

"Eres un verdadero romántico, ¿sabes?"

Seto sonrió y tomó la mano de Atem. "Solo quiero que sepas cuánto te amo y cuánto valoro tu atención y cuidado, Atem. Eres el faro en mi vida."

Atem sintió un nudo en la garganta mientras miraba a los ojos sinceros de Seto. 

"Y tú eres el mío, Seto."

Después de la cena, se retiraron a la cabaña y se acurrucaron juntos frente a la chimenea. Seto había traído una botella de vino especial y compartieron copas mientras hablaban en voz baja y se reían juntos.

Seto se levantó de repente y regresó con una pequeña caja en la mano. La entregó a Atem con una sonrisa.

"Esto es para ti, Atem", dijo Seto.

Atem abrió la caja y encontró un reloj de arena, bellamente tallado en madera. Era un objeto encantador y significativo.

"Es hermoso", dijo Atem, admirando el reloj de arena. "¿Por qué me lo estás dando?"

Seto se sentó junto a Atem y tomó el reloj de arena en sus manos. "Quiero que este reloj de arena sea un recordatorio de nuestro tiempo juntos, Atem. Cada grano de arena representa un momento que hemos compartido, y cada vez que mires este reloj, quiero que recuerdes cuánto significas para mí y cuánto valoro nuestra relación."

Atem miró a Seto con los ojos brillantes. "Seto, eres increíble. Cada uno de tus regalos es especial y significativo, y este lo es aún más."

Seto acarició la mejilla de Atem con ternura. "Te amo, Atem, y estoy agradecido por cada momento que pasamos juntos."

Atem abrazó a Seto con fuerza, sintiendo la calidez y el amor que fluían entre ellos. El reloj de arena se convirtió en un tesoro que Atem guardaría por el resto de su vida, un recordatorio constante de su amor y de la atención inquebrantable que compartían.

Esa noche, mientras se acurrucaban juntos bajo las estrellas y el crepitar de la chimenea, Atem se sintió más amado y apreciado que nunca. Sabía que tenía a alguien que valoraba cada detalle de su ser, y que su amor era mutuo y eterno. Su relación se había convertido en un vínculo inquebrantable que los llevaría a través de todos los desafíos de la vida.