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Días después.

- ¿Así que pasaron el celo juntos? - preguntó Jorge cómo si fuera lo más normal del mundo mientras bebía su taza de café de todas las mañanas.

Joaquín se atragantó con su desayuno y Emilio rió algo apenado.

- Dá igual si no me quieren decir. De todos modos sé que si lo hicieron - dijo Jorge sonriendo.

Joaquín estaba sonrojado, mientras las imágenes del celo de Emilio se reproducían en su mente, se sentía avergonzado de que su hermano supiera eso.

- Cállate pelinegro - gruñó Emilio. 

Jorge bufó.

- ¿Éste animal no te lastimó hermanito? - preguntó mirando al rizado.

- Jorge - chilló avergonzado cubriéndose el rostro con sus manos.

- Está bien, ya entendí, nada de preguntas - dijo riendo - Yo que quiero ser buen hermano y saber si el imbécil éste te lastimó y así me pagas.

- Basta de ofenderme - dijo Emilio.

Jorge rió.

- No te lo tomes tan personal Lewis.

- Creo que será mejor irme a escuela - susurró Joaquín con el rostro rojo de vergüenza.

- ¿Puedes caminar? - preguntó divertido el pelinegro.

- Basta Jorge - chilló de nuevo Joaquín - No pasó nada de lo crees. Y puedo caminar perfectamente. 

- Si no hicieron lo que creo, ¿Qué hicieron encerrados todo éste tiempo? - preguntó curioso el pelinegro.

- Nada que te importe - contestó el alfa.

- Que mal amigo y hermano tengo, no pueden dejarme con la duda.

Joaquín estaba comenzando a molestarse.

- Cállate y come - dijo Emilio molesto.

- No hasta que me digan que pasó en esa habitación.

- ¡Le dice una mamada! - gritó Joaquín fastidiado.

Jorge escupió el café que tenía en su boca y miró a su hermano y al alfa sorprendido.

- No me mires así, tú querías saberlo.

- Hermano cuándo te dije que le hicieras una mamada, era de broma. Jesús, que pésimo hermano soy, a la próxima ya no te diré ninguna broma así - dijo sorprendido.

- ¿Acabas de darte cuenta que eres un mal hermano?

- No, en realidad soy el mejor hermano del mundo - bromeó - ¿Y tanto tiempo juntos por una mamada? - preguntó.

- Bueno una mamada por... - habló Emilio.

- ¡Emilio! - chilló Joaquín interrumpiendo al alfa.

- De acuerdo, no digo nada - se rindió.

- Me voy de aquí antes que se te ocurra hacer otra pregunta - dijo Joaquín tomando su mochila.

- Te llevo omega - dijo Emilio levantándose rápidamente de su lugar.

Joaquín sonrió. 

- No es necesario.

- Quiero hacerlo - susurró.

- Está bien. Voy a mi habitación por algo que se me olvidó y regreso - dijo Joaquín dándole un beso en los labios al alfa antes de correr a su habitación.

Alfa Estúpido // Adaptación Emiliaco OmegaverseDonde viven las historias. Descúbrelo ahora