Trenton Sawyer ha luchado con sudor y sangre para salir de una vida de violencia y autodestrucción. Años y años de entrenamiento le han llevado a convertirse en uno de los mejores luchadores de la MMA en las últimas décadas.
Sin embargo todo ese sac...
No recuerdo cuándo he llegado a casa, ni el tiempo que ha pasado.
Solo sé que me arden los nudillos y dejo que el dolor fluya porque es mi única vía de escape para canalizar la ira que siento porque mis planes se hayan ido a la mierda.
Ese gilipollas me ha echado de allí como su fuera un perro y no he podido evitar tener un deja vú, del peor momento de mi vida.
Lárgate de mi casa, pedazo de mierda.
No vales para nada, nos has decepcionado.
Fuera, no te queremos aquí. Si vuelves te daré la paliza que te mereces. No eres mi hijo.
— Andrey, cálmate maldita sea. Vas a destrozarte las manos.
No le hago caso y sigo golpeando el saco como un maníaco. Estoy tan furioso que veo rojo y solo me imagino la cara de Trenton con cada puñetazo.
— ¿Cuánto lleva así?
— Desde que llegó. Ni siquiera ha dejado que le vende las manos. Entró hecho una fiera y empezó a soltar golpes, cualquiera se le acerca.
— Andrey, tienes que parar.
— Déjame — gruño —. Voy a destrozarlo. Cuando acabe con él no será capaz ni de subir a esa estúpida jaula. No querrán contratarlo ni en el supermercado. Pienso humillarlo como él me humilló a mí.
Y ha vuelto a hacerlo una vez más.
Todo lo que me ha pasado es por su culpa.
Mi vida iba perfectamente antes de cruzarme con él en aquel maldito combate cuando tenía solo diecisiete años. Se supone que no debería haber peleado siendo menor, porque además él ya era bastante célebre por entonces, pero mi padre insistió.
Hice todo lo que pude por ganarle, lo juro, pero no pude y los decepcioné tanto...
La gota que colmó el vaso tuvo lugar tres años después, cuando después de partirme el lomo entrenando y trabajando durísimo, un patrocinador me ofreció la oportunidad de mi vida.
Algo serio y legal, lo llamó. La MMA abría sus puertas para mí y todo fue sobre ruedas.
Gané mis cinco primeros combates y me hice de oro. La gente sabía quién era, me respetaba y hasta me quería. Cuando me veían por la calle me paraban para que les firmara y para sacarse fotos conmigo.
Pasé de ser un don nadie a un campeón. Y por primera vez mi familia estaba orgullosa.
Hasta que me tocó enfrentarme a él. Creí que podría ganarle, pero lo subestimé y me acabó dando una paliza.
Al llegar a casa mi padre me soltó un puñetazo en la boca y mi madre me tiró a la cara una bolsa con toda mi ropa. Me echaron de allí sin miramientos, prácticamente a patadas...y desde entonces no quieren saber nada más de mí.
Todo por esas dos putas derrotas que me siguen pesando como una losa a cuestas. Pero se acabó; no habrá una tercera porque pienso remediarlo. Y no me importa lo sucio que tenga que jugar para conseguir la victoria que me merezco.
Solo entonces me perdonarán. Y me querrán de nuevo con ellos.
Siento la tela resquebrajarse y un fuerte ardor en los puños. Al enfocar la vista veo que he golpeado tan fuerte el saco que la tela se ha rajado y unos brazos tiran de mí hacia atrás cuando lo pateo con todas mis fuerzas, sintiendo que me hierve la sangre.
¿Por qué destrozo todo lo que toco? Es culpa suya, me ha hecho perder el control y ahora me ha estropeado el plan.
Voy a tener que cambiar de estrategia.
— ¡Soltadme! — bramo, revolviéndome como un loco. Al final, acaban liberándome con cautela.
— Andrey...— empieza Sacha. De los dos es con quien mantengo una relación más cercana. Él es quien me abrió las puertas de este mundo que me dio y me quitó tanto a la vez.
— Voy a acabar con Trenton Sawyer, eso lo juro. Y estaréis en primera fila para verlo — gruño y me abro paso hasta el baño para lavarme la cara y limpiarme las heridas.
Necesito tranquilizarme, pero me quedan pocas píldoras.
— JODER — rujo, estrellando los puños contra la plancha del espejo, que cae a plomo al suelo. Los pedazos fragmentados reflejan mi imagen distorsionada y enloquecida.
Mi sangre mancha las baldosas.
No me importa.
Lo único que quiero es venganza.
Y solo hay una persona que puede ayudarme en mi siguiente paso.
Como siempre lo ha hecho hasta ahora.
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¿Cómo quedamos, señoras? ¿Qué os ha parecido el Pov de Andrey? ¿Opiniones?
Ya quedan poquitos capis jo, no quiero que se acabe 🥺
