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Para cuando todas las pecas visibles de Ron ya han sido memorizadas y contadas de la manera correcta, es para ese entonces cuando después de semanas de orbitar a su lado y admirarlo decide que el picor en sus labios es demasiado como para poder soportarlo, y que es momento de que libere todo lo que no ha hecho en meses.
El arena le pica en los pies tal como le pican los labios y una vez siente el aire a su costado y la exhalación de aire que Blaise suelta, él se da el permiso de recostarse sobre la arena y liberar el aire retenido de sus pulmones mientras trata con todas sus fuerzas separar sus manos para que no se note que esta nervioso.
Nada de eso funciona para quitarle aquel peso que parece cambio a su estomago en el momento en el cual se recostó y el moreno le miro con lo que puede jurar Ron, la mirada más suave y aun así amanzánate que ha visto en su vida.
Así que toma aire de nuevo, liberando con las suavidad sus manos y dispersando su cabello rojo por toda la arena mientras espera que el moreno pregunte lo que quiere.
Y lo sabe.
Los dos lo saben.
Saben muy bien que hay nervios a flor de piel, saben que el aire aparte de salado se ha vuelto tenso y pesado, saben que su cuerpo manda mil y un señales en las cuales no pueden parar a mirarlas y prestarles atención ni por un milisegundo.
Saben por que están específicamente allí.
Y la gente se ríe, por que la gente piensa que los adolescentes son estúpidos y no saben nada. Pero en ese momento, justo en esos segundos de miradas ardientes que queman la piel, lo saben absolutamente todo. Y piensan que pueden comerse el mundo sin dejar migajas.
Pero solo atinan a saludarse.
El moreno se recarga a un lado del pecoso y cuando siente que todo esta perdido en su mente, alma, cuerpo y corazón, el sonido de la respiración del contrario le devuelve la vida como si de un elixir mágico se tratara.
-¿Pasa algo?-pregunta
-Pasa mucho.-contesta. Y es la única respuesta que puede darle mientras se aclimata a la calidez del cuerpo contrario mientras el frio en sus brazos y piernas se hace más notorio.
-Siendo gryffindor, ni me imagino.-bromea el castaño, exhalando una suave risa y volviendo a aspirar el aire mientras sabe que Ron lucha consigo mismo para evitar mirar como su pecho sube y baja-Pero de verdad, ¿pasa algo de lo cual debería saber?
-No sé si lo deberías saber.-responde el pelirrojo, por fin mirándolo a los ojos en los minutos que llevan sobre la arena-Pero algo así.-es lo que termina por decir.
La situación parece como agua en sus manos y Ron la deja ser y fluir sin remordimiento, o tal vez un poquito.
El silencio los ahoga en tan solo segundos y cuando Blaise siente un poco de aire que le hace saber que es capaz de hablar, lo hace.
-Ron, tienes más de mil y un pecas.-es lo que le dice.
Ron ríe, Blaise lo imita
-¿Eso no era lo más obvio del mundo?-le pregunta con una sonrisa ladina, Blaise asiente como puede.
-Las conté todas.-le dice con voz suave y calmada, efecto que busca lograr en Ron pero falla miserablemente.
-¿En serio?-Ron pregunta, incorporándose e inclinándose al moreno.
La sorpresa en su rostro es palpable y el castaño nunca pensó en que podía tener ese tipo de reacción al decirle (lo que para es él) el dato más tranquilo y suave del mundo.
-Las memoricé.-le contesta, incorporándose de la misma manera para quedar al menos un poco más (si es posible) cerca del pelirrojo, quien le sigue mirando con suma sorpresa.
-Blaise...eso es...
-¿Raro? Ya sé.-interrumpe, rascándose la nuca en señal de vergüenza.
-Eso es lindo.-termina su frase Ron.
-Yo sigo pensando que es raro.-insiste el moreno.
-Un poco. Pero lindo.
El silencio se vuelve a hacer presente, pero no los ahoga, los abraza. Los abraza con una manta suavecita que pueden distinguir es comodidad y seguridad. El silencio les da permiso de pensar lo que sigue después de esto en vez de apurarlos. Es cómodo, es normal. Simplemente es.
Simplemente son.
Simplemente se sonríen y los brillos aparecen en sus ojos. Sólo existen junto al otro.
Sólo se juntan aún más, hasta que el silencio ya no está presente y su burbuja desaparece para dejarlos con la realidad.
Y la dura, cruda y horrible realidad les golpea una vez pueden respirar el mismo aire que el otro, en el momento en el cual pueden distinguir el sabor de sus bocas y sus manos están el los hombros o torso del contrario.
Y los dos piensan que tal vez la realidad en realidad no es tan dura, cruda y horrible como se les ha dicho. Por que la realidad es que se citaron en el lago negro por las mismas razones, la realidad es que se están besando, la realidad es que no fueron necesarios sus discursos de cinco minutos para demostrarse cuanto han esperado por ese momento.
La realidad es que se quieren. Y están ahí por que quieren estar ahí, que es lo mejor de todo el caso.
-Merlín.
Cuando se separan por la falta de aire en sus pulmones, desean que el aire desaparezca por completo.
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Mil Y Un Pecas || Blairon
FanfictionPecas. Pequeñas manchas cafés esparcidas por la piel que suele ser catalogada como una de las características físicas mas hermosas. Y también las causantes de apodos, cuentas, amigos y romances de por medio. ༊*·˚ AU ༊*·˚ Los personajes le pertenecen...